La oposición desafía a Maduro y mide su poder en un referéndum simbólico contra la Constituyente
- Al menos una persona ha muerto y varias han resultado heridas de gravedad en un tiroteo
- Los venezolanos han votado en una consulta que no cuenta con el aval del Gobierno
- Cinco expresidentes latinoamericanos han ejercido de observadores
- En paralelo, el chavismo convoca un ensayo general de las elecciones del día 30
La oposición venezolana ha lanzado este domingo su mayor desafío al Gobierno del presidente Nicolás Maduro, calificada de ilegal desde el oficialismo, en la que espera que el pueblo se pronuncie masivamente contra el proceso constituyente impulsado por el chavismo. El Gobierno ha tildado esta votación de ilegal y, en respuesta, ha convocado un simulacro de las elecciones del próximo 30 de julio para poner a punto la maquinaria chavista.
Un total de 7.186.170 venezolanos han participado en la consulta popular, según ha informado la rectora de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Cecilia García Arocha. La catedrática, que integra, junto a otros rectores universitarios, la "comisión de garantes" de este plebiscito opositor hecho al margen del Poder Electoral, ha explicado que ya se ha escrutado el 95 % de los votos, aunque no adelantó el resultado.
Los centros de votación han abierto puntuales sus puertas a las 7.00 de la mañana. La oposición ha habilitado 2.030 puntos de participación en todo el país, mientras que en el extranjero hay 667 centros de votación en 100 países, 72 de ellos en España. De hecho, la diáspora ha sido la primera en votar.
La jornada ha transcurrido con varios altercados que, al menos, han dejado un fallecido. El Ministerio Público (MP) venezolano ha confirmado la muerte de una mujer de 61 años y enfermera de profesión. Además, otras tres personas han resultado heridas. Estos hechos se han producido en una zona del oeste de Caracas donde tuvo lugar un ataque a tiros de un grupo armado frente a un centro de votación de la consulta opositora contra el proceso Constituyente.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) de Venezuela, el opositor Julio Borges, ha indicado que los 2.030 centros de votación previstos para la consulta popular contra el Gobierno de Nicolás Maduro operan al 100% y que solo cuatro de ellos debieron ser reubicados. Por otra parte, el vicepresidente del Parlamento de Venezuela, el opositor Freddy Guevara, ha señalado que la participación en la consulta supera lo esperado apenas tres horas de iniciado el proceso, por lo que harán lo posible para que el flujo no se atrase.
"Tenemos 2.030 puntos soberanos en todo el país, 14.404 mesas de votación (...) Ya listos y acreditados tenemos 47.272 miembros de mesa en todo el país (...) tenemos más de 80.000 voluntarios regados por toda la geografía de nuestro país", ha detallado el jefe de campaña para este referéndum, Carlos Ocariz, en rueda de prensa desde Caracas.
El Ministerio Público (MP) ha confirmado la muerte de una mujer y varios heridos en una zona popular del oeste de Caracas en una situación "irregular" en el sector, donde se ha registrado un suceso violento durante la consulta de la oposición.
La consulta opositora tiene como objetivo cuestionar la legitimidad de Maduro en medio de una grave crisis económica y tres meses de protestas violentas en las calles que se han cobrado casi 100 vidas.
Este plebiscito popular, amparado en el artículo 71 de la Constitución venezolana pero convocado al margen del Gobierno, consta de tres preguntas, por lo que además del apoyo o rechazo a la Asamblea Constituyente de Maduro, los venezolanos podrán opinar sobre el deber de las Fuerzas Armadas y los funcionarios públicos de obedecer y defender la constitución de 1999 y, también, sobre la renovación de los poderes públicos y la realización de elecciones libres y transparentes.
La consulta opositora cuenta con el apoyo de importantes sectores de la sociedad civil como la influyente Federación de Cámaras de Comercio (Fedecámaras), sindicatos no oficialistas, organizaciones estudiantiles y algunas de las universidades más prestigiosas del país.
Uno de los más sólidos apoyos viene de la Iglesia venezolana, que ha cedido sus instalaciones para la votación y ha reconocido la legitimidad de este referendo contra una Constituyente cuya apuesta por el "Estado comunal" es vista por los obispos como una vía a la "constitucionalización de una dictadura comunista" en Venezuela.
Cinco expresidentes latinoamericanos ejercen de observadores
Debido al corto tiempo en que se convocó, y al no estar auspiciada por el Poder Electoral, carece de algunos mecanismos de control y no puede asegurar que los ciudadanos no voten más de una vez por persona en todos los centros del país o del extranjero, donde tienen permitido expresarse sin importar dónde están inscritos como votantes.
Para contrarrestar posibles irregularidades, los convocantes han encargado a cinco rectores universitarios del país que actúen como garantes, y miles de voluntarios harán de interventores siguiendo el proceso en las mesas. A este mayor rigor pretende contribuir también la presencia de cinco expresidentes latinoamericanos, que han llegado al país para ejercer de observadores. Nada más aterrizar en el aeropuerto de Maiquetía, Vicente Fox (México), Andrés Pastrana (Colombia), Jorge Quiroga (Bolivia), Laura Chinchilla y Miguel Ángel Rodríguez (Costa Rica), han lanzado un contundente mensaje a favor del referéndum.
En declaraciones a los periodistas, Pastrana ha pedido que "sea el pueblo venezolano" a través del plebiscito "el que decida" si quiere la Asamblea Nacional Constituyente, puesta en marcha el 1 de mayo sin una consulta popular de aprobación previa.
Según ha adelantado Pastrana, los cinco expresidentes han solicitado reunirse con Maduro, sin que hayan recibido hasta el momento una respuesta del mandatario. Fox, por su parte, ha pedido a Maduro "entender" que "tiene que salir" y "convocar rápidamente a un proceso electoral".
El mayor acto de desobediencia civil contra Maduro
Desde Bolivia, el presidente Evo Morales se ha posicionado del lado de su aliado bolivariano y, a través de un mensaje en Twitter, ha calificado de "actitud golpista" querer dar legitimidad a la consulta opositora.
Si los resultados le son favorables, la oposición declarará este lunes la llamada "hora cero", una llamada a profundizar en los actos de desobediencia civil contra Maduro.
“Capriles: Las próximas horas son decisivas“
El dos veces candidato a la presidencia de Venezuela, Henrique Capriles, dijo esta semana, apoyándose en un estudio de la encuestadora Datanálisis, que se espera la participación de al menos 11 millones de personas en esta consulta.
"Eso sin contar a quienes viven en el exterior. Si el domingo salen 11 millones de venezolanos, el día lunes pasaremos a una etapa de más presión. La hora cero depende de la contundencia de este 16 de julio. Las próximas horas son decisivas", dijo el líder opositor, que advirtió que el Gobierno "tendrá que respetar esa decisión".
Maduro dice que el referendo opositor es una "consulta interna" de partidos
El líder venezolano, sin embargo, se mantiene firme ha vuelto a denunciar la falta de legitimidad del proceso opositor, que ha calificado de "consultar interna".
"Cada partido político puede convocar sus consultas internas cuando quiera", ha afirmado desde un acto político en Caracas.
Maduro se ha refirido al otro "evento político" de este domingo, al simulacro que el Poder Electoral ha convocado como ensayo general de las elecciones del próximo 30 de julio, cuando están previstos los comicios para elegir a los redactores de una nueva y eventual Constitución.
"Yo llamo a todos los venezolanos de bien a participar en el proceso de simulacro electoral, como siempre se ha hecho, para ver cómo funcionan las máquinas el captahuellas, para ver cuáles son los candidatos e informarse mejor", ha dicho.
Ante los dos actos electorales, Maduro ha exhortado a que las jornadas se lleven a cabo "pacíficamente" y no ha adelantado hasta ahora represalias para quienes vayan este domingo a las urnas, como sí prometió actuar contra los que boicoteen el 30 de julio.