España y varios gobiernos latinoamericanos no reconocen la Constituyente; la UE muestra "serias dudas"
- La UE muestra su "preocupación" por el futuro de la democracia en el país
- Perú ha convocado reunión de cancilleres el próximo 8 de agosto en Lima
- Manifestaciones en contra de las elecciones en varias capitales
Enlaces relacionados
La elección de la Asamblea Nacional Constituyente celebrada este domingo en Venezuela ha provocado numerosas reacciones en todo el mundo, principalmente en América Latina. Colombia, México, Perú, Panamá y España han anunciado que no reconocerán la Asamblea resultante.
Por su parte, la Unión Europea (UE) ha asegurado que esta convocatoria no es la solución para la crisis política y ha mostrado su "preocupación" por el futuro político del país.
Coincidiendo con las votaciones se han producido manifestaciones a favor y en contra del proceso por parte de venezolanos expatriados en capitales europeas y latinoamericanas.
Bruselas: La Asamblea "no puede ser parte de la solucion"
"Una Asamblea Constituyente, elegida en condiciones dudosas y con frecuencia circunstancias violentas no puede ser parte de la solución. Ha aumentado la división y deslegitimará más las instituciones elegidas democráticamente en Venezuela", ha explicado en un comunicado la portavoz del Servicio de Acción Exterior de la UE.
La UE alberga "serias dudas" sobre si el resultado puede ser reconocido y ha criticado el "excesivo uso de la fuerza" por parte de las fuerzas de seguridad venezolanas.
La reacción de Bruselas llega después de la del Gobierno español, que poco después de la hora del cierre de los colegios electorales anunció que no reconocería "una Asamblea Constituyente que no sea resultado de un amplio consenso nacional, elegida conforme a reglas democráticas de sufragio universal libre, igual, directo y secreto".
A juicio del Ejecutivo español, "la Asamblea resultante de la votación de hoy no representa la voluntad mayoritaria de los venezolanos, no tiene atribuidas conforme a la Constitución facultades legislativas que corresponden a la Asamblea Nacional y no es la solución a los graves problemas de confrontación política y crisis humanitaria que asolan al país".
EE.UU. y Rusia
Por su parte, la embajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikki Haley, ha calificado de "falsos" los comicios convocados por Maduro sin referéndum previo y ha dicho que es "otro paso hacia la dictadura".
El senador republicano Marco Rubio ha pedido al presidente Donald Trump que imponga más sanciones al Gobierno de Venezuela y desconozca los resultados de la Asamblea Nacional Constituyente.
Desmarcándose de esta línea crítica, Moscú ha llamado este lunes a la comunidad internacional a la "contención" y a la renuncia a los planes "destructivos" de presionar a Venezuela tras la votación para evitar "agudizar la polarización de la sociedad" venezolana, ha advertido en un comunicado el ministerio de Exteriores ruso.
La nota agrega que "ahora es importante evitar una nueva espiral de la violencia y su transformación en nuevas formas de enfrentamientos".
Reacciones en Latinoamérica
Además del español, numerosos gobiernos de América han valorado el proceso. El Gobierno de Perú, por ejemplo, ha señalado que "esta elección viola normas de la Constitución venezolana y contraviene la voluntad soberana del pueblo, representado en la Asamblea Nacional".
Perú ha convocado una reunión de ministros de Relaciones Exteriores el próximo 8 de agosto, en Lima, para evaluar la situación en Venezuela, cita en la que tiene previsto contar con la participación de once países.
El canciller brasileño, Aloysio Nunes, ha advertido que Venezuela vivirá un "escenario de anomia" (ausencia de ley) tras la elección de la Asamblea, debido a que tendrá dos órdenes constitucionales diferentes.
"El Gobierno argentino lamenta que el Gobierno venezolano, desoyendo los llamados de la comunidad internacional, incluyendo el de los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), haya proseguido con la elección a una Asamblea Constituyente", ha señalado la Cancillería argentina.
Por su parte, el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, ha condenado "la violencia" y ha acusado a Maduro de preferir "la confrontación", cuyo Gobierno ya confirmó que "no reconocerá" los resultados de la elección de la Asamblea Constituyente por los "vicios" en el proceso.
República Dominicana ha expresado su "alta preocupación" por el rumbo que han tomado los acontecimientos en Venezuela y ha reiterado que solo una negociación "justa y equitativa" entre las partes puede reconciliar a la sociedad venezolana.
Chile ha confirmado que de continuar la escalada de violencia, el Gobierno dispondrá de un plan de emergencia para repatriar a los chilenos y que se prepara "otro plan" para que consulados y su Embajada en Caracas asistan a personas, como lo hizo este sábado una magistrada, de los 33 jueces que designó hace días el Parlamento.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha defendido a su aliado Nicolás Maduro y ha criticado los anuncios de Colombia, México y Panamá de que desconocerán los resultados de la Asamblea y les ha acusado de ser "sumisos" a EE.UU.
Manifestaciones en todo el mundo
Además de las posiciones expresadas por diversos gobiernos, este domingo se han celebrado también numerosas manifestaciones en muchos países a favor y en contra de la Constituyente.
En Colombia se han registrado concentraciones en varias ciudades del país, la más numerosa ha sido en Bogotá frente a la residencia del embajador venezolano, Iván Rincón, a quien le han pedido "dar la cara" y "abandonar su cargo porque "no representa a los venezolanos".
Al grito de "libertad" y "fuera la dictadura", decenas de venezolanos han protagonizado un plantón en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil en contra de la Asamblea Constituyente en su país.
Frente a la embajada de Venezuela en Ciudad de México, ciudadanos de ambos países han cruzado arengas a favor y en contra del proceso constituyente y del Gobierno de Maduro.
En la embajada de Venezuela en Santo Domingo varios manifestantes también han expresado su apoyo al Gobierno y a la Asamblea Nacional Constituyente, y han rechazado la "injerencia" de EE.UU. contra el "proceso revolucionario" que vive la nación caribeña.
En Honduras los manifestantes han pedido al expresidente Manuel Zelaya que deje de "meterse" en los asuntos de Venezuela, ya que "estamos por salir de esta dictadura y a usted le convendría quedarse tranquilo y dedicarse a los asuntos de Honduras".
Luis Meléndez, uno de los portavoces de los manifestantes en Puerto Rico, ha expresado que "es un proceso ilegal, anticonstitucional, que se pone a espaldas del pueblo y que descansa sobre muchos venezolanos en contra del régimen actual".
Varios centenares de venezolanos en Madrid se han unido a la convocatoria "Rechazo Mundial a la Constituyente", que con pancartas han solicitado una "Justa paz social" y libertad para los presos políticos, y han denunciado la Constituyente como "golpismo puro".
Un grupo de venezolanos se ha congrado también en la plaza de Syntagma, en el centro de Atenas, con una bandera venezolana y una griega, portando pancartas con consignas como "Rechazo a la Constituyente", "No más dictadura" o "Reescribir la Constitución sin un referéndum previo es un golpe de Estado para Venezuela".