El alcalde de Charlottesville responsabiliza de la violencia racista al discurso agresivo del presidente Trump
- "Corresponde al presidente Trump decir que ya basta", ha dicho Mike Signer
- Califica el atropello múltiple que causó la muerte de una mujer como "terrorismo"
- Supremacistas blancos convocaron una marcha en esta localidad de Virginia
El alcalde de Charlottesville, el demócrata Mike Signer, ha calificado el atropello que este sábado causó la muerte de un mujer de 32 años y más de veinte heridos como un "acto de terrorismo" y ha instado al presidente estadounidense Donald Trump a que zanje la cuestión.
El alcalde ha asegurado que Trump ha impulsado a estos grupos racistas con sus agresivos discursos. "Miren la campaña electoral que llevó a cabo", ha dicho Signer.
"Fue un acto de terrorismo en el que se usó un coche como arma", ha indicado Signer en una entrevista en la cadena NBC, al comentar la violenta jornada. Signer, además, ha subrayado que "corresponde al presidente Trump decir que ya basta".
Trump ha sido objeto de fuertes críticas después de que la víspera condenase "el odio y el fanatismo" por "múltiples partes" y calificase de "terrible" lo sucedido, pero no citó expresamente a los supremacistas blancos que habían convocado la marcha, entre los que se encontraba el ex líder del Ku Klux Klan David Duke, y algunos de los cuales portaba esvásticas nazis.
Entre los manifestantes ultranacionalistas y racistas podía verse a muchos que se autodenominaban seguidores de Trump, llevando prendas con su lema de campaña: "Hacer a Estados Unidos grande de nuevo".
Éstos protestaban por la retirada de una estatua en el centro de Charlottesville del general confederado Robert Lee, considerado un símbolo de la defensa de la esclavitud y el racismo.
La condena de Trump también "incluía al KKK y neonazis"
Por su parte, la Casa Blanca ha asegurado que la condena del sábado del presidente Trump al acto "de odio y fanatismo" en Charlottesville, "por supuesto" también se refería a los supremacistas blancos que convocaron la marcha Unir a la Derecha.
"El presidente dijo ayer con mucha contundencia que condena todas las muestras de violencia, fanatismo y odio", ha indicado la Casa Blanca en un comunicado, que agrega que "por supuesto, eso incluye supremacistas blancos, el Ku Klux Klan neonazis y todos los grupos extremistas". Asimismo, subraya el llamamiento de Trump "a la unidad nacional de todos los estadounidenses".
La ciudad universitaria de unos 50.000 habitantes, a apenas 200 kilómetros de Washington, ha amanecido consternada por la caótica jornada del sábado, durante la cual también perdieron la vida dos agentes de la policía estatal de Virginia al estrellarse el helicóptero en el que viajaban.
Hoy domingo, el gobernador de Virginia, Terry McAuliffe, ha acudido a dos iglesias de Charlottesville para transmitir sus condolencias a las víctimas y llamar a la unidad.
Barack Obama y Hillary Clinton llaman a luchar contra el odio
El expresidente Barack Obama y la excandidata presidencial Hillary Clinton, principales exponentes del Partido Demócrata de Estados Unidos, han hecho un llamamiento a luchar contra el odio tras los episodios de violencia racial en Virginia.
"El amor surge con mayor naturalidad en el corazón humano que lo contrario", escribió Obama en su cuenta de la red social Twitter, utilizando una cita del nobel de la Paz Nelson Mandela. "Nadie nace odiando a otra persona debido al color de su piel, su historial o su religión". "La gente debe aprender a odiar y si puede aprender a odiar, se le puede enseñar a amar", añadió completando la cita del desaparecido líder sudafricano.
Por su parte, Hillary Clinton también reaccionó a los sucesos en Twitter y llamó a los líderes políticos a "ser fuertes en sus palabras y decididos en sus acciones". "El incidente de odio que nos trae aquí es tan real y condenable como (la presencia de) supremacistas blancos en nuestras calles", dijo la exsecretaria de Estado en su tuit.
La respuesta del exvicepresidente Al Gore a las palabras de Trump fue más contundente que las de Obama o Clinton, instándolo a recapacitar sobre todo lo que implica este hecho. "Señor presiente, por el bien de su país, le pido que lo intente de nuevo (...) Le insto a recapacitar sobre lo que significa tener un resurgimiento del Ku Klux Klan y del movimiento nazi marchando y creando este tipo de odio".