'Barry Seal: El traficante': Tom Cruise, aviones, cocaína y el Cartel de Medellín
- Se estrena el biopic sobre el piloto que traficaba para Pablo Escobar y le delató
- "Es todo un antihéroe. No justificamos lo que hizo, pero nos gustaría", dice Cruise
- El actor realiza todas las escenas de pilotaje de la cinta sin dobles
- RTVE.es te ofrece en exclusiva el making of de la película, que se estrena el día 1
"Es todo un antihéroe. No justificamos lo que hizo, pero nos gustaría". Así se refiere Tom Cruise, en el clip que acompaña estas líneas y que RTVE.es te adelanta en exclusiva, a su personaje en Barry Seal: El traficante, el biopic sobre este audaz y experimentado piloto convertido en narcotraficante, traficante de armas, agente encubierto de la CIA e informante de la DEA (Administración para el Control de Drogas de EE.UU.) que a la vez transportaba alijos para el Cartel de Medellín y que acabó traicionando y delatando a su líder, Pablo Escobar, que pondría precio a su cabeza.
Barry Seal: El traficante (American made en EE.UU. tras cambiar el título original de Mena) llega este viernes 1 de septiembre a los cines españoles bajo la dirección de Doug Liman, quien ya trabajó con Cruise en Al filo del mañana (2014).
Rodada a lo largo de 2015, en parte en Medellín y otras localizaciones colombianas, la película ha tardado más de dos años en estrenarse, pero al final llega en plena efervescencia de las series y películas sobre Pablo Escobar, ya que la tercera temporada de Narcos y Loving Escobar, de Fernando León de Aranoa con Javier Bardem de protagonista, se estrenan estos días. Sin embargo, el peso del protagonismo del Cartel de Medellín en la película se lo lleva el personaje de Jorge Ochoa (interpretado por el mexicano Alejandro Edda) y no el de Escobar, al que da vida por tercera vez el actor colombiano Mauricio Mejía, tras las series Pablo Escobar: El patrón del mal y La viuda negra, y que en Narcos interpreta a Carlos Castaño.
Completan el reparto actores como Domhnall Gleeson, Jayma Mays, Sarah Wright, Jesse Plemons y Lola Kirke.
¿Héroe o villano?
"El mundo puede verlo como un villano, pero para mí es un héroe. No juzgamos las ramificaciones de lo que Barry estaba haciendo, porque Barry no pensaba en esas ramificaciones. No quería herir a nadie, solo quería pasarlo bien y aterrizar aviones y enfrentar situaciones de riesgo. Quería vivir la vida al máximo, a tope, y nunca dejó pasar una oportunidad. Si le dabas la mano, te cogía un brazo. Y Tom y yo queríamos hacer una película que celebrase la vida de Barry Seal", explicaba a RTVE.es Doug Liman (El caso Bourne, Sr y Sra Smith) en una entrevista en junio pasado sobre este piloto que comenzó su carrera en la TWA como el comandante más joven de la historia de la aerolínea y acabó convertido en "el mayor traficante de drogas de la historia de América".
"Es un contrabandista, un antihéroe, un tipo al que le interesa más que nada la aventura. Es una historia de aventuras muy única y original. Yo no pretendo justificar lo que hizo, no se trata de un cuento moral. Nosotros simplemente ponemos la cámara y contamos las cosas tal y como sucedieron", insiste Tom Cruise en declaraciones a Informe Semanal de TVE.
En realidad las críticas en Barry Seal: El traficante caen más del lado del Gobierno de los Estados Unidos, comandado por Ronald Reagan, que protagonizó el escándalo Irán-Contra vendiendo armas al Gobierno iraní y financiando a la Contra nicaragüense pese a la prohibición del Senado al respecto, operaciones de las que Seal conocía bastante. "La muerte de Barry Seal interesaba tanto la CIA como a Pablo Escobar porque Barry Seal se estaba aprovechando de ambos", contesta Doug Liman cuando se le pregunta sobre el asesinato del piloto, supuestamente ordenado por Pablo Escobar después de ser traicionado.
"Personalmente tengo una vena antiautoritaria, por eso no puedo dejar de admirar a alguien que se enfrentó a los poderes establecidos", reconoce además Liman.
La exhibición aérea de Tom Cruise
Con grandes dosis de humor y entretenimiento, la película sirve también para que Tom Cruise exhiba sus cualidades como piloto: absolutamente todas las escenas de pilotaje están realizadas por el propio actor estadounidense sin la participación de ningún extra.
"Tom es un piloto increíble, muy cualificado, un piloto que puede aterrizar un aeroplano en una oscuridad total en un remota pista de montaña guiado solo por una furgoneta, que es una de las escenas peligrosas que rodamos", señala Liam, que revela además que en el garaje de la casa en el que director, actor y guionista convivieron durante el rodaje para trabajar día y noche sobre el guion había instalado un simulador de vuelo en el que el Cruise entrenaba cada noche, además de volar todos los fines de semana en aviones reales.
"Es un gran piloto por lo duro que entrena y el nivel de excelencia que consigue. No dejamos de hacer ninguna de las situaciones de pilotaje que el Barry Seal real no hiciera, que eran todas realmente locas, porque cuando haces este tipo de pilotaje para ganarte la vida como Barry Seal, la carga es mucho más importante que el aeroplano. El avión se podía desechar. Lo que tú llamarías un accidente para Barry eran solo gajes del oficio, lo habitual, y como Tom Cruise es un piloto tan extraordinario pudimos hacer estas escenas de verdad", cuenta satisfecho el director. Y ese realismo se traslada a la película, así que: ¡abróchense los cinturones!