Francia permitirá excluir a los sindicatos de la negociación en empresas de menos de 50 trabajadores

• El Gobierno de Macron presenta su reforma laboral, su primer gran reto
• El objetivo es flexibilizar el mercado laboral para atraer inversores y bajar el paro
• La CGT ha convocado una manifestación el próximo 12 de septiembre

El primer ministro francés, Eduard Philippe, y la titular de Trabajo, Muriel Pénicaud

El Gobierno francés ha presentado este jueves su reforma para flexibilizar el mercado laboral, que se aprobará por decreto en menos de un mes y que dará más capacidad a las empresas para negociar directamente con los trabajadores sus condiciones al margen de los convenios sectoriales según la marcha del negocio. Eso permitirá modificar el tiempo de trabajo, algunos aspectos de la remuneración (como las primas) o la movilidad, por ejemplo, frente a la ley actual que supone "un freno a la contratación y la inversión", según el Ejecutivo francés.

Una de las medidas más polémicas es la posibilidad de negociar sin sindicatos en las empresas de menos de 50 empleados, donde se podrán discutir estos asuntos con los representantes de los trabajadores incluso si estos no están sindicados. El objetivo es tener acceso "directo y sencillo" a la negociación, justifica el Gobierno. En las de menos de 20 empleados, donde no existen estos representantes, los empresarios podrán organizar un referéndum entre su plantilla, según explica Efe.

Las pequeñas y medianas empresas emplean a la mitad de los asalariados en Francia, según informa AFP.

El presidente francés, Emmanuel Macron, que ha sufrido una fuerte caída en los sondeos desde que ganó las elecciones presidenciales, afronta su primer gran reto político con la presentación de esta nueva regulación laboral. Macron defiende su carácter "ambicioso y eficaz" para "bajar el paro masivo", que ronda el 10%, en un plazo de 18 a 24 meses, cuando se prevé que dé resultados.

A su juicio, el problema del sistema actual es que "protege muy bien" a quienes tienen "un contrato estable, a costa de la exclusión completa de los demás", los jóvenes y poco cualificados.

Indemnización tope de 20 meses en caso de despido

Otro de los puntos más polémicos de la reforma laboral francesa es el establecimiento de un baremo de indemnizaciones en caso de despido improcedente al que se tendrán que ajustar los dictámenes de Magistratura de Trabajo, para terminar con las enormes diferencias actuales.

En la práctica, esas indemnizaciones serán como máximo de un mes de salario, hasta un año de antigüedad, y un mes más por cada año adicional hasta diez. A partir de ahí, el incremento será de medio mes de salario por cada año, con un tope de veinte meses.

En compensación, ante las críticas de los sindicatos por ese punto, el Ejecutivo accedió a incrementar en un 25% las indemnizaciones legales por despido (cuando no se considera improcedente) a un cuarto de mes de sueldo por año trabajado.

Despido por razones económicas

Las multinacionales podrán recurrir al despido colectivo por razones económicas en su filial francesa, aunque a escala global la firma tenga una buena situación financiera.

A pesar de que Macron cuenta ya con el respaldo del parlamento, los sindicatos consideran esta reforma laboral como "decepcionante". De hecho, el sindicato CGT ha confirmado que seguirá adelante con su plan de organizar una manifestación de protesta el próximo 12 de septiembre.

Por otro lado, el sindicato CFDT, aunque no apoyará la manifestación, cree que se ha perdido una gran oportunidad de mejorar las relacionales laborales en Francia.

Francia, la segunda economía más grande de la UE, cuenta con una tasa de desempleo del 9,5%, el doble que la que presentan otros países de los Veintiocho, mientras que Macron se ha comprometido a reducirla hasta el 7% de cara a 2022.