Ai Weiwei: "La crisis de refugiados solo se solucionará si nos implicamos todos"
- Compite en Venecia con un documental sobre los flujos migratorios
- Una obra que sobre las duras condiciones de los refugiados que no emite juicio alguno
El artista chino Ai Weiwei lleva años centrado en el problema de la inmigración y ha llevado a la competición de la Mostra de Venecia el documental Human Flow, con el que quiere demostrar que "la solución existe" pero que no debe buscarse en términos geopolíticos sino con la implicación de todos.
"Todo debe empezar por nosotros", afirmó el artista chino, que hizo hincapié en que es "una tragedia humana que todos podemos ver" y cuya respuesta conocemos, por lo que si fracasamos, es responsabilidad de toda la Humanidad.
"Si hablamos solo de geopolítica, de legislación local, de políticas locales o de problemas técnicos, perdemos la perspectiva. Debemos comprender que la solución no solo afecta a los refugiados sino a todos nosotros. Si afrontamos las cosas así, podemos hacerle frente", señaló.
Para Ai el arte puede y debe ser una plataforma de denuncia de los problemas de la sociedad. A ello ha dedicado su vida, lo que le ha provocado graves problemas con el Gobierno chino por sus críticas, lo que incluso le llevó a la cárcel durante 80 días en 2011, detención que las autoridades justificaron por problemas fiscales.
En ese contexto se inscribe Human Flow, una película con la que compite por el León de Oro de Venecia y que "te hace pensar si formas parte de ese mundo".
En ella enlaza múltiples imágenes del enorme flujo de inmigrantes en Turquía, Grecia e Italia, procedentes de Siria, Iraq o África, con algunos mensajes relativos al número de refugiados en los diversos países, a las alertas lanzadas por la ONU y organizaciones no gubernamentales, mezcladas con fragmentos de poetas como el sirio Adonis o el turco Nazim Hikmet.
Con un excesivo protagonismo del artista, que aparece en múltiples escenas, el documental pone de manifiesto la dureza de las condiciones de vida de los refugiados pero sin emitir juicio alguno.
"Algunas veces solo tienes que mirar desde otra perspectiva, como director o artista, vivir en la realidad y también en la vida paralela a la realidad", reflexionó un artista que ha llevado por todo el mundo sus llamativas instalaciones realizadas con chalecos salvavidas de refugiados sirios.
El compromiso del artista
En su opinión, el arte y los artistas deberían ser sensibles tanto a la belleza como a los dramas humanos. "Algunos hacen un gran esfuerzo, pero pocos alcanzan el público, en parte por la forma o por el mercado".
"Estoy seguro de que hay muchos artistas a los que les gustaría implicarse. Hay que crear una posibilidad de que tu voz sea escuchada. Puede que yo sea un afortunado porque puedo hacer algo de ruido, pero otros no logran hacer oír su voz", agregó.
Sus denuncias se han centrado en la situación de los refugiados en Europa, principalmente en Grecia o Italia, país que puso como ejemplo por el tratamiento que ha dado a los inmigrantes. "Lo que ha afrontado Italia y lo que ha hecho en el tratamiento de los refugiados y de los inmigrantes es de gran respeto. Estoy muy impresionado por el comportamiento de una nación con comprensión humanística del arte y de la filosofía".
Pero, agregó, "esta situación no es solo de Italia, sino que es global y las consecuencias no solo deben ser soportadas por los italianos. Es un fenómeno internacional, hay que ayudar a Italia en vez de dejarla afrontar todos los problemas".
Para denunciar esa dimensión global, Ai decidió realizar este documental, a gran escala, algo que no había hecho antes, una nueva experiencia con un resultado muy positivo porque le ha permitido ver las dificultades de los seres humanos para comunicar sus historias.
Tras dedicarse a la escultura, a las "performances", a las instalaciones visuales, quiso seguir descubriendo medios para expresar sus inquietudes y llegó al cine. Con todas sus obras intenta proporcionar la respuesta adecuada, algo que no siempre logra. "Pero el arte tiene cierto significado", aseguró.
"Necesitamos encontrar un lenguaje vinculado a la realidad y que no sea solo sobre las cosas que estamos viviendo. No creo que un filme sea parte de la realidad, toda película es una mentira, incluso un documental como este. Usa la realidad para reflejar la visión limitada del director o de su equipo"