Nuevas protestas en EE.UU. por la absolución de otro policía que mató a un hombre negro
- Más de 100 personas han sido detenidas desde el viernes
- Anthony Lamar Smith murió en 2011 durante una persecución
La Policía de St. Louis (Misuri, Estados Unidos) ha detenido a más de 80 personas en la tercera jornada de protestas por la absolución de un policía blanco que mató a un hombre negro. En total, más de 100 personas han sido arrestadas desde el viernes.
La protesta en el centro de la ciudad se inició de manera pacífica con más de 1.000 participantes, pero terminó con enfrentamientos entre los agentes y pequeños grupos de manifestantes que rompieron escaparates rotos e intentaron cortar la autopista, como ya ocurrió el viernes y el sábado.
La Policía ha requisado varias armas, incluyendo pistolas, y botellas con un químico desconocido que fue usado contra los agentes.
La agencia Reuters informa de que uno de sus fotógrafos fue esposado y retenido durante 30 minutos por la Policía junto con un grupo de colegas.
Policía absuelto
El viernes, un tribunal absolvió al agente Jason Stockley, quien en 2011 mató a tiros a Anthony Lamar Smith, un joven negro de 24 años.
Anthony Lamar Smith fue tiroteado en su coche después de una persecución por un supuesto asunto de drogas. Los fiscales aseguran que Stockley puso un arma en el coche de Smith, pero el juez ha dado por buena la versión policial de que el arma pertenecía al fallecido y que el agente actuó correctamente.
"¿Creen que esto hará que nos sintamos seguros?", ha declarado a Reuters Keisha Lee, vecina del cercano Ferguson. En esta localidad se inició el movimiento Black Lives Matters (Las vidas negras importan) a raíz del asesinato de Michael Brown.
"Las ventanas pueden reponerse. Las vidas no", advierte por su parte Missy Gunn, también vecina de Ferguson y madre de tres hijos.
El caso de Ferguson y otros casos de violencia policial contra negros en distintos estados de EE.UU. han vuelta a poner de manifiesto el racismo institucional en EE.UU. El gobierno de Barack Obama intentó poner coto a los abusos policiales obligando a los agentes a llevar cámaras en el uniforme, entre otras medidas.