Pedro Pascal: "Las mejores historias y artistas están ahora en televisión y Hollywood debe tomar nota"

• El actor de Juego de Tronos y Narcos presenta Kingsman: El círculo de oro
• RTVE.es entrevista a uno de los protagonistas de la cinta, que se estrena el viernes
• "Me llena el corazón estar en dos de las series de la edad de oro televisiva", dice

RTVE.es entrevista a Pedro Pascal, protagonista de 'Kingsman: El círculo de oro'

El actor Pedro Pascal (Santiago de Chile, 1975) lleva años trabajando sobre las tablas y dos décadas en series televisivas norteamericanas, pero la fama internacional le ha llegado hace apenas tres años gracias a sus papeles en Juego de Tronos -como Oberyn Martell, la 'Víbora Roja'- y Narcos -el agente Javier Peña-, que también le han abierto las puertas del cine de par en par, entre ellas la de la nueva saga de películas de espionaje protagonizada por la agencia secreta de inteligencia británica Kingsman.

Tras el éxito de la primera parte, Kingsman: servicio secreto que recaudó más de 340 millones de euros en todo el mundo, este viernes 22 de septiembre se estrena en España Kingsman: El círculo de oro, con un reparto plagado de estrellas en el que Pedro Pascal se ha ganado un hueco como el Agente Whiskey.

"Un nombre así es prometedor, porque a todo el mundo le gusta el whisky. Y el personaje es así, como un chupito de alcohol que te pega fuerte, pero que si te tomas una botella entera te puede matar", bromea Pascal en una entrevista con RTVE.es en la presentación en Madrid de la película.

Un lazo contra los narcos

Tomando como inspiración secuelas que están "a la atura de sus predecesoras", como El Padrino II o Star Wars: Episodio V. El imperio contraataca, el director Matthew Vaughn (X-Men primera generación) vuelve a tomar los mandos de esta original saga de espías -basada en un cómic de Mark Millar-. Con el Eggsy (Taron Egerton) ya convertido en un kingsmen, el cuartel general de la agencia de inteligencia independiente, la Sastrería de Savile Row, sufre un ataque que la destruye. Eggsy y Merlin (Mark Strong) tendrán que unir sus fuerzas con su homóloga americana, Statesman, para derrotar a una nueva villana, Poppy, una maquiavélica Julianne Moore que dirige una red internacional de narcotráfico.

Los dos agentes británicos tendrán que unir sus fuerzas y conocimientos a los de la agencia Statesman, que se oculta bajo la tapadera de una destilería, y cuyos miembros tienen nombres tan sugerentes como Champagne (Jeff Bridges), Tequila (Channing Tatum), Ginger Ale (Halle Berry) y el citado Whiskey (Pedro Pascal). Completa el estelar reparto el cantante Elton John, haciendo de sí mismo, y volveremos a encontrarnos con el agente Harry Hart Galahad (Colin Firth).

A Pedro Pascal, cuyo personaje es una especie de vaquero estilo Burt Reynolds que es un as con el lazo y el látigo, le toca en esta película volver a luchar contra los narcos, aunque bromea que el látigo "no es lo que mejor funciona" contra ellos, sino más bien la información, los mapas y las fotografías que utiliza en su papel de agente de la DEA en Narcos.

Ciertamente exhibe grandes dotes con los "juguetes" de su personaje después de entrenarse con el especialista Loop Rolands, "un experto en ser cowboy, experto del látigo, el lazo y las pistolas": "Admito que el lazo no era mi fuerte, pero con el látigo era un crack. Me encantaba", ríe el actor chileno cuya familia se instaló en Estados Unidos cuando él era niño huyendo de la dictadura de Pinochet.

El orgullo de estar en Juego de Tronos y Narcos

Pascal empezó su andadura en series televisivas en 1999, con pequeños papeles en títulos como Buffy, cazavampiros. Tras pasar también por Ley y Orden, The Good Wife o Cinco hermanos, la suerte le llegó con su papel en 2014 de Oberyn Martell, la 'Víbora Roja', en la cuarta temporada de la serie Juego de Tronos de HBO, que a su vez lo convertiría en el agente Peña de Narcos (2015-2017), la serie de Netflix que, en su tercera temporada, tras la muerte de Pablo Escobar, ha dado el papel protagonsita al actor chileno.

Pascal asegura con gran orgullo que, como persona que toda su vida ha tenido el "sueño" de ser actor, le "llena el corazón" poder forma parte de dos de las series de mayor renombre de la considerada como "edad dorada de la televisión".

"Hace ya muchos años que las mejores historias se cuentan en la tele y ojalá siga esa edad dorada porque realmente yo soy adicto a las series. Y creo que los mejores artistas, guionistas y directores están aprovechando la oportunidad de contar historias dentro de estética de series. Ojalá que la televisión y el cine se complementen, que el cine entiendan que no pueden ser solo películas de Marvel o con presupuestos de 150 millones de dólares y que podamos encontrar esto de nuevo en Hollywood, con personajes tan completos como los que estamos viendo en estas series de televisión", reflexiona el actor de 42 años.

Para el también director teatral, la ventaja de que el éxito le haya llegado ya en la madurez está en que es capaz de disfrutar y apreciar las cosas más simples de la vida y lo ejemplifica como una anécdota: "Llevaba tres años y medio sin parar y me llegó justo un proyecto que había que hacer de inmediato y, aunque estaba muy cansado, me decía que tenía que seguir porque esto era lo que quería en mi vida. Pero el proyecto se cayó de repente y pasé las 24 primeras horas en casa como no sabiendo qué hacer porque no estaba trabajando. Pasadas esas 24 horas, disfruté de las vacaciones en casa durante tres semanas y gocé de cosas tan simples como el pedir que me traigan el desayuno a través de una aplicación de móvil. Pasé tres semanas en casa sin preocuparme de nada y me recuperé por completo. Fue increíble. Creo que es como muy humilde y simple entenderlo de esa manera, pero no necesito más que eso, de verdad", concluye la nueva estrella televisiva con modestia.

Taron Egerton, Colin Firth y Pedro Pascal en 'Kingsman: El círculo de oro'. Giles Keyte