Los inspectores del Banco de España: la UE ha creado "un monstruo" de supervisión que no será eficaz

• Alertan de que ese sistema europeo puede conducir "a un desastre mayor del sufrido"
• Sobre las fusiones avisan que "un banco más grande son problemas más grandes"
• Opinan que el Banco de España pudo hacer más para evitar la crisis bancaria

Fachada de la sede del Banco de España en Madrid

La nueva regulación de supervisión y resolución que se está construyendo en la UE es un "monstruo legislativo" que no será eficaz ni eficiente, ni dará más transparencia a las entidades financieras. Así lo ha advertido este martes el presidente de la Asociación de Inspectores del Banco de España, Pedro Luis Sánchez, en su comparecencia en la Comisión del Congreso que investiga el origen de la crisis financiera y el rescate bancario.

Según este especialista, esa regulación y supervisión a nivel europeo puede conducir "a un desastre mayor del que hemos sufrido".

"Un espejismo regulatorio"

Pedro Luis Sánchez ha señalado que, sólo para definir las necesidades de solvencia de las entidades, existen 700 páginas de reglamento europeo y más de 17 reglamentos que se suman a otras decenas de normas.

"Se está construyendo un entramado regular y supervisor cuya complejidad se quiere confundir con el rigor. Se está construyendo un espejismo regulatorio", ha alertado.

Además ha señalado que la entrada en vigor del Mecanismo Único de Supervisión no supone dar mayor garantía a la estabilidad financiera, "sino más bien todo lo contrario".

Según ha recordado, la unión bancaria ha nacido para evitar las injerencias políticas nacionales en materia de supervisión. Sin embargo -ha continuado-, la cesión de soberanía bancaria de los diferentes países no es la misma, ya que la supervisión del 90% de las entidades españolas está en manos del BCE mientras que en otros países sólo es del 60%. Una referencia a, por ejemplo, Alemania, donde el equivalente a las cajas de ahorro españolas ha quedado fuera de esa supervisión.

Advierten sobre las fusiones transfronterizas

"No somos antieuropeos, no lo somos en absoluto", ha incidido, pero ha reiterado la oposición de los inspectores a la unión bancaria tal como está concebida.

Ha criticado que el inglés sea el idioma único para la supervisión, cuando algunos países como Italia no lo utilizan, mientras que en España es obligatorio. "No se puede llevar a acabo una supervisión en profundidad en un idioma que no es el suyo", ha dicho.

Sánchez ha advertido de que España está en una situación "complicada", pero "podemos llegar a una situación aún más complicada" y ha recordado que los inspectores del Banco de España no son resistentes al cambio sino que "tenemos resistencia al desastre".

Además ha alertado de que las fusiones transfronterizas pueden llegar a ser un problema prudencial y que, no por ser más grandes, son mejores y más eficaces. "Una entidad más grande son problemas más grandes y las fusiones hay que hacerlas con prudencia y rigor", ha subrayado.

"No es cierto que no pudira haberse hecho más" en España

El presidente de la Asociación de Inspectores del Banco de España también ha reafirmado que "no es cierto que no pudiera haberse hecho más desde la regulación y la supervisión" para evitar el rescate bancario y la burbuja inmobiliaria.

Ha negado los argumentos de la dirección del Banco de España de que no hubiera un soporte jurídico legal para frenar el aumento del crédito. "La regulación financiera era más que mejorable", ha dicho tras advertir que uno de los elementos mas importantes que motivó la crisis inmobiliaria y financiera pudo ser la desaparición en 2004 de las provisiones anticíclicas que debían hacer las entidades financieras.

Ha señalado que la regulación que se disponía entonces "era mejor que la disponemos ahora desde el punto de vista de la estabilidad financiera" y ha aseverado que "lo que ocurrió no tenía que haber ocurrido y lo decimos desde la valentía y la honestidad".

Sánchez ha insistido en que la institución más capacitada para evitar la crisis financiera y la burbuja inmobiliaria era el Banco de España y ha señalado que "no atacamos al Banco de España, en absoluto. Denunciamos la gestión de aquellos que utilizaron a la institución para escudarse y afirmar que si se les cuestiona a ellos se cuestiona al Banco de España".

"Hay que elegir adecuadamente a quien debe dirigir esta institución", ha aseverado.

Ha indicado que el rescate a Bankia no se produjo por una segunda recesión económica sino por un desfase patrimonial de 20.000 millones de euros que se originó entre 1999 y 2006 y por malas prácticas bancarias, ya que las entidades se olvidaron de que para otorgar un crédito deben analizar la capacidad de reembolso del deudor.

Asimismo, el presidente de la Asociación de Inspectores del Banco de España ha advertido de que el coste del rescate financiero estimado en 60.000 millones de euros sería mayor, ya que no incluye las empresas que tuvieron que cerrar por falta de crédito y la reducción de 72.000 empleos directos en el ámbito de la banca.