"En cuestión de veinte minutos, el fuego se lo llevó todo"
- Los vecinos afectados en Galicia señalan a TVE la rapidez de las llamas
- "El fuego avanzó muchísimo con el viento que había", recuerda un testigo
Los vecinos de los pueblos afectados por la oleada de incendios que sufre Galicia en los últimos días coinciden en señalar a TVE la rapidez con la que las llamas, impulsadas por el fuerte viento que recorre la región por la cola del huracán Ophelia, se propagaron este domingo, cuando los focos se multiplicaron hasta superar el centenar: "En cuestión de veinte minutos, se lo llevó todo", cuenta Enrique, apicultor de la zona de Pazos de Borbén, en Pontevedra.
Esa comarca, en el área metropolitana de Vigo, ha sido una de las zonas más afectadas por los incendios y allí se ha instalando el centro de mando para coordinar la extinción que han visitado este lunes el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Allí también estaba uno de los colmenares de Enrqiue, que ha acabado devorado por el fuego.
"Tenía 47 colmenas, ya ves como han quedado. No ha habido tiempo, en cuestión de minutos se han quemado por completo", explica ante las cámaras. "Es muy duro ver toda la ilusión aquí perdida, pero ante eso no se puede hacer nada, hay que mirar adelante", se resigna.
“Nos ayudamos los unos a los otros con los medios que teníamos: aguas, palas... “
Cerca de allí, Gerundino cuenta a TVE como los vecinos colaboraron para escapar de las llamas: "Nos ayudamos los unos a los otros con los medios que teníamos: aguas, palas... para poder apagar el fuego".
Pese a que pudieron sofocar el fuego, recuerda ratos de angustia: "Hubo momentos en los que nos vimos apretados. Por abajo hay sitios de los que casi no podías escapar, con todo el humo alrededor tuyo. Un coche bomba nos ayudó y nos libramos; hubo otras zonas hacia Pazos en las que fue más intenso".
Buscar a los culpables
También pasaron miedo en A Dregada, una aldea de Os Ancares, en la provincia de Lugo: "Estuvimos toda la noche sin poder dormir, porque teníamos dos frentes abiertos. Estábamos en medio de los dos incendios. Esto es un sinvivir, hay que poner cordura en esta sinrazón", relata Maite Fernández.
“Esperaron a este viento tan fuerte, fue totalmente intencionado. Que investiguen y que los culpables que paguen“
"Nunca vimos nada igual, es todo desolación. Hacía muchos, muchos años que no se daba un incendio en el corazón de la reserva" del Parque Natural de Ancares, señala Maite, que no tiene dudas de que los fuegos fueron provocados: "Esperaron a este viento tan fuerte, fue totalmente intencionado. Que investiguen y que los culpables que paguen, es un desastre natural, social y personal".
No lejos de allí, Aladín Fernández, vecino de Murias, cree que se podría haber hecho más para evitar los daños con una adecuada gestión del entorno: "Es una tristeza tremenda. Medioambiente debe de darse cuenta de que hay que abrir pistas. Ahora no se puede entrar con una brigada. Esto hay que prevenirlo".
Otra de las zonas más afectadas ha sido la parte occidental de Ourense, donde este domingo murió uno de los cuatro fallecidos por la oleada de incendios, un ganadero de Carballeda de Avia que trató de proteger a sus animales y acabó engullido por el fuego.
“Aquello era un infierno, con el aire que venía. Parecía que ardían las casas todas“
"Aquello era un infierno, con el aire que venía. Parecía que ardían las casas todas. Tenía miedo, tenía miedo", reconoce uno de sus vecinos ante las cámaras, aún demudado por la angustia. Otro vecino recuerda que las llamas invadieron la población casi sin avisar: "Un caos, porque estábamos todos en casa, tranquilos, y de repente el fuego avanzó muchísimo con el viento que había, muchísimo".