Los padres de la niña muerta en la vía en Málaga: "A nuestra hija nos la quitaron"

• Insisten en que la muerte de Lucía Vivar, de tres años, no fue un accidente
• Presentan un informe forense que registra dos lesiones en la cabeza de la niña

Un informe forense cuestiona que la muerte de la niña de Pizara fuese accidental

Los padres de Lucía Vivar, la niña de 3 años hallada muerta en la vía del tren el pasado 28 de julio, horas después de su desaparición en Pizarra (Málaga), han insistido en que el fallecimiento de su hija no fue accidental, basándose en el avance de informe forense que han aportado al juzgado y que señala que la pequeña presentaba "dos lesiones" en la cabeza, "la primera, que es la que causaría su muerte, y la segunda que podría corresponderse a un golpe del tren pero que sucedería cuando la niña ya no estaba viva".

Los padres han ofrecido este jueves por primera vez una rueda de prensa en la que piden que se investigue este extremo, aportado por dos forenses de parte, y han insistido en que la muerte de su hija no fue accidental y en que se la llevaron o que hubo una negligencia.

La autopsia ha desvelado que la pequeña Lucía Vivar, desaparecida anoche en Málaga, murió de un golpe en la cabeza. Todas las hipótesis siguen abiertas. Aunque los investigadores apuntan a que la línea más probable es que fuese un accidente. El cuerpo de la pequeña ha sido trasladado esta tarde al tantatorio.

"A nuestra hija nos la quitaron, ella no se fue por voluntad propia", ha lamentado el padre, Antonio Vivar, que ha insistido en que la pequeña nunca se hubiese separado de su madre, y ha subrayado que la versión oficial no se la creen ni los investigadores, ya "que hace aguas por todas partes".

La madre, Almudena Hidalgo, ha precisado que la pequeña presentaba dos lesiones, una más fuerte que otra, y ha dicho que si el golpe fue del tren sería una negligencia en la organización de la búsqueda o en permitir la salida de los trenes y, si no, podría ser un asesinato.

El informe que esgrimen los padres ha sido elaborado por los forenses Luis Frontela y Carlos Pérez Agua, y está pendiente de ampliación para lo que "es necesario documentación aún no aportada" al juzgado. Además, han señalado que falta determinar la hora de la muerte, dato "fundamental" en este caso.

No creen en la hipótesis oficial

Los padres de la pequeña Lucía la perdieron de vista en torno a las 23.20 horas del 27 de julio cuando la niña jugaba con sus primos en la terraza de un restaurante en la explanada de la estación de tren de Pizarra.

Las primeras investigaciones apuntaron a que la niña se perdió, anduvo más de cuatro kilómetros sola por la vía del tren y, cuando se cansó, se acurrucó junto a la vía, donde al parecer el paso de un tren le habría causado el golpe en la cabeza que se cree que acabó con su vida.

Siguen las investigaciones sobre la muerte de Lucía Vivar

Para los padres de Lucía Vivar este informe forense es una prueba de que la Guardia Civil se equivoca. "Si antes lo teníamos claro en un 99 por ciento, ahora lo tenemos en 99,99 por ciento", ha dicho la Almudena Hidalgo.

Por eso, ambos progenitores han asegurado que seguirán "luchando y así nos cueste la vida, no pararemos hasta encontrar la verdad y hacer justicia", pidiendo apoyo para las concentraciones convocadas este viernes y el sábado en las localidades malagueñas de Pizarra, donde fue encontrado el cuerpo, y en Alhaurín el Grande, donde reside la familia.

Las cámaras de la estación de tren grabaron andando sola a la niña hallada muerta en Málaga

El padre ha asegurado que han tenido prudencia y cautela para no entorpecer la investigación pero que desde el minuto uno sabían que le habían quitado a su hija, por lo que ha dicho: "Somos jóvenes para luchar, aunque nos cueste la vida".

Según han informado en la rueda de prensa, la juez que investiga en el caso en el Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga, con la que se reunieron el miércoles, les ha dicho que están todas las vías de investigación abiertas, por lo que se muestran esperanzados.