El Senado de California investigará acusaciones de agresión sexual en su Capitolio

• Al menos 140 mujeres denuncian haber sufrido o presenciado casos en el estado
• El presidente del Senado anuncia que dos firmas independientes lo investigarán
• Entre las denunciantes hay asesoras, legisladoras, empleadas y lobistas

Fotografía de archivo de la senadora californiana Dianne Feinstein

El Senado de California ha anunciado este que investigará las acusaciones de acoso y abuso sexual desveladas recientemente por un grupo de mujeres, incluyendo legisladoras, empleadas y asesoras, que trabajan en el Capitolio de ese estado de EE.UU. Las mujeres denunciaron la pasada semana haber presenciado o padecido "tocamientos sin consentimiento, comentarios inapropiados por su apariencia o abusos e insinuaciones sexuales en el entorno laboral".

Según ha informado el presidente del Senado californiano, Kevin de León, se han contratado "dos empresas independientes en respuesta a los informes de una cultura generalizada de acoso sexual en la comunidad del Capitolio". De León ha aplaudido a su vez "el valor de las mujeres al salir del anonimato y hacer valer su voz", al tiempo que ha señalado que los empleadores "siempre pueden hacer más para proteger a sus empleados".

Más de un centenar de mujeres denuncian casos de abuso o acoso

Más de 140 mujeres, entre ellas legisladoras, empleadas, lobistas y asesoras,  difundieron la pasada semana una carta abierta en la que denunciaba los presuntos casos de agresión y abuso sexual en el entorno del Capitolio californiano. "Millones de estadounidenses se vieron sorprendidos al conocer el comportamiento del magnate millonario Harvey Weinstein. Nosotras no. Este mismo tipo de comportamiento inapropiado y de acoso sexual afecta a cada industria y faceta de nuestra sociedad", señalaron.

Las denunciantes detallaron una serie de comportamientos degradantes que han sufrido o presenciado, desde tocamientos sin consentimiento a comentarios inapropiados sobre su apariencia, pasando por insinuaciones sexuales o abusos machistas de poder en el entorno laboral.

En la misiva, indicaron que "no importa la edad de la mujer, su peso, religión, orientación sexual, raza, estatus social o posición de poder. Es generalizado".

La oficinal legal de Amy Oppenheimer será la encargada de investigar las denuncias, mientras que la firma CPS HR Consulting revisará las políticas del Senado contra las agresiones sexuales y la discriminación.