Arcuri no entrega sus hijos a Juana Rivas y pide al juzgado que concrete cómo será el encuentro
- Rivas viaja a Italia para reencontrarse con sus hijos y acudir a la vista
- Un juez italiano le permite estar con los menores durante la duración del juicio
- Expondrá los presuntos malos tratos que sufrió de manos de su expareja
El italiano Francesco Arcuri no ha llevado este lunes a sus dos hijos al lugar en el que tenía que recogerlos Juana Rivas, que disponía de un permiso judicial para estar con ellos en Italia hasta el 1 de noviembre. Por su parte, la defensa de Arcuri ha pedido a la autoridad judicial italiana que concrete cómo debe producirse el encuentro de sus hijos.
La madre del municipio granadino de Maracena se encuentra ya en Cagliari, capital de Cerdeña, donde este martes ha sido citada junto a Arcuri para comparecer en un Juzgado civil que celebrará una vista sobre la custodia de sus dos hijos menores, que actualmente viven en la isla de Carloforte, al sur de Cerdeña, desde que su padre los llevara desde España a finales de agosto.
Rivas gozaba de una autorización judicial, que había sido solicitada por su letrada en Italia, María Eugenia Álvarez, para poder estar con sus dos hijos, de 11 y 3 años, hasta el 1 de noviembre, pero Arcuri no ha llevado a los menores a la hora y al lugar convenidos.
Los abogados de Rivas barajan la posibilidad de interponer una denuncia ante la Policía italiana.
"No está clara la resolución judicial"
Enrique Zambrano, abogado de Arcuri en España ha explicado que el reencuentro no se ha producido porque ante las dudas de si finalmente Juana Rivas acudiría a la cita judicial de este martes en Italia, el padre no ha podido organizar el encuentro para la tarde de este lunes, a la par que ha considerado, con su defensa, que la resolución judicial para el encuentro de los hijos con su madre "no está clara" ni tampoco el lugar exacto dónde ha de producirse, ha precisado Zambrano.
El tribunal de Cagliari ha dictado un reciente auto por el que accede a la petición de los abogados de Rivas de que pueda visitar a sus hijos hasta el miércoles y pernoctar con ellos en el hotel donde se aloje, por lo que prevé recogerlos una vez pise suelo italiano.
Este auto, que sus abogados han conocido este fin de semana, ha sido determinante para que Juana "haya cogido fuerzas" para desplazarse a Italia, puesto que en un principio se barajó la posibilidad de pedir la suspensión de la vista por motivos de salud, dado que ha estado "muy mal la última semana", también anímicamente, según ha detallado uno de sus letrados, Juan Manuel Pérez.
Presuntos malos tratos
La pretensión de sus abogados es que Juana consiga la custodia de los niños para que puedan volver a España y vivir con ella en Granada, teniendo el padre el derecho de visita, según ha agregado el letrado que junto, a José Estanislao López Gutiérrez y Juan de Dios Ramírez, representa a la madre de Maracena.
Juana Rivas tratará de exponer también ante el tribunal de Cagliari los malos tratos que presuntamente padeció a manos de su expareja y que supuestamente le llevaron a abandonar la isla de Carloforte con sus hijos sin contar con el permiso paterno.
En la vista está previsto que se expongan además los informes que los servicios sociales italianos han realizado sobre los menores, entre otras pruebas aportadas por las partes.
Actualmente, Arcuri cuenta con la guarda y custodia provisional de los menores y Juana Rivas tiene derecho a un sistema de comunicación por videollamada diaria. Será a partir de este martes cuando la justicia italiana decida sobre la custodia y el régimen de visitas respecto a los pequeños, que permanecen desde finales de agosto en Italia, donde tienen fijada su residencia habitual.
Investigada por supuesta desobediencia judicial
Al margen de este proceso por la vía civil, Juana Rivas está siendo investigada por el Juzgado de Instrucción 2 de Granada por supuesta desobediencia judicial y sustracción de menores después de que saliera de Italia con los niños sin el permiso paterno y pasara un mes ilocalizable incumpliendo la orden judicial que le obligaba a entregárselos a su expareja, Francesco Arcuri, condenado en 2009 por lesiones en el ámbito familiar.
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Granada ha acordado recientemente no reabrir la diligencias previas por supuestos malos tratos en el caso de Rivas al entender que los hechos denunciados ocurrieron presuntamente en Italia y que por tanto la jurisdicción competente es la italiana.
La magistrada rechazó además adoptar las medidas cautelares que Juana Rivas solicitó a finales del pasado agosto, cuando pidió la reapertura de este procedimiento en España a tenor de unos presuntos malos tratos que se habrían producido entre los años 2013 y 2016 en Italia, donde ella tenía fijado su domicilio habitual.
Tanto Juana Rivas como su expareja, el italiano Francesco Arcuri, deberán comparecer ante el juez en el transcurso de esta vista que arrancará sobre las 9,00 horas de este martes.