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La joven que denunció la violación múltiple en los Sanfermines declara que entró en shock y la llevaron dentro del portal

  • Ha declarado durante casi cuatro horas en la segunda sesión del juicio
  • La Fiscalía pide 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno de los acusados
  • El juez admite un informe de un detective privado contratado por un acusado

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La joven que denunció la violación en los Sanfermines declara que dos de los acusados la llevaron dentro del portal

La joven madrileña que denunció haber sufrido una violación múltiple en los Sanfermines del año pasado ha asegurado en su declaración ante el tribunal que dos de los cinco acusados la cogieron, mientras ellas se encontraba bloqueada, y la llevaron hasta el rellano de las escaleras del portal donde se produjo la agresión, según ha contado su abogado al periodista de TVE Xaquín López.

Ella, según ha relatado su abogado, les dijo a los acusados que se iba a dormir a su coche y ellos se ofrecieron entonces a acompañarla. Al llegar a la altura de un hotel, uno de los acusados le explicó a la joven que no tenían habitación reservada y ella insistió en irse a dormir al coche.

El testimonio de la joven este martes ante la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra se ha prolongado durante cerca de cuatro horas sin que se hayan mostrado los vídeos grabados por los acusados, pero en el que se ha admitido un informe de un detective privado contratado por un acusado en el que se investiga la vida posterior de la joven presuntamente violada.

Sin visionado de los vídeos grabados por los acusados

La chica ha prestado declaración ante la sala sin ningún contacto con los cinco imputados, autodenominados como "la manada", ya que la sala ha decidido mantenerles esta mañana en una estancia separada.

El testimonio se ha demorado porque a los pocos minutos de empezar la vista el tribunal ha decidido hacer un receso para deliberar sobre la conveniencia de que la joven viera durante su comparecencia los vídeos que grabaron los acusados, algo a lo que se ha opuesto la Fiscalía.

El tribunal ha decidido que los vídeos se podían ver pero no ha ocurrido así porque nadie lo ha solicitado y la joven ha continuado con su testimonio, en el que estaba obligada a responder a todas las partes ya que ha sido citada como denunciante y testigo.

Las grabaciones son varias piezas breves que para las distintas acusaciones son la prueba de cargo de la agresión sexual que cometieron en grupo y que para las defensas avalarían la tesis de que las relaciones fueron consentidas.

Declaraciones de testigos

También ha declarado la pareja de jóvenes que se encontró a la chica llorando en un banco aquella madrugada, cerca del portal donde ocurrieron los hechos, y dieron aviso a SOS Navarra. La pareja ha hecho una declaración muy breve, según recoge Europa Press.

Para este miércoles están citados a declarar cuatro agentes de la Policía Municipal de Pamplona, cuerpo que identificó a los imputados pocas horas después por las cámaras instaladas en el recorrido del encierro, y tres miembros de la Policía Foral, que practicó las detenciones cuando llegaron a la plaza de toros.

En la primera sesión del juicio, este lunes, se resolvieron las cuestiones preliminares, sin cambios sobre lo decidido salvo una ampliación del informe encargado por las defensas a unos detectives privados sobre la joven, y también los cinco acusados se declararon "inocentes" del delito continuado de agresión sexual y contra la intimidad.

Cuatro de ellos además negaron el delito de robo con intimidación, mientras que el guardia civil reconoció que había "sustraído" el teléfono móvil de la víctima.

La Fiscalía pide 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno

Los cinco están imputados por un delito continuado de agresión sexual, otro contra la intimidad y un tercero por robo con intimidación, por los que la Fiscalía pide 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno.

Según el escrito de la acusación, los imputados bajaron la ropa interior de la joven, de 18 años, y le obligaron a realizar felaciones a todos ellos, que también la penetraron, uno anal y vaginalmente, sin usar preservativo y "valiéndose de su superioridad física y numérica" y de la "imposibilidad" de la joven de "ejercer la más mínima resistencia".

Mientras, dos de ellos, "sin el conocimiento ni consentimiento" de la chica, hicieron grabaciones de vídeo y fotografías con sus móviles, "con la intención de vulnerar la intimidad de la víctima y posteriormente mostrarlos, enviarlos y difundirlos a su grupo de amigos".

La acusación añade que cuando "se dieron por satisfechos" y antes de abandonar el lugar, un portal de un céntrico edificio de Pamplona, se apoderaron del móvil de la víctima para que "no pudiera solicitar auxilio".