Mugabe reaparece en medio de las presiones militares para que dimita
- Ha participado en una ceremonia de graduación universitaria en Harare
- Desde el martes se encontraba bajo arresto domiciliario
- Los veteranos le dan un ultimatum para que se marche
El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, ha reaparecido este viernes en un acto público, la primera ocasión desde que los militares tomaron el poder el pasado martes y le pusieron bajo arresto domiciliario.
Mugabe ha reaparecido en la ceremonia anual de graduación en la universidad de Harare, en la que toma parte tradicionalmente. Allí ha recibido la ovación de la multitud tras abrir la ceremonia. Al concluir la misma, se ha marchado.
Según informan las agencias internacionales y los medios locales, Mugabe ha acudido flanqueado por militares y sin su esposa, Grace, cuyas maniobras para sucederle precipitaron el golpe militar. Tampoco ha acudidoel ministro de Educación, Jonathan Moyo, quien, según la prensa local, continúa arrestado, y a quien se considera cabecilla del grupo que apoyaba las aspiraciones de Grace Mugabe.
Mugabe, en el poder desde hace 37 años, se niega a dimitir, pese a las presiones de la cúpula militar, de su propio partido (el ZANU-PF) y de la oposición. La cúpula del ZANU, le ha dado hasta este domingo para que dimita, o en caso contrario amenaza con expulsarle.
Los veteranos le piden que se marche ya
Los veteranos de la guerra de independencia, que han retirado su apoyo al presidente, han advertido que el tiempo se acaba y que no le permitirán continuar en el cargo.
El líder de la Asociación Nacional de Veteranos de la Guerra de Liberación de Zimbabue (ZNLWA, siglas en inglés), Christopher Mutsvangwa, ha anunciado la celebración de un mitin multitudinario este sábado contra el presidente: "Él (Mugabe) pensaba que tenía a la gente. Mañana verá".
“Si hoy decide marcharse, es su decisión. Mañana será diferente“
"Si no lo ve, tendremos que saldar las cuentas pendientes mañana [en refencia al sábado]", ha asegurado Mutsvangwa, que ha recordado que Mugabe "les debe algunos favores" después del trato "insensato" que les dio tras la independencia del país, en 1980, cuando el presidente accedió al poder. "Si hoy decide marcharse, es su decisión. Mañana será diferente", ha insistido.
Los veteranos de guerra han saludado la actuación del Ejército: "Son unos profesionales que protegen la Constitución. Han hecho un trabajo fantástico hasta ahora, de tal modo que no se ha perdido ni una vida".
Los comités regionales del partido dan la espalda a Mugabe
Asimismo, la mayoría de los líderes provinciales del su partido, la Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF),ha reclamado su dimisión, con el argumento de que es demasiado mayor y está incapacitado para seguir al frente de esa formación política y del Gobierno.
Según ha informado la televisión nacional ZBC, bajo control de los militares desde la asonada del martes, ocho de los diez Comités Coordinadores Provinciales han dado la espalda a Mugabe.
También han sido críticos con la facción conocida como G40 -alineada con las aspiraciones políticas de Grace Mugabe- y han alabado la iniciativa de la asociación de veteranos de guerra de celebrar un acto en la capital para escenificar el rechazo al presidente en la calle.
Asimismo, los Comités han instado a celebrar una reunión especial del Comité Central del partido, órgano encargado de tomar las decisiones, en un plazo de 48 horas para discutir la actual situación política.
Negociaciones para salir de la crisis
Los militares han asegurado, a través del diario The Herald (uno de los medios públicos de Zimbabue, que controlan las Fuerzas Armadas), que ha habido progresos significativos para dar una salida a la crisis gracias a las negociaciones que mantienen las dos partes.
En concreto, han afirmado que ha habido avances en su objetivo de eliminar a los "criminales del entorno de Mugabe" y de llevar a algunos de ellos ante la Justicia, aunque sin precisar nombres.
De acuerdo a los medios locales, los militares buscan pactar la salida de Mugabe del poder, aunque no necesariamente de forma inmediata. Por el momento, han remarcado su respaldo a la marcha convocada este sábado en Harare.
Algunas de las hipótesis que se barajan son que dimita en breve y el vicepresidente Emmerson Mnangagwa (huido a Sudáfrica) vuelva al país para encabezar un Gobierno transitorio de concentración o que Mugabe permanezca en el cargo hasta el congreso de su partido en diciembre o hasta las elecciones de 2018.