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Cinco libros para adentrarse en la Revolución Rusa

  • El centenario de la Revolución Rusa trae consigo numerosas publicaciones
  • Los nuevos títulos se suman a clásicos de referencia de diferentes géneros
  • Los libreros recomiendan cinco obras para entender las claves del fenómeno

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Imagen de Octubre de 1917. Soldados rusos vitorean a la Duma al hacerse publica la abdicacion de Nicolas II
Imagen de Octubre de 1917. Soldados rusos vitorean a la Duma al hacerse publica la abdicacion de Nicolas II

La Revolución Rusa es uno de los acontecimientos sociales y históricos de mayor calado del siglo pasado, cuyos ecos resuenan aún en el presente. En el año de su centenario, la Revolución bolchevique sigue siendo protagonista de numerosas publicaciones que analizan desde diferentes ángulos un suceso que cambió el curso de la Historia.

La conmemoración de la efeméride ha traído consigo una verdadera avalancha editorial en torno al tema. A la reedición de títulos que se han convertido en clásicos de referencia a través del tiempo, se suman numerosas novedades.

Juan Márquez, coordinador de la seccion "Los Libreros Recomiendan" de CEGAL (Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros), ha reseñado para RTVE.es cinco libros imprescindibles para adentrarse en las claves del fenómeno. A continuación, sus recomendaciones literarias:

Diez días que conmovieron al mundo, John Reed

Con toda seguridad es el reportaje sobre la Revolución de 1917 más leído y popular, hasta el punto de que el periodista norteamericano John Reed (Portland-Moscú, 1920) ha pasado a la Historia de su gremio como el “cronista de la Revolución” por antonomasia. Su acertado y vibrante estilo novelesco contribuyen más a la fama de aquellos artículos que, al parecer, a la objetividad de lo que cuenta, pero eso es lo que tiene la literatura: para muchísimos lectores lo que sucedió en Rusia en 1917 es lo que han leído en estas páginas, sin más, a pesar de estar escrito por un fundador del Partido Comunista de Estados Unidos que, acusado de espionaje, tuvo que huir a la Rusia soviética en 1919 y está enterrado, con todos los honores, en la Plaza Roja.

En España se han publicado dos ediciones para conmemorar su centenario: una en Sevilla, por la editorial Renacimiento, prologada por Manuel Neila, y una co-edición de Nórdica Libros y Capitán Swing ilustrada por Fernando Vicente.

La Revolución rusa (1891-1924). La tragedia de un pueblo, Orlando Figes

Se diría que el historiador inglés Orlando Figges concibe la Historia como una suma de biografías, pues este gran libro está en buena medida formada por piezas textuales que abordan a personajes como Nicolás II o su célebre consejero Rasputín con seres completamente anónimos del campesinado o del ámbito obrero.

La importancia que Figes concede a la tradicionalmente silenciada “Revolución de febrero” le obliga a poner los ojos en Kerensky, y de nuevo lo hace por el camino biográfico, y así se va creando un monumental mosaico de teselas personales que cuentan, por extensión, el papel de cada uno de los grupos sociales en aquellos decisivos acontecimientos (Editorial Edhasa, 2010).

Lleno de detalles (algunos francamente truculentos, como los que se refieren al canibalismo en el campo ruso en las épocas de hambre –es decir, casi siempre–), Figes es, a pesar de su enfoque anticonservador (que lo opone al libro de Richard Pipes, aunque entre ellos hay más paralelismos de fondo que divergencias), completamente hostil contra la memoria de Lenin, a quien culpa del terror, no sólo durante sus años sino durante los de Stalin, considerándolo el verdadero fundador del Gulag y de los métodos “industriales” de exterminio.

La Revolución rusa, Richard Pipes

El historiador polaco Richard Pipes, profesor en Harvard y tan conservador que llegó a ser asesor de Ronald Reagan, también echa sobre los hombros de Lenin toda la responsabilidad de las masacres, el hambre y las penurias de aquellos agitados años.

Publicada originalmente en 1990, esta reconstrucción panorámica de 1917 es célebre por la calidad de su prosa y, en cuanto a lo negativo, por el hecho de que sólo se aporten los documentos que refuerzan las posturas del autor, olvidando aquellos otros que pudieran comprometerlas. Su tesis más famosa es que la “Revolución de febrero” fue merecedora de tal nombre, porque fue espontánea, popular, probablemente inevitable por justa… pero lo de Octubre fue un auténtico golpe de estado por parte de la intelligentsia rusa, unos acontecimientos políticamente estratégicos, interesados, y con el resultado criminal de una guerra civil de tres años (Editorial Debate 2016).

La venganza de los siervos, Julián Casanova

El historiador zaragozano Julián Casanova, muy prestigioso en los círculos de izquierda, ha escrito la que con toda probabilidad va a ser la principal aportación bibliográfica española al año del centenario (Editorial Crítica 2017).

Mucho más cercano a Figes que a Pipes, Casanova ofrece un balance riguroso, serio, crítico y detallista que sirve también de repaso bibliográfico, haciéndose eco de los principales hitos librescos anteriores (pero, como suele suceder entre los historiadores, desoyendo las aportaciones literarias, que a veces también iluminan lo que sucedió, explicando sin inventar). El libro de Casanova llega en un momento en el que ya nadie niega que la revolución bolchevique devino en dictadura totalitaria, y explica los motivos con buena prosa y buenos argumentos.

El maestro Juan Martínez que estaba allí, Manuel Chaves Nogales

El que sin ninguna ha de ser uno de los libros más abracadabrantes, increíbles y peculiares sobre la Revolución de 1917 fue escrito por un español, el periodista sevillano Manuel Chaves Nogales, y cuenta la singular peripecia de un mediocre bailaor de flamenco al que las algaradas le pillan de gira en Kiev, junto a su mujer.

La peripecia que comienza entonces constituye una experiencia de lectura única, estrafalaria, divertidísima y a la vez dramática (Editorial Asteroide 2007). El modo en el que Martínez (o Chaves Nogales) habla del hambre, o de las inspecciones domésticas, o de los pasos de frontera… da cuenta con una vivacidad y una veracidad extremas de lo que sucedió en aquel tiempo en aquel lugar, una sociedad que el propio Chaves Nogales había visitado, y de la que habló en otro libro, no menos magnífico: La vuelta a Europa en avión. Un pequeñoburgués en la Rusia roja.