'Verano 1993' empieza la carrera al Oscar, "un milagro" para su directora Carla Simón

• "Era algo a lo que nunca en mi vida había aspirado", dice la realizadora
• Simón se enfrena a Michael Haneke o Angelina Jolie, entre otros

La directora española Carla Simon posa en una imagen de archivo.

La realizadora Carla Simón, directora de Verano 1993, la cinta precandidata de España para los premios de la Academia de Hollywood, se encuentra en Beverly Hills (Los Ángeles, Estados Unidos), donde -junto a su equipo- conocerá de primera mano la enorme maquinaria que se mueve alrededor de los Oscar. "Es un milagro todo lo que está pasando. Es una película muy pequeña y yo en mi vida pensé que estaría aquí hablando de los Oscar", ha confesado Simón (Barcelona, 1986) durante una entrevista con la Agencia Efe.

"Era algo a lo que nunca en mi vida había aspirado. Me parecía una experiencia muy surrealista. Y cuando salió escogida (como precandidata española) de repente la taquilla se acercó a como funciona el fin de semana del estreno. Yo estaba como que no me lo podía creer. La gente que no conoce mucho el cine sí conoce la palabra Oscar", ha agregado.

Verano 1993 -participada por RTVE- es uno de los 92 largometrajes presentados por países de todo el mundo para los Oscar, de los cuales saldrá una primera selección de nueve películas a mediados de diciembre que optarán a la categoría de Mejor Película de Habla no Inglesa. Cientos de académicos eligen seis de esas cintas, mientras que un comité de la institución agrega tres más. Por último, las cinco películas finalistas se conocerán el 23 de enero, cuando se anuncian todas las candidaturas para los Oscar.

Simón se enfrena a Haneke o Jolie, entre otros

La cineasta ha expuesto las dificultades que afronta una cinta para colarse finalmente en la gran gala del cine y competir por la estatuilla, especialmente si tiene enfrente a precandidatos de la talla de Michael Haneke (Happy End, Austria) o Angelina Jolie (Se lo llevaron: recuerdos de una niña de Camboya, Camboya). "Claro, cuando ves todo eso, piensas: 'Si yo hace cuatro días estaba en mi pueblo rodando la película...' Yo lo veo muy difícil, pero, bueno, aun así es una aventura", ha indicado sin perder la sonrisa.

Simón ha admitido, no obstante, que en todo este proceso influye mucho la suerte, por ejemplo a la hora de que una película caiga en gracia o no a un grupo determinado de académicos, y ha contado que en Los Ángeles ya ha participado en proyecciones oficiales de Verano 1993 con miembros de la Academia.

Preguntada acerca de si fantasea sobre cómo sería desfilar por la alfombra roja del teatro Dolby, Simón ha desvelado que es "muy supersticiosa". "Entonces, no me lo imagino, no me he tomado ni un minuto para pensar qué sería estar ahí. Si pasa, ya lo pensaré, pero si no, pues como que te creas tus ilusiones (...). Yo creo que es una manera de manejar las expectativas", ha declarado.

Simón continúa perpleja acerca del fenómeno que rodea a Verano 1993, una película basada en su propia niñez, pero ha considerado que quizá sus temas "universales" han conseguido conectar con personas en todo el mundo. Entre otros galardones se ha lleavdo la mejor ópera prima en la Berlinale o la Biznaga de Oro en Málaga. Próximamente Verano 1993 se estrenará en Estados Unidos.