La cumbre de la Unión Europea se debate entre la solidaridad y terminar con las cuotas de refugiados
- Alemania y Francia reclaman solidaridad ante la negativa de Austria
- Los países del Visegrado cuestionan la normativa de las cuotas de refugiados
- Los Veintiocho prolongan las sanciones a Rusia por la crisis en Ucrania
- La segunda jornada tratará el Brexit y la reforma de la eurozona
La última cumbre de la Unión Europea con la asistencia de Reino Unido ha arrancado este jueves en Bruselas con la temática sobre la política comunitaria de Defensa y Seguridad Común y las conversaciones sobre la inmigración de fondo, donde se han evidenciado las diferencias entre los líderes.
En un debate de más de dos horas que según fuentes comunitarias fue "sobrio" y "franco", los países "no aportaron nuevos elementos" sobre sus posiciones, "ya claras", y han mostrado su voluntad de llegar a un acuerdo para la reforma del sistema de asilo de aquí a junio de 2018.
En su última reunión del año, los líderes también han dado la bienvenida a la puesta en marcha oficial el pasado lunes de la nueva cooperación estructurada permanente (PESCO) a la que se han adherido 25 Estados miembros (entre ellos, España) para poder cooperar de forma más ambiciosa en el ámbito militar.
En materia internacional, han acordado de forma unánime prolongar otros seis meses las sanciones económicas a Rusia por su papel en la crisis en el este de Ucrania, introducidas inicialmente en julio de 2014. "La UE, unida en prolongar las sanciones económicas a Rusia", ha anunciado el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, a través de Twitter. Además, se ha reafirmado el compromiso europeo con la solución de dos Estados para el conflicto entre Israel y Palestina.
Alemania y Francia piden solidaridad ante la negativa de Austria
La cumbre viene precedida por el enfrentamiento entre el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, que cuestionó este martes el mantenimiento de cuotas obligatorias para reubicar refugiados, y la Comisión Europea (CE), que defiende este sistema.
Según fuentes consultads por EFE, desde septiembre de 2015 han sido reubicadas 32.000 personas en Estados miembros, mientras que más de dos millones de personas han solicitado asilo en la Unión Europea. Tusk pretendía lanzar una discusión sobre la futura reforma del Sistema Europeo Común de Asilo y no que sirviera como "excusa para que los países no implementen sus obligaciones legales existentes", han explicado esas fuentes a EFE.
A su llegada a la cumbre, la canciller alemana, Angela Merkel, ha reclamado la solidaridad entre los países en materia migratoria no sólo en "el ordenamiento y gestión" de los flujos migratorios, sino también entre los Estados del bloque. Lo mismo ha hecho el presidente francés, Emmanuel Macron, que ha insistido en que se deben respetar los cuotas ya aprobadas para reubicar refugiados, y ha afirmado que no se puede caer "en un bloqueo excesivo", en referencia a la negativa de los países del Este a acoger refugiados.
Más crítico se ha mostrado el canciller de Austria, Christian Kern, que ha rechazado categóricamente que la reubicación de refugiados mediante cuotas sea ineficaz y divida a los socios. "Es incomprensible para nosotros, pues la Unión Europea consiste en que aprovechamos juntos las ventajas y nos repartamos la carga. No puede ser que uno no colabore cuando no le gusta la carga, la cooperación conjunta no puede funcionar así", ha dicho.
Hungría, Eslovaquia, Chequia y Polonia, alineados con Tusk
Por el contrario, los países de Visegrado (Hungría, Eslovaquia, Chequia y Polonia) han dicho alinearse con la propuesta de Tusk, tras una reunión con el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, y el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni.
"Rechazamos absolutamente la idea de las cuotas porque creemos que no funcionan, son ineficaces", ha segurado el primer ministro eslovaco, Robert Fico, convencido de que han dividido a la Unión Europea. Fico ha añadido que no existe "un derecho humano para viajar a la UE" y que en este momento no hay consenso entre los socios comunitarios para reformar el sistema de asilo.
Por su parte, Tusk aboga por el "consenso" entre los países para encontrar un nuevo sistema migratorio.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, ha considerado la posibilidad de que la reforma se adopte por "una mayoría amplia" sin "pretender la unanimidad".
Juncker, al término de la reunión, ha declarado que los países tienen que "examinar las propuestas" de la CE "que están en la mesa" y, en caso de no llegar a un acuerdo "por consenso, no se excluye" aprobar la reforma por mayoría.
El 'Brexit' y la reforma de la eurozona durante la segunda jornada
Los líderes de los países miembro, salvo Reino Unido, abordarán este viernes la situación del Brexit, tras el acuerdo alcanzado la pasada semana entre Londres y Bruselas la pasada semana. Así, está previsto que respalden la propuesta del negociador jefe de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier, de avanzar a una segunda fase de las negociaciones porque hay suficientes progresos en los tres temas prioritarios de las conversaciones para la salida del Reino Unido.
Por otra parte, la cumbre también celebrará una "cumbre del Euro" con los 19 países que comparten la moneda única, aquellos que han firmado el Pacto Fiscal y República Checa y Croacia como invitados. El objetivo es debatir propuestas para reforzar una eurozona, aunque no habrá decisiones concretas hasta junio de 2018.
Entre las medidas que se pondrán sobre la mesa, la transformación del actual Mecanismo Europeo de Estabilidad (el fondo de rescate de la eurozona) en un Fondo Monetario Europeo, el establecimiento del cortafuegos del Fondo Único de Resolución (FUR) bancaria, y poner en marcha el Sistema Europeo de Garantía de Depósitos (EDIS, en inglés). Completar el FUR y el EDIS es imprescindible para culminar la Unión Bancaria, tarea que los Estados consideran prioritaria.
Falta consenso, por el contrario, sobre las propuestas para simplificar las reglas fiscales, crear una capacidad fiscal para estabilizar la economía en tiempos de crisis y un ministro de Economía de la UE. Sin embargo, el escollo más inmediato es la falta de un Gobierno en Alemania, la principal economía de los Diecinueve, cuyo apoyo es imprescindible para cualquier decisión.