Bruselas activa el proceso para retirar a Polonia el derecho a voto en la UE
- La Comisión alega "riesgo de una ruptura seria del Estado de derecho en Polonia"
- Bruselas abrió una investigación en 2016 tras las polémicas reformas de Szydlo
- Su partido, el ultraconservador y nacionalista Ley y Justicia, llegó al Gobierno en 2015
- Polonia tacha de "político" el proceso
La Comisión Europea (CE) ha puesto este miércoles en marcha el artículo 7 de los tratados europeos contra Polonia, un proceso legal que podría retirar a Varsovia su derecho a voto en la Unión Europea debido a sus polémicas reformas del sistema judicial, que Bruselas considera contrarias al Estado de derecho.
"La Comisión ha concluido hoy que hay un claro riesgo de una ruptura seria del Estado de derecho en Polonia (...). La Comisión propone al Consejo que adopte una decisión en el marco el artículo 7 del Tratado de la Unión Europea", indicó la CE en un comunicado.
En rueda de prensa, el vicepresidente de la CE Frans Timmermans ha recordado las invitaciones al diálogo que Bruselas ha emitido durante los últimos dos años y señaló que las decisiones adoptadas por el gobierno polaco "ponen en tela de juicio la separación de poderes y la independencia judicial" en el país.
Independencia judicial "inexistente" en Polonia
Las reformas, impulsadas por el partido gubernamental Ley y Justicia (PiS), de corte conservador, permiten al ministro polaco de Justicia, quien también ejerce de fiscal general, el nombramiento de magistrados en tribunales regionales y de apelación, entre otros cambios.
"El trazo común de estas reformas es que los poderes legislativos se establecen de tal manera que la mayoría que gobierna interfiere en la composición y el funcionamiento de estas autoridades (judiciales), haciendo que la independencia judicial sea inexistente", incidió Timmermans, quien también es el comisario europeo competente en temas sobre Estado de derecho.
El político holandés ya había advertido de la preocupación que causaban en Bruselas estas polémicas reformas a través de tres advertencias y recomendaciones hacia las autoridades polacas en 2016 y 2017, que no fueron tenidas en cuenta desde Varsovia.
"Lo hacemos con mucha pesadumbre. La CE inicia el artículo porque no había otra elección", subrayó Timmermans, que recordó que "la fuerza de la UE la igualdad ante la ley garantizada para todos" y que todos los ciudadanos de comunitarios tienen derecho a acceder a un sistema judicial independiente.
La reacción de Varsovia
Berlín ha expresado su apoyo a la Comisión Europea en caso de que decida actuar contra Polonia. Así lo ha anunciado este miércoles Steffen Seibert, portavoz de Gobierno alemán: "Si lo decide la Comisión, lo apoyaremos".
El Gobierno polaco ha tachado este miércoles de "político" el proceso legal contra tras sus polémicas reformas de la judicatura. Desde que fueron aprobadas por el ejecutivo conservador de Beata Szydlo hace dos años han despertado las críticas del resto de socios europeos y de la oposición polaca, que denuncian el excesivo control que se arroga el Gobierno.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores polaco se ha mostrado dispuesto al dialogar con Bruselas, pero ha señalado que no puede aceptar "opiniones unilaterales e injustas" e indicó que quiere "continuar con la reforma de sus sistema judicial" porque el gobierno se lo debe a sus "votantes".
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, iha indicado en Twitter que "Polonia está comprometida con el estado de derecho tanto como la UE" y confió en que se pueda reconciliar la posición de su país con "la idea de una Europa unida".
Europa se une contra el ultranacionalismo
La Comisión Europea decidió en enero de 2016 iniciar una investigación para evaluar el respeto de Polonia a las normas del Estado de derecho tras las polémicas reformas adoptadas por el Gobierno del partido ultraconservador y nacionalista Ley y Justicia, en particular la del Tribunal Constitucional y el intento de estrechar el control sobre los medios de comuniciación públicos.
Partidos políticos europeos mayoritarios y la organización Amnistía Internacional acogieron bien en ese momento una decisión que la Alianza de Demócratas y Liberales Europeos (ALDE) del Parlamento Europeo calificó de "paso histórico", puesto que se trata de la primera vez que se activa el llamado marco para salvaguardar el Estado de derecho, creado en marzo de 2014.
Esta herramienta legal fue introducida en 2015, acto motivado por la incapacidad de Bruselas para impedir que el gobierno húngaro, del también ultraconservador Víktor Orban, vulnerase los valores democráticos de la Unión Europea.
Preguntado por la conveniencia del momento en el que se ha activado el proceso, Timmermans ha dicho no ser "ingenuo" y declaró saber que "algunos intentarán venderlo como ataque a la nación o al pueblo polaco". Y ha afirmado:"Estoy firmemente convencido de que la Comisión Europea es guardiana de los tratados y tiene responsabilidad de actuar. Si no asumimos esta responsabilidad y no nos lo tomamos en serio (...), sufrirá la UE en su conjunto", afirmó.
El caso queda ahora en manos de los países europeos, que tras obtener el visto bueno del Parlamento Europeo y escuchar a la posición de Polonia, votarán si constatan "la existencia de un riesgo claro de violación grave" de los valores del Estado de derecho.