Un libro reúne los míticos 'American Splendor' de Robert Crumb y Harvey Pekar
- American Splendor. Los cómics de Bob y Harv, incluye todas sus colaboraciones
- Historias que se encuentran entre lo mejor del género autobiográfico de todos los tiempos
American Splendor no fue el primer cómic autobiográfico, pero es una de las cumbres del género gracias al talento de su guionista Harvey Pekar (1939-2010), y a la colaboración de grandes artístas, sobre todo su amigo, el mítico dibujante Robert Crumb (1943). Ahora un volumen recoge todas sus colaboraciones en la mítica serie: American Splendor: Los cómics de Bob y Harv (La Cúpula). La prueba de que una vida normal y corriente pude ser apasionante si se narra con talento.
En este cómic autobiográfico descubriremos cómo se conocieron ambos autores, las aficiones que compartían y cómo fue Robert Crumb, antes de saltar a la fama, quién animó a Pekar a escribir y editar sus propios cómics, e incluso dibujó muchos de ellos (todos incluídos en este volumen). Corría el año 1976, y Pekar vivía en Cleveland, una ciudad muy afectada por la crisis económica, y en una América desencantada después del fiasco de Vietnam.
Un desencanto que es el que da la garra y la fuerza a estas historias autobiográficas en las que nos cuenta su vida como crítico de Jazz, coleccionista y archivero en un hospital público de Cleveland, prestando especial atención a sus agitadas relaciones sentimentales y sin ocultar su carácter colérico y sus episodios maniaco-depresivos, que lo convertían en un antihéroe perfecto en uno de los momentos históricos más convulsos de su país.
Dos genios destinados a encontrarse
El volumen comienza con dos textos de ambos autores en los que hablan sobre su relación. Por ejemplo, Robert Crumb asegura que: "En las viñetas de American Splendor apenas sucede nada. La mayor parte del tiempo no son más que gente hablando, o Harvey y yo castigando al pobre lector.Nada de luchas heróicas, el triunfo del bien sobre el mal, resolución de conflictos, gente desafiando al destino, cosas así. Es más bien como la vida real..., la vida real a finales del siglo XX en Cleveland, arrastrándose de un día a otro... Todo cuanto Pekar nos ofrece es la vida real".
MIentras que Pekar, fallecido en 2010 a los 70 años, asegura que: "Crumb atravesó una época muy mala durante los 70. La demanda de sus trabajos cayó en picado, tuvo problemas con Hacienda y con las mujeres.... ¡Supongo que fui un beneficiario de la mengua de su producción, porque entre 1967 y 1983 ilustró muchos de mis guiones. ¡Menudo golpe de suerte! Crumb, uno de los artistas más grandes del cómic, fue vecino mío en Cleveland de 1962 a 1966. Sus dibujos no sólo eran increíbles, también atrajeron la atención sobre mis guiones, permitiéndome a mí, un desconocido, ganarme los favores del público y de otros artistas sensacionales, de modo que en adelante, pude irles asignando mis historias como haría un director de casting con los personajes".
Lo cierto es que, salvo algunas ilustraciones en sus inicios, Robert Crumb no ha trabajado con ningún otro guionista que no sea Harvey Pekar, lo que demuestra la confianza mutua que ambos tenían.
Las pequeñas miserias cotidianas
"La vida ordinaria es algo muy complejo" (Harvey Pekar)
En la época en la que Pekar decidió sacar esta serie, las historietas de héroes con superpoderes dominaban completamente el mercado. Y él se atrevió a hacer algo totalmente diferente: contar las miserias, tragedias y algún que otro pequeño y efímero triunfo de un hombre anónimo.
En American Splendor' trazó una crónica de la cruda realidad cotidiana en Estados Unidos basada en sus propias vivencias que recreaba en el cómic sin concesiones, con dureza y sobre todo con elevadas dosis de sarcasmo y desencanto.
Historias de un perdedor que pronto le convirtieron en un autor de culto. Etiqueta que, como no, también odiaba.
Un cómic marcado por el éxito
La primera recopilación de American Splendor ganó un American Book Award en 1987. Y Pekar recibió el Premio Harvey en 1994 por la novela gráfica Our Cancer Year, en la que también colaboró su mujer.
A fines de los 80, el éxito de los comics de Pekar lo llevó a ser invitado ocho veces al programa Late Night with David Letterman. Sin embargo, su estilo combativo y sus excesivas críticas provocaron que no volviese como invitado hasta principios de los 90.
En 1985 y 1990 American Splendor se adaptó a sendas obras de teatro, con gran éxito.
Y en el 2003 se convirtió en una película, protagonizada por Paul Giamatti. Una cinta dirigida por Robert Pulcini y Shari Springer Bermanque que recibió los elogios de casi todos (ganadora del Festival de Sundance, premiada en Cannes y candidata al Oscar) pero no de Pekar. El autor, fiel a su fama de antipático y huraño renegó de ella pese a haber colaborado en su producción. Harvey Pekar, genio y figura...
Pekar fue encontrado muerto el día 12 de julio del 2010 en su casa en Cleveland Height, Ohio. Tenía 70 años y luchaba contra el cáncer. Al parecer una sobredosis accidental de antidepresivos pudo acabar con su vida.
Esta recopilación de todos sus colaboraciones con Robert Crumb es una joya que debería atesorar cualquier aficionado al cómic.