Montoro espera aprobar el proyecto de presupuestos de 2018 en la primera semana de abril como muy tarde
- Esa sería la "fecha límite" para que las cuentas estén aprobadas del todo en junio
- El ministro culpa al independentismo catalán de que no estén ya aprobados
- Montoro llama a los partidos a apoyar los presupuestos por "responsabilidad"
- Ciudadanos exige el cese de la senadora Barreiro y el PNV no garantiza su respaldo
- PSOE y Podemos recuerdan a Montoro que es su "obligación" presentar las cuentas
El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha anunciado este miércoles que la intención del Gobierno es aprobar el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2018 en el último Consejo de Ministros de marzo o, como muy tarde, en la primera semana de abril para que las cuentas del año presente estén aprobadas definitivamente en junio y ha señalado al independentismo catalán como la "causa clara" de que no estén ya en vigor.
Montoro ha comparecido esta tarde a petición propia y del PSOE ante la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados para explicar las condiciones en las que se aprobó la prórroga para 2018 de las cuentas del año pasado hasta que se aprueben las nuevas durante cerca de tres horas y media.
La primera semana de abril sería la "fecha límite" con la que trabaja el Ejecutivo, según Montoro, quien ha pedido a los grupos políticos su respaldo porque "lo que no va a hacer" el Gobierno "es traer un proyecto de ley de esta envergadura sin los apoyos parlamentarios" suficientes para que salga adelante.
En este sentido, ha apelado a la "responsabilidad" de los partidos políticos porque tener unos nuevos presupuestos "es lo que le conviene a España y a todos y cada uno de sus ciudadanos" y ha añadido que seguirá "negociando" para conseguirlo. No obstante, Montoro ha acusado de falta de "coherencia" a las formaciones que respaldaron en verano el techo de gasto para 2018 pero que ahora no garantizan su apoyo a los presupuestos, en alusión a Ciudadanos y el PNV.
La oposición en bloque, encabezada por el PSOE y Unidos Podemos, ha recordado al ministro que la "obligación" de presentar los presupuestos es del Gobierno y que si no están aprobados es, entre otros motivos, porque no los ha llevado al Congreso y niega que haya intento de diálogo. La formación naranja y los nacionalistas vascos, que apoyaron las cuentas de 2017, han negado que el Ejecutivo esté intentando negociar con ellos las nuevas de 2018 y le han alertado, por su parte, de que no tienen por qué votar a favor esta vez.
Ciudadanos le ha advertido directamente de que no respaldará las cuentas si el presidente, Mariano Rajoy, no cumple el acuerdo de investidura y no cesa a la senadora del PP Pilar Barreiro, imputada en la trama Púnica. El PNV ha subrayado que el pacto alcanzado para las cuentas de 2017 a cambio de la mejora del cupo vasco no les comprometía a "nada más" y que si respaldó en verano el techo de gasto para 2018 fue por "responsabilidad".
Montoro culpa al independentismo catalán de que no haya presupuestos
En su primera intervención, Montoro ha señalado al independentismo catalán como la "causa clara" y "manifiesta" que ha impedido que España tenga ya aprobados los presupuestos para el año en curso. "No es una causa menor, es la mayor crisis política que ha tenido nuestra democracia y el más grave intento de torpedear dentro del Estado al propio Estado. Un intento, que califico ya de fallido, de obstaculizar la recuperación económica y la creación de empleo en Cataluña y el resto de España", ha subrayado Montoro.
El titular de Hacienda y Función Pública cree que la crisis catalana es la que ha provocado que partidos que aprobaron el pasado verano el techo de gasto para 2018 ahora no quieran dar el apoyo a los presupuestos, en alusión al PNV. "Carece de sentido que grupos que respaldaron esos objetivos no sean coherentes (...) Alguien ha cambiado de opinión en este breve trayecto", ha señalado el ministro, que también ha recordado al PSOE que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fue investido gracias a la abstención de la mayoría de su grupo.
Montoro ha señalado una "triple razón" para aprobar las nuevas cuentas: la subida salarial de los funcionarios y empleados públicos incluida la oferta de empleo público; la necesidad de actualizar la financiación de las comunidades autónomas y corporaciones locales; y la actualización de inversiones en distintos territorios. No obstante, el ministro de Hacienda ha defendido que los presupuestos actualmente en vigor, los de 2017, son "tan buenos" que han permitido a España crecer un 3,1% interanual hasta el mes de septiembre, tener al "alcance" el cumplimiento del objetivo de déficit del 3,1% e incrementar la recaudación tributaria en un 6,3%.
Ciudadanos no apoyará los presupuestos si no se cesa a Barreiro
El portavoz de Hacienda de Ciudadanos y presidente de la Comisión de Presupuestos, Francisco de la Torre, ha ofrecido su apoyo al Gobierno para sacar adelante los presupuestos de 2018 siempre y cuando se cumpla el acuerdo de la investidura de Mariano Rajoy, que incluía la destitución de todos aquellos cargos que estuvieran imputados en caso de corrupción en alusión a la senadora Pilar Barreiro, imputada en el caso Púnica y que sigue conservando su escaño en la Cámara Alta. "Estamos convencidos de que ustedes no van a sacrificar la estabilidad presupuestaria para proteger a presuntos corruptos", ha sentenciado De la Torre, que ha agradecido el "tono" de la intervención del ministro.
El diputado de Ciudadanos ha advertido, además, a Montoro de que no le darán al Gobierno "un cheque en blanco" y le ha pedido que detallen qué presupuestos quieren hacer: "No puede pedirnos que apoyemos unos presupuestos sin negociarlos", ha insistido.
Las condiciones que imponen, más allá del cese de Barreiro, es que el proyecto de Presupuestos incluya 500 millones de euros para la equiparación salarial de la Policía Nacional y la Guardia Civil con el resto de policías autonómicas para este mismo año y una "rebaja de impuestos para las familias en situación especial y para españoles con menor renta".
"Me dice que me agradece el tono. Yo lo que agradecería es el apoyo", ha respondido irónico Montoro a De la Torre provocando las risas de los presentes. "¿Quieren nuevos presupuestos generales del Estado? Depende de ustedes, yo no tengo mayoría de diputados", ha añadido el ministro, quien ha revelado que la formación naranja desconvocó una reunión para negociar los presupuestos hace tan solo dos semanas después de poner la exigencia de la destitución de la senadora imputada.
El PNV tampoco garantiza su apoyo a los presupuestos
Pero los diputados de Ciudadanos tampoco serían suficientes para sacar adelante las cuentas. El Gobierno necesitaría como el año pasado los cinco diputados del PNV. Al respecto, la portavoz de los nacionalistas vascos en la comisión, Idoa Sagastizabal, ha explicado que respaldaron el techo de gasto para 2018 por "coherencia" y "responsabilidad" pero ha negado que nadie haya intentado negociar con ellos las cuentas de 2018.
La diputada del PNV ha evidenciado la "debilidad política" del PP en el Congreso donde no consigue la mayoría que necesita "por la gestión de la crisis catalana", por un lado, y por las "diferencias ideológicas" con el resto de fuerzas por otro, según su diagnóstico. Sagastizabal ha insistido además en que el acuerdo sobre el cupo vasco era a cambio únicamente del respaldo de las cuentas de 2017.
"Me gustaría más compromiso de la responsable del PNV", ha respondido Montoro, que ha incidido en que desde el Gobierno ya "han hecho lo que tenían que hacer en términos de renovación del cupo".
El PSOE pide a Montoro que haga los "deberes" y presente el proyecto
Por su parte, el portavoz del PSOE en la Comisión de Presupuestos, José Javier Lasarte, ha pedido al ministro de Hacienda que haga sus "deberes" y presente en el Congreso de los Diputados el proyecto para las cuentas de 2018 y la reforma de la financiación autonómica. "Presente proyectos y hablaremos", ha añadido.
Lasarte ha acusado también al Gobierno de acometer un "recortazo" en inversiones de infraestructuras, becas o en programas de dependencia o violencia de género, informa Efe, por haber acordado con la prórroga de los presupuestos limitar el gasto público de los ministerios al 50%, según informó hace dos semanas la Cadena Ser.
Al respecto, Montoro ha señalado que si se llega al límite del 50% antes de que estén aprobados los nuevos presupuestos, Hacienda autorizaría un nuevo límite y ha justificado que no hayan buscado expresamente el respaldo del PSOE a las nuevas cuentas porque el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, mantiene que no las apoyará.
Por su parte, el diputado de Unidos Podemos Segundo González ha criticado que Montoro culpe a los partidos de la falta de Presupuesto cuando es una competencia del Gobierno y le ha acusado de "chantajear" a las comunidades autónomas, que no han podido recibir el aumento de financiación, según recoge Efe.
Los partidos catalanes hablan de "fracaso"
Esta misma agencia de noticias informa de que el diputado de ERC Joan Capdevila ha considerado un "fracaso" que los miembros del Gobierno no hayan sido capaces de "convencer a otros grupos" para aprobar las cuentas, al tiempo que también le ha afeado porque no se hayan puesto en contacto con su partido en esas conversaciones. Ferran Bel, del PDeCAT, ha criticado la falta de autocrítica de Montoro y le ha recordado que el Gobierno es quien tiene la obligación de presentar los presupuestos.
Durante la comparecencia ha habido espacio también para la polémica del día. El ministro ha aprovechado su intervención para defender a Mariano Rajoy frente las críticas de la oposición después de que por la mañana, en una entrevista en Onda Cero, haya respondido "no nos metamos en eso" cuando le han preguntado si sancionaría a una empresa que pague menos a una mujer que a un hombre con el mismo puesto.
Pedro Sánchez (PSOE) ha acusado a Rajoy de "remar en contra" de los avances de igualdad en un mensaje de Twitter. Montoro ha ironizado con que "no había discriminación salarial con el PSOE porque la mujer no trabajaba" y ha defendido que "dos de cada tres" de las mujeres que trabajan se incorporaron después de 1996. El ministro ha asegurado además que ya se han recuperado los puestos de trabajo de las mujeres perdidos con la crisis. "La primera discriminación está en el no acceso al trabajo", ha concluido.