La nueva jueza española en el TEDH defiende su elección y sopesa "acciones legales" tras las críticas

• Ha publicado una carta que repasa los mecanismos de control durante el proceso
• Señala que no existía "obligación" de incluir una mujer como candidata en la terna
• Asegura que tomará medidas para "hacer valer" sus derechos constitucionales

La nueva jueza española en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, María Elósegui.

La nueva jueza española en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, María Elósegui, ha defendido este martes la transparencia del procedimiento por el que ha sido elegida para el cargo y ha anunciado su intención de cursar las "pertinentes acciones legales" en defensa de sus derechos constitucionales ante las críticas de las que ha sido objeto.

Así lo señala en una carta que ha hecho pública tras una serie de informaciones con declaraciones y pasajes de textos de la propia Elósegui, en las que cuestionaba la homosexualidad o la transexualidad. El PSOE, además, ha denunciado que falseó el currículum presentado para acceder a la plaza del Tribunal con sede en Estrasburgo y se plantea pedir que se revoque su nombramiento.

Al respecto, Elósegui, catedrática en la Universidad de Zaragoza, ha subrayado en la citada carta que "el procedimiento de elección de juez" para el Tribunal de Derechos Humanos "ha seguido por primera vez una tramitación conforme a las exigencias tanto del Convenio Europeo de Derechos Humanos como de las Recomendaciones de la Asamblea Parlamentaria y del Comité de Ministros del Consejo de Europa".

Todo ello, añade, "ha redundado en una mayor transparencia y objetividad" del proceso de selección, y por tanto, "en la adecuada cualificación de la terna".

Primera mujer española en el cargo

A la plaza, en representación de España, concurrieron tres magistrados, entre ellos el expresidente del Tribunal Constitucional Francisco Pérez de los Cobos. Con su elección, Elósegui se ha convertido en la primera mujer española en el puesto, aunque la magistrada destaca que no existe "obligación" de que haya una mujer en la terna.

En la carta, la catedrática de Filosofía del Derecho recuerda los pasos dados desde enero de 2017, cuando el Consejo de Ministros anunció que abría el concurso de presentación de candidaturas.

El plazo se mantuvo abierto hasta septiembre del año pasado y para la elección se formó un comité formado por "funcionarios de carrera", asistidos a su vez por dos intérpretes de la Oficina de Interpretación de Lenguas del Ministerio de Asuntos Exteriores, recuerda Elósegui.

"Posteriormente, se eligió una terna que fue supervisada por los juristas del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que la aprobó", añade.

Defender sus derechos

Ya en este mes de enero, prosigue la catedrática, se celebró una "entrevista-examen" por los jueces de la Asamblea Parlamentaria sobre aspectos relacionados con el Convenio Europeo de Derechos Humanos y sobre su jurisprudencia. "Esta comisión consideró que los tres candidatos reunían las condiciones requeridas", afirma.

Una mayoría de 114 votos en la Asamblea Parlamentaria, compuesta por 324 congresistas de los parlamentos nacionales, determinó que Elósegui fuera la elegida para el cargo.

"Los curricula de los candidatos estuvieron a disposición pública tanto en la web del ministerio correspondiente como en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa", recalca.

Expuesto el procedimiento, Elósegui termina su carta con el anuncio de posibles "acciones legales" para "hacer valer" sus derechos constitucionales.