Deloitte afirma que tuvo un tiempo "extremadamente corto" para hacer el informe del Popular y que este era "provisional"
- La auditora hizo el informe en 12 días cuando normalmente tarda 6 semanas
- Las autoridades europeas justificaron la resolución del Popular con este informe
- Afirma que tuvo "oportunidades limitadas" de debatir las conclusiones con el banco
- Deloitte: el informe "debe ser considerado como altamente incierto y provisional"
- La JUR consideró solvente al Popular hasta dos días antes de su resolución
La auditora Deloitte advirtió a la Junta Única de Resolución (JUR) de que tuvo un tiempo "extremadamente corto" para elaborar el informe de valoración del Banco Popular sobre el que el organismo europeo basó su decisión de resolver la entidad española. En una misiva enviada a la JUR junto al estudio -confidencial en parte- el 6 de junio de 2017, la víspera de la resolución, Deloitte señala que no tuvo acceso a "cierta información crítica", advierte de que el informe -que califica de "provisional"- cuenta con un "alto grado de incertidumbre" y explica que la mayoría de la información de la que disponía eran datos del 31 de marzo de 2017.
La Junta Única de Resolución de la Unión Europea ha publicado este viernes partes del informe de Deloitte, así como partes adicionales de la decisión de resolución, las cartas que se enviaron a los potenciales compradores, la decisión de comercialización y el plan de resolución que había elaborado el Banco Popular en 2016, aunque todavía mantiene información reservada sobre la decisión que culminó con la compra de la entidad por parte del Banco Santander.
Lo que sí ha publicado este viernes la JUR es que consideró solvente a la entidad el día 5 de junio, si bien advirtió de la crisis de liquidez por la retirada de depósitos que finalmente llevó a su resolución solo dos días después. "La valoración provisional no indica que el banco sea insolvente", dijo la JUR en las conclusiones de su informe contable, el primero que valoró la entidad. No obstante, el organismo europeo encargado de las resoluciones bancarias en la eurozona subrayó que "la liquidez y las condiciones del GBP (Grupo Banco Popular) están desencadenando la valoración de 'inviable o en vías de serlo'".
Con la publicación de estos documentos la JUR responde la petición de su panel de apelación, que en noviembre le instó a publicar las versiones no confidenciales de los documentos para dar respuesta a los afectados. Estos consideran que el informe es una pieza clave para poder defender su caso ante los tribunales europeos y españoles.
El informe de Deloitte, "altamente incierto y provisional"
Uno de los documentos es la misiva ya mencionada en la que Deloitte asegura a la Junta Única de Resolución que "a la vista de la difícil posición de liquidez" del banco "se nos ha requerido hacer este informe en un periodo de tiempo extremadamente corto". La consultora precisa que tuvo 12 días para elaborarlo cuando normalmente hubiesen esperado contar con "al menos seis semanas" para un proyecto de esta naturaleza, y puntualiza que así se acordó inicialmente con la JUR el 23 de mayo de 2017.
Deloitte apunta, además, que tuvo "oportunidades limitadas" de debatir las conclusiones con la directiva, auditores, supervisores y otro personal familiarizado con el Popular. La consultora agrega que "en ningún caso hubiera sido posible llevar a cabo un análisis completo de toda la información necesaria (...) debido al tiempo disponible". Por tanto, indica, se trata de un informe que "debe ser considerado como altamente incierto y provisional", y se incluyó en la valoración un colchón para pérdidas adicionales que no fue posible estimar precisamente, tal y como requieren las leyes europeas de resolución y reestructuración bancaria.
La auditora indicó que su informe parte de la asunción de que la resolución que se llevaría a cabo de la entidad sería la venta total del banco en un proceso competitivo, pero hizo también una evaluación de cual sería su valor en caso de liquidación y el retorno que recibirían entonces los acreedores. En su estudio, Deloitte hizo una valoración del capital de la entidad que resultó en un rango de entre 1.300 millones de euros en el escenario positivo, de -2.000 millones en el escenario central y de -8.200 millones en la peor de las situaciones.
Las autoridades europeas, "obligadas" a pedir el informe más rápidamente
Fuentes de la JUR, citadas por la Agencia Efe, señalan que la regulación europea reconoce que las resoluciones pueden ocurrir de forma urgente y que, precisamente por ello, da margen para que se hagan valoraciones provisionales como la efectuada por Deloitte.
Apuntan también que en el momento de contratarles no esperaban que la quiebra del banco pudiese ocurrir "en un periodo tan corto", y como resultado se vieron "obligados a pedir a Deloitte que recortase dramáticamente los plazos", si bien consideran que el resultado del informe es "robusto".
En cuanto a la falta de información, las mismas fuentes señalan que "es consecuencia de la capacidad del banco para responder", dado que la entidad ya había proporcionado información durante el periodo de venta, pero "no pudo responder" a todas las demandas adicionales que hicieron los auditores.
El problema del Popular, la crisis de liquidez
"La valoración provisional no indica que, en la fecha de la valoración, el banco sea insolvente. En particular, la autoridad de resolución no tiene indicación para considerar que el Grupo Banco Popular infringe los requisitos de capital", señala la JUR en el informe desvelado este viernes y recogido por Europa Press.
En las conclusiones de este documento, la institución comunitaria subraya sin embargo que la solvencia de la entidad estaba en aquellos días "bajo condiciones de estrés" y que los mercados estaban descontando un déficit en la cobertura de préstamos fallidos así como la implementación de futura regulación, "dos factores que estaban afectando a la posición de liquidez" del Popular.
Finalmente, la JUR apunta en el informe que fue precisamente la posición de liquidez y las condiciones de financiación del banco las causas que desembocaron en que el Mecanismo de Supervisión del BCE declarase que la entidad era inviable o existía probabilidad de que lo fuese.
La salida de depósitos, aguda entre el 12 de mayo y el 1 de junio
La Junta Única de Resolución señala que la situación empeoró a raíz de la "cobertura mediática", el anuncio de que tendría que proceder a una ampliación de capital y la rebaja de su rating y que las salidas de depósitos fueron especialmente agudas el 12, 16, 22 y 31 de mayo y el 1 de junio de 2017..
La JUR, sin embargo, ha ocultado en el documento todos los datos concretos sobre la situación de liquidez de la entidad, el monto de depósitos que salieron, la liquidez de emergencia que recibió o el colateral que proporcionó hasta quedarse sin suficiente para seguir recibiendo esa ayuda de emergencia del BCE, algo que achaca a que la institución de Fráncfort "como propietario de dicha información se ha opuesto a su publicación".
La JUR aún tiene pendiente de publicar, previsiblemente en primavera, un tercer informe que elabora actualmente Deloitte para determinar si estos inversores sufrieron un peor trato con la resolución del que hubieran tenido en caso de liquidación, lo que sería contrario a las normas europeas, según la agencia Efe.