Zoido confirma que la detenida por la muerte de Gabriel no está colaborando en la investigación

• Subraya que en estos momentos la investigación es "secreta"
• Confía en que la Guardia Civil consiga las pruebas para incriminarla
• Una de las hipótesis sobre el móvil es que la detenida pudo actuar por celos

Las mañanas de RNE - Caso Gabriel Cruz: Zoido pide "calma y serenidad"

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha confirmado este martes que la Ana Julia Quezada, principal sospechosa y detenida por la muerte de Gabriel Cruz, el niño de 8 años cuyo cadáver apareció en su coche, no está colaborando con la justicia, aunque ha remarcado que en estos momentos, la investigación es "secreta".

"La situación es secreta, y no puedo decir nada, pero lo que he oído está en la línea de lo que usted dice", ha respondido en una entrevista en Las Mañanas de RNE al ser preguntado si era cierto que la principal sospechosa de la muerte del menor no estaba colaborando con la Guardia Civil, que este lunes estuvo realizando la reconstrucción del crimen en su presencia.

Aún así, el titular de Interior se ha mostrado confiado con que la Guardia Civil consiga las pruebas necesarias para que la detenida pase a disposición judicial, y ha alabado su actuación desde que se inició la investigación con la denuncia por la desaparición el pasado 27 de febrero.

Los agentes "saben desde el Estado de Derecho cómo obtener las pruebas necesarias paara que pase a disposición judicial. Confío en la Guardia Civil. Tienen el pleno respaldo del ministro. Estoy seguro de que sabrán terminar las diligencias como suelen hacerlo", ha remarcado.

La prisión permanente revisable

Sobre el debate de las enmiendas a la totalidad presentadas a la proposición de ley que pide derogar la prisión permanente revisable que este jueves se celebrará en el Congreso, Zoido ha recordado que no ha sido el Gobierno el que lo ha abierto porque "mantiene la misma postura", sino que ha sido la oposición la que quiere tumbarlo.

En este sentido, el ministro se ha mostrado a favor de mantener la prisión permanente revisable que se incorporó en la última reforma del Código Penal de hace dos años y medio y ha explicado que solo sería aplicable "para los casos de mayor gravedad". "Desde que entró en vigor en la pasada legislatura solo se ha aplicado en un caso, y fue en el caso de un padre que mató a sus dos hijas".

Zoido también ha dado otros argumentos para mantener este tipo de pena: "Un 80% de la población es partidaria de la prisión permanente revisable". Y ha añadido que se trata de una figura penal que también tienen otros países europeos del entorno, que es una ley "plenamente constitucional".

El ministro ha reprochado a Ciudadanos la ambigüedad de su postura en este debate y ha instado a la oposición a que explique el jueves en el Congreso los motivos que tiene para derogar esta herramienta.

La detenida pudo actuar por celos

Sobre el móvil del crimen, una de las hipótesis con las que trabajan los invetigadores es que Ana Julia Quezada pudo actuar movida por los celos al rechazar el padre del pequeño irse con ella a su país, República Dominicana, donde quería instalarse.

Toda vez que la detenida se ha cerrado hasta el momento en banda y no ha colaborado con los investigadores, los agentes que llevan el caso están barajando diversas hipótesis sobre el móvil del crimen, entre ellas que el niño suponía un estorbo en la relación de Quezada con Ángel Cruz, el padre del pequeño, quien podría haber rechazado la propuesta de irse a República Dominicana para seguir cerca de su hijo.

Mientras se intenta aclarar las razones que movieron a Quezada, la Guardia Civil trata de localizar el lugar donde la detenida ocultó el cadáver antes de envolverlo en una manta e introducirlo en el maletero de su vehículo, lo que sí pudieron observar los agentes que poco después la detuvieron.

Aún no ha trascendido en qué momento Quezada, que según la principal hipótesis actuó sola, obligó o engañó al niño para irse con ella, dónde lo estranguló y si cambió de ubicación el cuerpo durante los trece días que lo mantuvo oculto.