Arabia Saudí promete "armas nucleares" si Irán las desarrolla

• Califica al líder supremo iraní de ser "un nuevo Hitler"
• Irán le reprocha su falta de conocimiento político y su "ingenua" actitud

Mohammed bin Salman, el príncipe heredero de Arabia Saudí, durante la reunión en Londres con Theresa May

El príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, ha asegurado que si Irán, a la vez que comparó al líder supremo iraní, Ali Jameneí, con Adolf Hitler.

"Arabia Saudí no quiere adquirir armas nucleares, pero, sin duda alguna, si Irán desarrolla una bomba nuclear, nosotros haríamos lo mismo lo más pronto posible", ha afirmado Salman, según los extractos de una entrevista con la cadena estadounidense CBS distribuidos este jueves y que será transmitida en su totalidad el domingo.

Asimismo, ha calificado al líder supremo iraní Jameneí de ser "un nuevo Hitler" al denunciar las ansias de expansión regional de Teherán.

"Quiere crear su propio proyecto en Oriente Medio muy parecido a lo que Hitler quiso hacer en su tiempo. Muchos países en todo el mundo y en Europa no se dieron cuenta de lo peligroso que era Hitler hasta lo que ocurrió. No quiero ver los mismos sucesos en Oriente Medio", ha agregado Salman, de 32 años.

"No tiene idea de política"

La reacción de Irán no se ha hecho esperar. Según la televisión estatal iraní, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Bahram Qasemi, ha reprochado al heredero saudí su falta de conocimiento político y su "ingenua" actitud.

"No tiene idea de política. Sus comentarios no merecen una respuesta porque es una persona delirante, ingenua, que nunca habla pero, cuando lo hace, es con mentiras y amargura", ha declarado Bahram.

El portavoz ha asegurado, además, que "Irán respeta a todos sus vecinos" y ha invitado a todos los países de la región, especialmente a aquellos "enemigos del diálogo y la tolerancia".

Visitará la próxima semana la Casa Blanca

Bin Salman, el hombre más poderoso del país, solo por debajo de su padre, el rey Salman, ha lanzado su proyecto Visión 2030, que incluye planes de apertura social e importantes proyectos económicos para diversificar la economía, altamente dependiente del petróleo.

En el marco del mismo, el heredero saudí será recibido la próxima semana, el 20 de marzo, en la Casa Blanca por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. La reunión se produce meses después de la decisión del mandatario estadounidense de endurecer su postura ante Irán y avisar de que si no se corrige el acuerdo nuclear, lo cancelará.

La pretensión de Trump es ampliar el alcance de las medidas recogidas en el acuerdo, ya que considera que Irán sigue siendo una amenaza para Estados Unidos y para todo Oriente Medio.

Irán, de mayoría chiíta, y Arabia Saudí, donde predomina la confesión suní, son las dos grandes potencias de Oriente Medio, que se acusan mutuamente de agitar la inestabilidad en la región.