Cataluña recibió casi un 40% menos de inversión productiva extranjera en 2017

• Esa comunidad recibió el 13% del total invertido en España, 7 puntos menos que en 2016
• Madrid absorbió má del 61% del total de esa inversión
• La inversión neta en España retrocedió un 12% respecto a un año antes
• EE.UU. redujo a la mitad su inversión en España
• Las desinversiones de españoles en el exterior superaron a las inversiones

La inversión extranjera del año pasado superó en un 25% la media de los últimos cinco años.

La inversión productiva realizada por extranjeros en Cataluña cayó un 39,8% en 2017, hasta situarse en 3.093 millones de euros. Esta cantidad supone el 13% del total de los fondos invertidos en España, 7,1 puntos menos que el 20% registrado un año antes, según los datos publicados este martes por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.

La principal comunidad receptora de ese tipo de inversión fue Madrid, que recibió 14.521 millones de euros, un 24,7% más que en 2016 y el 61,1% del total invertido en España (frente al 45,5% que representó en 2016).

Le siguió Cataluña y en tercer lugar, País Vasco, donde los extranjeros invirtieron 2.616 millones, un 70,8% más que un año antes y el 11% del total.

De esta forma, esas tres comunidades concentraron el 85,1% de la inversión productiva.

Si se analizan solo los datos del cuarto trimestre, la inversión productiva extranjera en Cataluña fue de 910 millones, mejor dato que en el trimestre precedente, pero casi la mitad que en igual periodo de 2016 (1.764 millones).

Economía añade que, si se toma como referencia la inversión media de los últimos cinco años, la inversión productiva extranjera en Cataluña cayó un 23,9%.

La inversión extranjera neta se redujo en España un 12%

En el conjunto de España, la inversión productiva neta de extranjeros terminó 2017 con un saldo de 24.545 millones de euros de inversión productiva, un 12,3% menos que en 2016, de acuerdo con los datos publicados este martes por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.

De acuerdo con estos datos del ministerio, la disminución de la inversión productiva neta se explica por el incremento de las desinversiones en un 80,1%. Una parte importante de esa subida corresponde a una única operación de venta de una participación en una compañía por parte del inversor extranjero a una sociedad española. Este movimiento accionarial -señala el ministerio- no tiene impacto negativo en la economía, ya que no supone una reducción de la actividad empresarial.

En términos brutos -es decir, si se incluyen las desinversiones realizadas el año pasado-, la inversión productiva extranjera alcanzó 36.122 millones de euros, lo que supone un 0,7% más que en el año anterior. Esa cantidad es la más alta en ese capítulo desde 2008.

Economía destaca que, si se compara el dato con la media de los últimos cinco años, la inversión bruta creció un 25,6% y el incremento fue del 18,7% en términos netos.

La inversión extranjera destinada a la constitución o ampliación de capital de empresas existentes representó el 78,7% de la inversión productiva bruta (un 52% más que en 2016), mientras que el 21,3% restante se destinó a la adquisición de participaciones en empresas ya constituidas (una reducción del 62%).

Luxemburgo, el primer inversor, y EE.UU. redujo a la mitad sus fondos

El análisis de las inversiones productivas en España muestra que el primer inversor es Luxemburgo (20,9% del total), seguido de Alemania (13,6%), Reino Unido (13,1%), Estados Unidos (10,7%) y Francia (9,7%), países que concentran el 68% de la cifra global.

Mención aparte merece el caso particular de los EE.UU., que en 2016 fue el primer país inversor, pero que cae en 2017 hasta el cuarto puesto por un descenso de las inversiones del 50,1%.

Los países de la OCDE acapararon el 93,1% de las inversiones tras aportar un 5,3% menos de capital que un año antes, mientras que las procedentes de la UE representaron el 70,2% del total (el capital aumento un 18,7%).

Por sectores, la actividad inmobiliaria recibió el 13,2% de los fondos, seguida del suministro de electricidad y gas (10,3%), los servicios financieros (7%), las telecomunicaciones (6,7%) y el comercio al por mayor (6,4%). Estas cinco actividades suman casi la mitad de la inversión del año.

Hubo más desinversiones que inversiones españolas en el exterior

Por lo que respecta a la inversión española en el exterior, en 2017 se redujo un 106,5%, lo que significa que no hubo inversión neta, sino desinversión, que se cuantificó en 2.606 millones de euros.

En ese capítulo, la inversión productiva de los españoles en el extranjero fue de 19.761 millones de euros (47% menos) y, en términos netos, se desinvirtieron 9.856 millones (un 137,8% menos).

La inversión española se dirigió fundamentalmente a EE.UU. (14,2% del total), Francia (14,1%) y México (8,7%), mientras que los mayores retrocesos se produjeron en el capital destinado a Irlanda (77,5% menos) y Reino Unido (93,6% menos).