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Condenado a 21 meses de cárcel un hombre por maltratar y aislar a su exmujer durante 49 años

  • El juzgado ha impuesto esta pena tras un acuerdo entre ambas partes
  • La Fiscalía pedía inicialmente dos años y medios de cárcel para el maltratador
  • La insultaba, humillaba, le prohibía comprar ropa y escondía su comida

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Imagen de archivo de una protesta contra la violencia de género en Galicia
Imagen de archivo de una protesta contra la violencia de género en Galicia

Un juzgado de Vigo ha condenado a un hombre a 21 meses de cárcel por un delito de maltrato habitual a su exmujer, a la que durante los 49 años de relación humilló y sometió a un estricto control, aislándola socialmente y llegándola a prohibirle que tuviera dinero o que se comprara ropa.

El maltratador, A.S.O., tendrá que indemnizar también con 16.000 euros a esta víctima de violencia de género, después de que ambas partes hayan llegado a un acuerdo de conformidad.

En virtud de ese acuerdo, la Fiscalía, que inicialmente pedía dos años y medio de cárcel, rebajó su petición de pena, y suprimió uno de los delitos que atribuía al acusado (un delito leve de vejaciones), según informa Europa Press.

Tras el pacto, la jueza del Juzgado de lo Penal número 2 de Vigo, además de los 21 meses de cárcel y la multa, le ha impuesto la prohibición de tener o portar armas durante 3 años y la prohibición de acercarse a su exmujer durante cuatro años y medio. Podrá eludir la cárcel si durante tres años no delinque y se somete a un programa terapéutico sobre violencia de género.

Según el escrito de Fiscalía, A.S.O. ejerció sobre M.L.I. un dominio y control sobre su vida y la aisló socialmente, ya que no le permitió relacionarse con otras personas y llegó a romperle el móvil que le compró uno de los cuatro hijos que ambos tienen en común.

La insultaba llamándola "puta rastrera" y le escondía la comida

Además, se dirigía a ella de forma habitual llamándola "puta rastrera" y la humillaba diciéndole que no arreglaba la tubería del gas a ver si reventaba la cocina con ella dentro, ni tampoco las escaleras por si se caía y se moría.

En los últimos cuatro años de convivencia ni siquiera le permitía que tuviese dinero y cuando ella se lo pedía, le respondía que se lo ganara prostituyéndose, señala el escrito de acusación detallado por Efe.

Además, A.S.O. no le comunicaba a M.L.I. las citas médicas y desde hace 20 años no le permitía comprarse ropa y le escondía la comida.