El superávit de los ayuntamientos permite a España cumplir el objetivo de déficit público en 2017

• Montoro confirma que las administraciones registraron un 3,07% de déficit
• Las corporaciones locales lograron un superávit del 0,59%, mejor del 0% previsto
• La Seguridad Social y, sobre todo, la Administración Central incumplieron sus objetivos
• El ministro elude hablar de la salida este año del control por déficit excesivo

Las corporaciones locales lograron 6.800 millones de euros de superávit el año pasado.

El superávit logrado por las corporaciones locales en 2017 (0,59% del PIB) ha compensado los incumplimientos de las metas de déficit de la Administración Central y la Seguridad Social, lo que ha permitido cumplir el objetivo de déficit público pactado con Bruselas para el pasado año.

Precisamente, el pasado viernes, el Consejo de Ministros aprobó un decreto ley para permitir a los ayuntamientos que inviertan los 6.812 millones de euros que lograron de superávit en áreas municipales prioritarias.

El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha confirmado este lunes que el déficit público cerró el pasado año en 35.758 millones de euros, el 3,07% del PIB -mejorando el 4,29% de 2016 y por debajo del objetivo del 3,1%- marcado por la Comisión Europea-, tal y como avanzó la pasada semana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Una vez que se incluyen las ayudas a la banca (475 millones de euros), el dato de déficit público asciende al 3,11% del PIB, mejorando el 4,51% del año previo.

Este dato supone que las administraciones públicas han reducido su desfase entre ingresos y gastos presupuestarios en 12.254 millones de euros respecto a 2016, lo que supone un 1,22% del PIB, la mayor reducción desde 2012, cuando se pasó de un déficit del 9,31% al 6,79% al recortarlo en más de 21.200 millones.

Incumplimiento de Administración Central y Seguridad Social

Durante la presentación de los datos de ejecución presupuestaria de 2017, Montoro ha detallado que la Administración Central cerró el ejercicio 2017 con un déficit de 1,86% del PIB (1,9% con las ayudas a la banca; su objetivo era del 1,1%) y la Seguridad Social, del 1,48% (cuando su meta era del 1,4%).

El ministro ha reconocido que el déficit de los fondos de la Seguridad Social -que ascendió en 2017 a 17.209 millones de euros- es un asunto "grave", aunque ha insistido en que hay que "encuadrarlo" en el cumplimiento global del objetivo de déficit.

Respecto al incumplimiento de la Administración Central, Montoro ha señalado que dos décimas de ese déficit corresponden al impacto del reconocimiento de aportaciones al País Vasco, Navarra y Canarias asumidas por la Intervención General del Estado.

Además, el ministro ha subrayado que, precisamente, la Administración General ha sido la que más ha recortado su desequilibrio, al pasar del 2,48% de 2016 al 1,86% del año pasado.

Las corporaciones locales, que tenían como meta el equilibrio presupuestario (0%), se anotaron un superávit del 6.800 millones de euros, un 0,59% del PIB.

Cuatro autonomías obtuvieron superávit y seis imcumplieron su objetivo

Las comunidades autónomas, por su parte, registraron un déficit del 0,32% del PIB, casi la mitad del objetivo común que tenían fijado para el año (-0,6%). Como ha destacado el ministro, el año pasado cuatro autonomías registraron ya cuentas públicas con superávit: País Vasco (+1,5%), Navarra (+1,22%), Canarias (+0,67%) y Baleares (+0,48%).

País Vasco y Navarra recibieron mayores recursos por la actualización del Concierto y el Convenio Económico -que ascendieron a 1.248 y 336 millones de euros, respectivamente-, mientras que Canarias recibió 217 millones adicionales asignados a través del Fondo de Competitividad.

En el extremo opuesto, seis comunidades incumplieron el objetivo: Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Murcia y Comunidad Valenciana, ésta última, pese a haber reducido su desequilibrio en un importante 0,8%.

En concreto, Aragón registró un déficit del 0,92% del PIB, superior al objetivo del 0,6%, al igual que Castilla-La Mancha (0,72%), Extremadura (0,88%), Valencia (0,73%), Murcia (1,51%, pero no está depurado el efecto del terremoto de Lorca) y Castilla y León (0,95%).

La comunidad castellanoleonesa fue la única que no redujo su déficit el pasado año en relación con 2016.

Murcia, por su parte, fue la comunidad con la cifra de déficit más alto.

La reducción del déficit catalán "no ha sido por la paralización de gastos"

El resto de comunidades cumplieron con el objetivo de déficit al quedar por debajo del 0,6% fijado: Andalucía registró un déficit del 0,22%; Asturias, del 0,31%; Cantabria tuvo un 0,37%; Galicia, un 0,20%; Madrid se apunto un desequilibrio del 0,47%; La Rioja logró un 0,39%, y Cataluña se quedó con un 0,56% de déficit.

Sobre la especial situación de Cataluña, cuyas cuentas están intervenidas desde octubre pasado por la aplicación del artículo 155 de la Constitución, Cristóbal Montoro ha explicado que redujo su déficit público en tres décimas, "en línea con los nuevos ingresos" que tuvo, pero por debajo del recorte conseguido por otras comunidades.

Además, ha reiterado que esa reducción "no ha sido por la paralización de gastos, los pagos se han seguido realizando con toda normalidad".

A la vista de estos datos, Montoro ha insistido en que las comunidades han reducido en más de un 60% su déficit, lo que supone una reducción de 0,52 puntos porcentuales respecto al año anterior, gracias al incremento en 6.576 millones de euros de los recursos autonómicos derivados de la aplicación del sistema de financiación.

Fuerte aumento de la recaudación de impuestos, sobre todo, del IVA

Montoro ha detallado que la reducción del déficit público ha sido posible porque el aumento de un 1,1% del gasto (hasta sumar 477.332 millones de euros) ha sido muy inferior al incremento del 4,6% en los ingresos (hasta 441.099 millones).

Dentro de los ingresos, destacado el crecimiento de las cotizaciones sociales (subieron un 4,9%) y los ingresos tributarios (un 6,4% más que en 2016).

Vía impuestos se recaudaron 198.101 millones de euros, después de mejoras en los principales impuestos: IRPF (un 6,4% más), Impuesto de Sociedades (un 6,8% más), IVA (un 7,9% más) e impuestos especiales (un 2,2% más).

Sin embargo, el ministro ha admitido que esa recaudación ha sido 2.800 millones menor a la prevista en el Presupuesto de 2017 debido a que los ingresos por IRPF y Sociedades han sido inferiores a lo estimado, algo que se ha compensado parcialmente con la mayor recaudación por IVA.

Montoro elude hablar de la salida del protocolo de déficit excesivo

Para 2018, los objetivos comprometidos con Bruselas fijan un déficit público del 2,2%, distribuido entre un 1,2% en la Seguridad Social, un 0,7% en la Administración Central y un 0,3% para las comunidades autónomas, frente al equilibrio que alcanzarán de nuevo las corporaciones locales.

Sin embargo, en el plan presupuestario de 2018 enviado el pasado octubre a Bruselas, el Gobierno modificó esos objetivos al 1,1% para la Seguridad Social, el 0,8% para la Administración Central y el 0,4% para las comunidades autónomas (tal y como se pactó con ellas el verano anterior). Ese reajuste llevaría el déficit al 2,3%.

Si se cumplen esas estimaciones, España bajaría del límite del 3% fijado por Europa como déficit excesivo, por lo que sería posible abandonar el protocolo de vigilancia de Bruselas. Así lo manifestó el comisario europeo de Asuntos Monetarios y Financieros, Pierre Moscovici, en la publicación de las previsiones de primavera.

Sin embargo, este lunes, el ministro Montoro ha eludido confirmar esa salida. "España saldrá del déficit excesivo cuando tenga que salir", ha indicado el titular español de Hacienda, quien ha asegurado que pertenecer al euro implica control y vigilancia europea, y que eso no es malo ni perjudicial, sino todo lo contrario. "A mí no me molesta que me vigilen", ha reafirmado.

La semana pasada, el director general de Economía y Previsiones del Banco de España, Fernando de Cos, advirtió que el objetivo de déficit del 2,2% se incumplirá este año "con o sin Presupuestos Generales del Estado" y se mostró favorable a que España continúe dentro del control por déficit excesivo.