La clave para extraditar a Puigdemont por alta traición: si Alemania considera que hubo violencia o no
- Es un elemento decisivo, según dicen expertos alemanes en Derecho Penal a Efe
- "El problema está en determinar si hubo violencia y eso es cuestión de interpretación"
- Puigdemont está procesado por el Supremo español por rebelión y malversación
El Código Penal alemán no recoge como tal el delito de rebelión por el que el expresidente de Cataluña Carles Puigdemont ha sido procesado en España, pero sí el de "alta traición", que prevé penas de hasta 25 años de cárcel para aquel que "con violencia o amenaza de violencia" atente contra la existencia de la República Federal de Alemania o intente cambiar el orden constitucional alemán".
La clave para una eventual extradición a España de Puigdemont, en prisión desde su detención en Alemania el domingo 25 de marzo, asimilando estos dos delitos está en determinar si hubo o no violencia en el proceso independentista tal y como afirma en su auto el juez del Tribunal Supremo, según los expertos en Derecho Penal alemanes consultados por Efe.
Tras la decisión del juez de primera instancia de Neumünster de mantener a Puigdemont en prisión preventiva mientras se resuelve sobre su entrega a España, es la Fiscalía del estado alemán de Schleswig-Holstein la que tiene que elaborar un informe para decidir si solicita o no la ejecución de la extradición al Tribunal Superior de este lander del norte del país. El procedimiento puede prolongarse hasta tres meses (60 días más 30 más de prórroga) hasta que haya decisión definitiva.
"Similitud estructural" entre rebelión y "alta traición"
El catedrático de Derecho Penal y Derecho Europeo de la Universidad de Colonia Nikolaos Gazeas ha señalado que entre el delito de rebelión español y el delito de alta traición recogido en el Código Penal alemán hay una "similitud estructural". Sin embargo, para que el delito se dé, es preciso que haya habido violencia o amenaza de violencia y para ello el derecho pone exigencias muy altas.
"En el caso de Puigdemont el tribunal puede determinar que el delito imputado no se dio debido a que no hubo violencia en sentido estricto", ha explicado Gazeas a Efe.
“El problema está en determinar si hubo violencia y eso es cuestión de interpretación“
El profesor de Derecho Penal, Procesal y Europeo Martin Heger, de la Universidad Humboldt de Berlín, coincide en que lo decisivo es determinar si en el intento de socavar el orden constitucional español hubo o no violencia.
Aunque el delito de rebelión no está tipificado en la legislación alemana, el comportamiento al que se refiere esa figura, según este experto, puede corresponder a la "alta traición" incluida en el artículo 81 del Código Penal alemán. "El problema está en determinar si hubo violencia y eso es cuestión de interpretación", ha apuntado Heger en una conversación con Efe.
"Si asumimos que la violencia implica buscar un objetivo con un arma en la mano, entonces hay que decir que en este caso no la ha habido. Pero si se asume que basta con que un comportamiento político produzca un levantamiento para que haya habido violencia, las cosas cambian", ha agregado.
Violencia en sentido estricto o más amplio
Según Heger, la tendencia actual es que hay que tomar la violencia en su sentido más estricto. "Ayer era más abierto, pero hoy creo que se tiende a negar que haya habido violencia", ha señalado al hacer referencia al escrito del tribunal de primera instancia que decidió mantener a Puigdemont bajo custodia en prisión.
Según ese escrito, "sin duda el contenido de la orden de detención europea contiene elementos que, examinados exhaustivamente, pueden llevar a la conclusión de que la extradición no sería legitima".
Sin embargo, en la misma declaración el tribunal explica que "no hay aún evidencia" de que la euroorden de detención y extradición a España, emitida el 23 de marzo pasado, "no esté justificada", por lo que debe esperarse a la decisión que adopte el Tribunal Superior de Schleswig-Holstein tras examinar toda la documentación aportada.
Si se rechaza la entrega a España por rebelión, quedaría abierta la posibilidad de conceder la extradición por el delito de malversación de fondos públicos.
En opinión de Heger, el uso del artículo 81 del Código Penal alemán implica dificultades jurídicas, puesto que hace tiempo que no se aplica. Al respecto, Gazeas coincidió en que la alta traición es un delito que casi no ha sido perseguido en Alemania y que no recuerda ninguna acusación después de la II Guerra Mundial.
La "alta traición" en el Código Penal alemán y sus penas
El artículo 81 del Código Penal alemán sobre el delito de alta traición a la Federación dice que "quien intente con violencia o por medio de amenaza con violencia perjudicar la existencia de la República Federal de Alemania o cambiar el orden constitucional que se basa en la Constitución de la República Federal de Alemania, será castigado con pena privativa de la libertad de por vida o con pena privativa de la libertad no inferior a 10 años". La cadena perpetua en Alemania en la práctica supone un máximo de 25 años.
El artículo 82 sobre el delito de alta traición contra un Estado Federal castiga con una pena de uno a diez años a quien intente con violencia o con amenaza de violencia "incorporar el territorio de un Estado total o parcialmente a otro Estado" trate de "separar una parte de un Estado" o "cambiar el orden constitucional que se basa en la Constitución de un Estado".
Y al igual que sucede con el delito anterior, precisa que "en casos menos graves la pena privativa de la libertad es de seis meses hasta cinco años".
Por último el delito de preparación de una operación de alta traición contra la Federación (artículo 83) se castiga con cárcel de uno hasta diez años aunque en casos menos graves esta pena será de tres meses hasta cinco años.