Alemania recuperó en 2016 la tasa de fecundidad de principios de los 70 gracias a las inmigrantes

• El número de nacimientos repuntó un 7% respecto al año anterior
• La tasa de fecundidad se situó en 1,59 niños por mujer, frente al 1,50 de 2015
• Los niños nacidos de madres extranjeras se incrementaron en un 25%

La llegada de inmigrantes se disparó en Alemania en 2015, lo que repercutió en las cifras de nacimientos del año siguiente.

Los nacimientos se dispararon un 7% en Alemania en 2016, con lo que la tasa de fecundidad alcanzó un nivel no visto en ese país desde 1973. Según los datos publicados este miércoles por la oficina federal de estadísticas (Destatis), ese repunte se explica, sobre todo, por el fuerte aumento de la natalidad de la población extranjera, más numerosa tras la agudización de la crisis de los inmigrantes en 2015.

Según Estadística, la tasa de fecundidad en Alemania se situó en 1,59 niños por mujer, frente al 1,50 registrada en 2015. Con ese resultado, el país se coloca en la media europea, después de permanecer durante años en la parte baja de esa lista.

Aumentaron un 25% los nacimientos de madres extranjeras

Así, del total de 792.000 nacimientos registrados en Alemania en 2016, 184.660 correspondieron a madres extranjeras, un 25% más que en el año anterior. Mientras tanto, "las madres alemanas trajeron al mundo 607.500 niños, un 3% más que en 2015", según Destatis.

Para la población alemana, Destatis explica el alza de nacimientos porque las personas con edad entre 30 y 37 años tuvieron más hijos, ya que muchos no los habían tenido cuando eran más jóvenes.

Mientras tanto, para la población extranjera, la oficina estadística subraya "la subida del número de parturientas procedentes de países donde tradicionalmente la natalidad es más alta".

Así, en 2016 nacieron 18.500 bebés de madres sirias, casi el triple que los 4.800 de 2015 y ocho veces más que los 2.300 nacidos en 2014. De madres afganas nacieron 5.900 bebés en 2016 (casi triplicaron los 2.000 de 2015), mientras que las iraquíes tuvieron 5.500 niños (casi el doble que los 2.800 del año anterior).

La principal comunidad extranjera de Alemania, la turca, muy asentada allí desde hace décadas, registró 21.800 nacimientos, 200 más que en 2015.

Sin inmigración se habría reducido la población

En 2015, Alemania acogió a 900.000 demandantes de asilo, la mayoría de ellos procedentes de Siria, Irak y Afganistán, y un año antes había recibido a otros 200.000 inmigrantes.

Precisamente ese año 2015, la potencia europea registró su mayor aumento de población desde la reunificación del país (un alza del 1,2% hasta sumar 82,2 millones de habitantes), un incremento relacionado con la llegada de inmigrantes derivado de la crisis de refugiados más grave vivida en Europa desde la II Guerra Mundial.

Sin esa llegada masiva de inmigrantes, la población del país se habría reducido, ya que ese año los fallecimientos superaron a los nacimientos en 188.000.

Según las proyecciones oficiales de Destatis, la fuerte inmigración no bastará para corregir el envejecimiento demográfico provocado por décadas de retroceso de la natalidad en Alemania. Así, se pasará de los 49,8 millones de personas activas con edades entre 20 y 65 años que había en 2015, a los 43,9 millones en 2035 y a los 39,6 millones en 2060.