Amigos y familiares despiden a Stephen Hawking en un funeral privado en la Universidad de Cambridge
- El prestigioso científico, fallecido el pasado día 14 a los 76 años, era ateo
- Las cenizas de Hawking serán colocadas en la Abadía de Westminster en junio
Centenares de personas han dado el último adiós a Stephen Hawking celebrado este sábado en la iglesia de la Gran Santa María, de la Universidad de Cambridge, a pesar de que el prestigioso matemático y cosmólogo, fallecido el pasado día 14 de marzo a los 76 años, era ateo.
En una jornada gris y lluviosa en la localidad de Cambridge (sur de Inglaterra), una multitud se ha dado cita a lo largo del recorrido que ha tomado el cortejo fúnebre por la ciudad universitaria, desde la casa de Hawking, en el oeste de la población, hasta el centro, donde está la iglesia.
Al llegar el cortejo fúnebre, las campanas del templo repicaron 76 veces, una por cada año de la vida de Hawking, quien padecía desde muy joven esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad que lo dejó en silla de ruedas y le obligó a comunicarse desde los años ochenta a través de un sintetizador de voz.
El féretro de roble con los restos de Hawking fue cubierto con un ramo de lirios blancos, como símbolo del universo, y rosas blancas, representando la estrella polar, la más visible en el polo norte. Las flores, según la familia, fueron colocadas por los tres hijos del científico, Lucy, Robert y Tim Hawking.
Las cenizas de Hawking serán colocadas en la Abadía de Westminster
Durante el funeral, el actor Eddie Redmayne, quien interpretó a Stephen Hawking en la película La teoría del todo, leyó un pasaje del libro del Eclesiastés, del Antiguo Testamento, y también hizo lo mismo el astrónomo Martin Rees. "¿Por qué se convirtió en una figura de culto? El concepto de una mente aprisionada vagando el cosmos sencillamente atrapaba la imaginación de la gente", ha afirmado Rees, tal y como recoge Reuters.
El hijo mayor de Hawking, Robert, y el profesor Fay Dowker, antiguo alumno del científico, fueron los encargados de pronunciar los halagos al cosmólogo. El funeral fue oficiado por el reverendo Cally Hammond, deán de Gonville & Caius, del que Hawking fue miembro durante 52 años y donde dedicó tiempo al estudio de los agujeros negros.
Tras el funeral, los invitados acudieron a una recepción privada que tuvo lugar en el Trinity College de Cambridge, uno de los colegios más reputados de esta institución académica. Las cenizas de Hawking serán colocadas junto a la tumba de Isaac Newton en la Abadía de Westminster, en Londres, durante un servicio religioso que tendrá lugar el próximo 15 de junio.
El prestigioso científico, que rechazó el título de caballero que le ofreció en su día la reina Isabel II, contribuyó a establecer las bases de la cosmología moderna y se convirtió en un icono de la cultura popular. Su salto a la fama lo propició el libro Breve historia del tiempo, en el que en 1988 explicó en un lenguaje accesible los últimos descubrimientos sobre la naturaleza de los agujeros negros y el origen del Universo, campos de los que él mismo había sentado las bases matemáticas.