Jornada de huelga y luto por los palestinos muertos en las protestas en la frontera entre Gaza e Israel
- El enfrentamiento con Israel deja además cientos de heridos, 20 críticos
- Israel advierte de que incrementará su respuesta si continúan las protestas
Los palestinos celebran este sábado una jornada de huelga y luto nacional por los gazatíes muertos ayer por fuego israelí, -el El Ministerio de Sanidad palestino rebaja la cifra de muertos de 16 a 15- en las protestas de la llamada Gran Marcha del Retorno, que causó también alrededor de 1.400 heridos, unos 20 de ellos en estado crítico, y que los medios palestinos califican hoy de "masacre".
Las escuelas, universidades, instituciones públicas y negocios privados cierran hoy (día laborable para la mayoría de palestinos) sus puertas en Cisjordania, Jerusalén Este y en Gaza, tras el llamamiento ayer a la jornada de luto del presidente palestino, Mahmud Abás.
En la Franja se llevan a cabo los funerales y entierros de los fallecidos -la mayoría de ellos jóvenes en la veintena- en la marcha organizada con ocasión del Día de la Tierra, en la que cada año los palestinos conmemoran la muerte por Israel de seis árabes israelíes en Galilea en 1976 cuando protestaban contra la confiscación de tierras.
Según fuentes palestinas, unas 40.000 personas participaron en las protestas de ayer (30.000 según el Ejército israelí) y más de 1.400 fueron heridas: 800 de bala y otras 600 por inhalación de gases. Abás pidió anoche en un discurso en Ramala protección internacional para el pueblo palestino.
Israel incrementará su respuesta si siguen las protestas
El secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó estar "profundamente preocupado" sobre los disturbios en Gaza. La organización expresó su temor de que la situación en Gaza continúe deteriorándose en los próximos días y pidió a Israel que sólo utilice la "fuerza letal" como último recurso, en una reunión de urgencia convocada por el Consejo de Seguridad a iniciativa de Kuwait.
Pero Israel ha asegurado que aumentará su respuesta si continúan las protestas en la frontera con Gaza para acabar con ellas mas allá de la valla de separación, ha confirmado a los periodistas el portavoz del Ejército israelí brigadier general Ronen Menelis.
"Si Hamás pretende seguir así y convertir la valla en un lugar de eventos violentos diarios hasta el 15 de mayo (día en que los organizadores tienen previsto terminar las manifestaciones de la Gran Marcha del Retorno), no vamos a permitir ese juego de ping-pong, ellos cometiendo actos terroristas camuflados de protestas y nosotros reaccionando: iremos más allá para acabar con la violencia", ha dicho a Menelis a los medios, entre ellos Efe.
Protestas en cinco puntos de la frontera
Las manifestaciones de ayer tuvieron lugar en cinco puntos de la Franja cercanos a la frontera, donde el movimiento islamista Hamás ha instalado tiendas de campaña, agua y enfermerías, y ha convocado a mantener una protesta durante mes y medio, hasta la conmemoración el 15 de mayo del 70 aniversario de la Nakba (Catástrofe), en que los palestinos marcan el inicio de su desposesión y exilio por la creación del Estado de Israel en 1948.
Los organizadores aseguraron que las marchas serían pacíficas y que no habría lanzamiento de piedras contra los soldados israelíes, apostados del otro lado de la divisoria, y que habían destacado a un centenar de tiradores y reforzado la seguridad ante el riesgo de ataques o infiltración en su territorio.
Si bien al principio la marcha transcurrió en calma, más tarde hubo manifestantes palestinos que se acercaron a la verja más de lo permitido.
El Ejército israelí aseguró que respondió al lanzamiento de piedras, de neumáticos ardiendo y de cócteles molotov contra su territorio con disparos, granadas de estruendo y gases lacrimógenos contra los que considera principales instigadores de la protesta.