Los ministros de la UE dicen "entender" el ataque a Siria pero piden privilegiar la vía diplomática
- Los Veintiocho apoyan la acción como "medida específica" por el ataque químico
- Con todo, recalcan que "no puede haber una solución militar al conflicto sirio"
- May y el Gobierno de Macron se han justificado ante sus parlamentos nacionales
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea han asegurado este lunes "entender" el ataque que llevaron a cabo Estados Unidos, Reino Unido y Francia contra Siria por el presunto uso de armas químicas contra civiles en la ciudad de Duma, si bien han señalado que se deben intensificar las negociaciones para encontrar una solución política a la guerra siria.
"El Consejo entiende que los ataques aéreos de Estados Unidos, Francia y Reino Unido dirigidos contra las instalaciones de armas químicas en Siria fueron medidas específicas tomadas con el único objetivo de prevenir usos adicionales de armas y sustancias químicas por parte del régimen sirio para matar a su propio pueblo", rezan las conclusiones hechas públicas tras la reunión que han celebrado en Luxemburgo.
En ellas, atribuyen una "abrumadora responsabilidad" al régimen sirio por "la situación humanitaria catastrófica y el sufrimiento del pueblo sirio", y condenan "firmemente" el uso "continuado y repetido" de armas químicas por el Gobierno de Bachar al Asad, incluido el ataque de Duma, que es "una grave violación del Derecho internacional y una afrenta a la decencia humana".
"La UE expresa su grave preocupación por la violación en Siria de la Convención sobre Armas Químicas y la prohibición universal de su utilización", señalan los Veintiocho, para más adelante expresar su apoyo a la investigación de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) y plantear la posibilidad de aplicar sanciones adicionales a Damasco.
Impulsar la negociación
“La Unión Europea reitera que no puede haber una solución militar al conflicto sirio“
En cualquier caso, la UE insiste en esas conclusiones en fortalecer las negociaciones para encontrar una solución política al conflicto, en el marco de las conversaciones impulsadas por Naciones Unidas en Ginebra. "La Unión Europea reitera que no puede haber una solución militar al conflicto sirio. Contrariamente a esto, desde el año pasado, el régimen sirio, apoyado por sus aliados Rusia e Irán, ha intensificado sus operaciones militares sin tener en cuenta las bajas civiles", indican los ministros de Exteriores.
Los Veintiocho condenan "en los términos más enérgicos" todas los ataques "deliberados e indiscriminados" contra la población e infraestructuras civiles, hospitales y escuelas. Igualmente, deploran la ofensiva de Damasco "respaldada por Rusia" en Guta Oriental.
Asimismo, señalan que las operaciones turcas en el noroeste de Siria "han complicado más la situación" y producido un desplazamiento "significativo" de los habitantes locales. "La UE deplora las repetidas violaciones de las denominadas áreas de desescalada y urge a los garantes del proceso de Astaná, Rusia, Irán y Turquía, a garantizar el cese de las hostilidades", precisan.
Por último, afirman que los obstáculos al acceso de la ayuda humanitaria deben "parar" y suponen una violación "evidente" de los principios humanitarios internacionales.
El Parlamento Europeo debate el ataque
Pese a la ambigüedad del respaldo recibido, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Yves Le Drian, ha celebrado que la Unión Europea "unida en un momento de extrema gravedad". Tanto él como su homólogo británico, Boris Johnson, ha explicado en la reunión de Luxemburgo "los fundamentos, la naturaleza y los objetivos" del ataque, para recabar el apoyo de los Veintiocho.
"La UE y los Estados miembros nos han apoyado en nuestra voluntad de prevenir y disuadir toda utilización de armas químicas", aseguraba el titular francés de Exteriores, quien señalaba que el ataque "se centró en centros de producción de armas químicas en Siria".
La operación también ha recibido el respaldo de los grandes grupos del Parlamento Europeo, a saber, conservadores, socialdemócratas, reformistas y liberales, mientras que los representantes de los Verdes, Izquierda Unitaria, y los euroescépticos de Libertad y Democracia Directa (EFDD) y Europa de las Libertad y las Naciones (ENF) han vertido críticas.
"No podemos resignarnos a aceptar que Siria siga siendo escenario en que se enfrentan potencias a nivel global, regional y grupos terroristas que solo piensan en sus intereses y no piensan en los ciudadanos", ha defendido, por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani.
May y Macron se justifican ante sus parlamentos
Mientras sus representantes diplomáticos trataban de recabar el apoyo de todos los estamentos de la Unión Europea, la primera ministra británica, Theresa May, y el presidente francés, Emmanuel Macron, han movido ficha ante sus respectivos parlamentos nacionales, con el fin de justificar una acción controvertida, por cuanto no estaba autorizada por Naciones Unidas.
Así, May ha defendido ante la Cámara de los Comunes que el ataque del pasado sábado fue "legalmente correcto", a pesar de no contar con el aval del Consejo de Seguridad de la ONU: "No se trataba de intervenir en una guerra civil ni de cambiar un régimen. Fue un ataque efectivo y con objetivos limitados para aliviar el sufrimiento de los ciudadanos sirios", ha precisado.
Macron, sin embargo, ha dejado que fuera su primer ministro, Edouard Philippe, quien sotuviera la postura de su Gobierno: "Nuestra respuesta estaba ampliamente justificada en sus causas. En su modalidad, fue cuidadosamente proporcionada", ha señalado al abrir el debate en la Asamblea Nacional sobre el asunto, que no incluye votación al respecto.
Ninguno de ellos, sin embargo, ha convencido a la oposición: el laborista Jeremy Corbyn, le ha espetado a May que la acción fue "legalmente cuestionable". También Los Republicanos, el partido de centro-derecha que encabeza la oposición en Francia, ha avisado a Macron de que "sobrepasó una línea" roja, mientras que el líder de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, ha remarcado que “en derecho internacional, solo se puede actuar sobre la base de pruebas comprobadas".