Emmanuel Macron y Angela Merkel se reúnen para trazar el camino a una nueva UE, a pesar de las diferencias
- Alemania y Francia intentan sentar las bases de una hoja de ruta para la eurozona
- Seguridad, economía y cambio climático, son parte de los problemas a afrontar
- Macron aboga por afrontar la presión migratoria sin renunciar al espíritu de la UE
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Angela MerkelEmmanuel Macronhan reafirmado este jueves su voluntad de presentar para junio una propuesta conjunta para reformar la UE, pese a reconocer que sus puntos de partida son diferentes.
En una rueda de prensa conjunta en Berlín, Macron ha asegurado que no falta "voluntad" en ninguno de los dos gobiernos para llevar adelante el "titánico trabajo" de presentar una "visión común" y subrayó que lo "más importante" es ponerse de acuerdo sobre los "objetivos políticos".
Merkel habló de "puntos de partida distintos", pero también de "capacidad de compromiso" en París y Berlín, para recalcar que la reforma de la UE va más allá de la profundización de la integración en la eurozona e incluye también la puesta en marcha de un sistema común de asilo y el establecimiento de una política exterior común coherente.
Seguridad, economía, cambio climático y la OTAN
"La soberanía común entre ambos países está a pruba por cuestiones de seguridad, económicas y relacionadas con el cambio climático", ha dicho este jueves Emmanuel Macron en una rueda de prensa conjunta con Merkel antes de iniciar la sesión de reuniones.
Angela Merkel, ha considerado este jueves que, ante las crisis que se viven en el mundo, la alianza transatlántica es "un gran tesoro" y se comprometió a protegerlo, aunque sin olvidar las "diferencias de opinión" que su país mantiene con Estados Unidos. A la vista de los acontecimientos "no democráticos" que se registran en todo el mundo, ha señalado, esa alianza es "un gran tesoro", afirma, garantizando que su intención es protegerlo.
Ambos mandatarios viajarán la próxima semana por separado a Washington para entrevistarse con el presidente de EEUU, Donald Trump, y han anunciado su intención de concertar posiciones antes de esas visitas. El objetivo del viaje es "dejar claro que la cooperación transatlántica para nosotros es importante, incluso cuando hay diferencias de opinión", señaló Merkel.
Los EE.UU. de Donald Trump
La canciller avanzó su intención de hablar con Trump de las "diferencias" que mantienen sus países, que quedaron patentes en su primera reunión e la Casa Blanca hace un año, cuando mostraron abiertamente sus discrepancias en materia de inmigración, la OTAN o la política climática.
Merkel se mostró abierta a analizar con Macron, que visitará antes que ella la Casa Blanca, qué perspectiva europea se puede aportar a esa relación transatlántica y el presidente francés coincidió en la necesidad de analizar un "mensaje común" para Washington.
En el área de comercio, recordó que los dos quieren que se respete el marco multilateral de la Organización Mundial de Comercio, filosofía que defiende también la Comisión Europea.
Macron apuntó que hay "preocupaciones comunes" en el bloque transatlántico ante el comercio de aluminio y acero y las sobrecapacidades de China, por lo que apostó por trabajar juntos.
La guerra de Siria
Defendió la posición común en el caso de Irán y, ante Siria, después de que Berlín decidiera no participar en los bombardeos que llevaron a cabo EEUU, Francia y el Reino Unido, recordó que en Alemania constitucionalmente no se puede realizar una acción militar sin un mandato parlamentario, algo que supone esperar semanas.
El presidente francés volvió a insistir ahí en la "legitimidad internacional" del ataque a objetivos militares concretos en Siria, en los que su país participó y que Alemania respaldó explícitamente, aún sin tener un papel activo en él.
Una ruta marcada por la economía
La canciller alemana está bajo la presión de su bloque conservador en el parlamento para que no acepte ninguna reforma que termine con los contribuyentes alemanes financiando a los que ven como los estados derrochadores en la zona euro.
La idea de Macron incluye convertir el fondo de rescate existente en Europa en un Fondo Monetario Europeo (FEM), para actuar como un colchón financiero en cualquier crisis futura del bloque, según Reuters.
“Permítanme asegurarles que el trabajo en silencio, secreto y exigente que está en marcha nos permitirá lograr una verdadera hoja de ruta franco-alemana para la próxima cumbre europea en junio”, dijo el miércoles el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, a los políticos en París, traslada Reuters.
En Berlín, informa esta misma agencia, una portavoz del gobierno dijo que Alemania y Francia “tienen el firme deseo de encontrar un camino común hacia adelante”, haciéndose eco del tono cooperativo de Merkel en una rueda de prensa el martes.