España lidera el análisis caligráfico del árabe para luchar contra el terrorismo
- Un tribunal internacional ha pedido un informe al laboratorio de grafística
- La Guardia Civil analiza la caligrafía árabe y ahora también la china
La investigación de los atentados del 11M tuvo que vérselas con manuscritos en árabe cuyos autores había que identificar. A partir de ahí, las fuerzas de seguridad españolas empezaron a formarse en el análisis caligráfico de esa lengua y son un referente en Europa en una disciplina muy útil en la lucha antiterrorista.
Junto a este idioma, la Guardia Civil ha incorporado en su laboratorio de grafística, perteneciente al Servicio de Criminalística, la grafía china, tan complicada en sus trazos como la árabe, pero igual de importante para las fuerzas de seguridad, ya que en España residen unos 200.000 chinos.
Efe ha visitado este laboratorio y hablado con el guardia Gonzalo y el capitán Antonio Jesús Llamas, horas antes de que este último viajara a China para completar su dominio en esa lengua. Como explica Llamas, el objetivo de las tres semanas de formación es ampliar sus conocimientos para dar "más seguridad y confianza" a los informes periciales que elaboran, tanto para otras unidades de la Benemérita como para las autoridades judiciales.
Tras el 11M, el Ministerio del Interior invirtió no sólo en recursos materiales y humanos para luchar contra un nuevo terrorismo, sino que quiso hacerlo también en el área forense de la investigación. Así, la Secretaría de Estado de Seguridad decidió formar conjuntamente a un puñado de guardias civiles y policías nacionales en gramática y análisis pericial caligráfico de la escritura árabe.
Solicitud de un tribunal internacional
La Guardia Civil ha aumentado el número de agentes especializados y ahora, según resalta el capitán, el laboratorio de grafística es un "referente" en el ámbito europeo en este tipo de ensayos. Tanto es así, que este laboratorio ha recibido recientemente un solicitud de un tribunal internacional para llevar a cabo un informe pericial de caracteres árabes.
De momento, los informes forenses de manuscritos árabes, ya sea de firmas o de textos, que este laboratorio ha presentado ante la autoridad judicial han resultado totalmente válidos y se han visto reflejados en las posteriores sentencias.
Y no es un trabajo fácil, sobre todo si se compara con el análisis de la escritura de otros idiomas. Así, aunque el inglés o el sueco sean diferentes al español, tienen en común con nuestro idioma no sólo el empleo del alfabeto latino, sino también la idéntica manera de trazar o ejecutar las grafías.
No ocurre así con el árabe o el chino, que además de presentar características gramaticales propias -el primero tiene alfabeto, el segundo, no-, tienen un singular trazado que hay que conocer, como también aprender a reconocer sus caracteres. Solo el chino utiliza 3.000 caracteres básicos, precisa el agente Gonzalo.
Origen geográfico de la caligrafía
El análisis de manuscritos en árabe se ha convertido en un instrumento cada vez más útil en la lucha contra el yihadismo. Por ello, el laboratorio de la Guardia Civil ha participado en un proyecto de investigación para ver si era posible ubicar en una determinada zona geográfica al autor de la letra.
Como explica el capitán Llamas, para esta investigación se utilizaron cien muestras manuscritas de dos estilos caligráficos del árabe: el Nasj, imperante en el Magreb, y el Ruq'a, más propio de Oriente Medio.
En el 80% de los casos se pudo identificar la zona de procedencia o de formación del escribano, subraya el capitán antes de señalar que se sigue profundizando en el estudio para acotar aún más la localización del autor de una escritura en árabe, que como en todos los idiomas, está sujeta a la evolución personal.
"Puede ocurrir -añade Llamas- que alguien se haya formado en una zona y haya modificado su escritura al residir después en otra". De todos modos, desarrollar aún más ese proyecto es un objetivo importante para la Guardia Civil, toda vez que puede obtenerse una información "muy valiosa" para los agentes de las unidades antiterroristas.
Lucha contra el blanqueo de capitales
Más allá del terrorismo -este laboratorio ha analizado innumerables escrituras relacionadas con ETA, el Grapo y otras organizaciones-, al servicio de grafística llegan manuscritos relacionados con la investigación de todo tipo de delitos, desde la falsificación documental a la violencia machista, pasando por el blanqueo de capitales o el tráfico de drogas.
Veinte especialistas en grafística de los laboratorios centrales de la Guardia Civil y una veintena más de las distintas comandancias conforman este servicio, aunque que solo en la sede central se trabaja con el árabe y el chino. A este laboratorio, dotado con los más novedosos medios ópticos, llegan cada vez más solicitudes de la autoridad judicial para que contribuyan a esclarecer delitos.
Esta división del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil está acreditada en ocho ensayos. Ahora, el siguiente paso es conseguir que la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) también le certifique en el ensayo árabe. Será el único laboratorio europeo en tener este certificado, que tiene validez internacional.