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Gaza

El Ejército de Israel mata a 60 palestinos en las protestas de Gaza por el traslado de la embajada de EE.UU.

  • Unos 40.000 palestinos se han manifestado en las inmediaciones de la frontera
  • Las fuerzas israelíes han respondido con gases lacrimógenos y fuego real
  • Las autoridades palestinas acusan a Israel de perpetrar "una masacre"
  • Es la jornada más sangrienta en el enclave palestino desde la guerra de 2014
  • Además, los israelíes han bombardeado cinco "objetivos terroristas" en la Franja

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Más de medio centenar de muertos en las protestas de Gaza por los disparos israelíes

Las protestas registradas en la Franja de Gaza contra el traslado de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén han desembocado este lunes en la jornada más sangrienta desde la guerra de 2014, con 58 muertos y más de 2.700 heridos por los disparos de los soldados israelíes contra los palestinos que se manifestaban en la frontera del enclave, según el último balance de las autoridades palestinas, que han denunciado una "masacre" mientras Israel esgrimía su derecho a "defender su territorio".

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, ha anunciado tres días de duelo en los Territorios Palestinos, así como la convocatoria de una huelga general este martes con motivo de la Nakba o Día de la Catástrofe, como los palestinos denominan a la creación del Estado israelí hace 70 años, para denunciar lo que ha calificado de "masacre". Abás, que ha tildado la nueva embajada estadounidense en Jerusalén de "nuevo puesto avanzado de la colonización", ha reiterado que "Estados Unidos ya no es un mediador en Oriente Medio" y ha vuelto a apelar al resto de la comunidad internacional para que presione a Israel.

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha defendido el uso de la fuerza a través de un mensaje colgado en Twitter tras asistir a la inauguración de la legación diplomática estadounidense: "Todo país tiene la obligación de defender su territorio. La organización terrorista Hamás proclama su intención de destruir Israel y envía con este fin a miles de personas para forzar la frontera", ha remarcado, antes de ratificar que Israel seguirá actuando "con determinación" para evitarlo. Estados Unidos también ha volcado la responsabilidad sobre la organización islamista: "Hamás está provocando cínica e intencionalmente esta respuesta", ha dicho el portavoz de la Casa Blanca.

El mundo, sin embargo, observa con inquietud la escalada: el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se ha dicho "particularmente preocupado" por la situación, mientras el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad al Hussein, mostraba su "shock" por el balance de "docenas de asesinados y centenares de heridos" y pedía a las fuerzas israelíes que "cejen inmediatamente el uso de munición real". Francia ha condenado "las violencias de las fuerzas armadas israelíes contra los manifestantes", Alemania y Reino Unido han pedido contención y Kuwait ha solicitado una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la cuestión, que se celebrará este martes.

Las protestas congregan a 40.000 palestinos

Según el Ministerio de Salud palestino, en las protestas han muerto 58 personas, en su mayoría jóvenes de entre 20 y 30 años, y al menos siete de ellos adolescentes. Además, 2.771 personas han tenido que ser atendidas, 1.373 de ellas por heridas de bala o metralla, de las que 54 están en estado crítico; otras han sufrido golpes y contusiones, varias de ellas de las latas que contienen los gases lacrimógenos, y el resto por asfixia a causa de su inhalación.

Los soldados israelíes respondían así a las concentraciones de palestinos en distintos puntos de la frontera de la Franja de Gaza, en una nueva jornada de protestas de la denominada 'Marcha del Retorno', una serie de manifestaciones junto a la valla fronteriza para reclamar el derecho de los refugiados palestinos a regresar a sus hogares que hasta ahora arrojaban un saldo de 54 muertos en el último mes y medio.

Normalmente, las manifestaciones se han celebrado los viernes; sin embargo, esta semana las protestas se han programado el lunes para coincidir con la inauguración de la nueva embajada de Estados Unidos en Jerusalén, una controvertida decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, que ha roto el consenso de la comunidad internacional sobre el estatus de la ciudad sagrada, al reconocer la soberanía israelí sobre ella, lo que ha soliviantado a los palestinos.

Hamás, que controla la Franja de Gaza, había convocado además un 'Día de la Ira para este lunes, por lo que, desde primera hora de la mañana, miles de palestinos se han congregado en las inmediaciones de la valla fronteriza, hasta un total de 40.000, según la estimación del Ejército de Israel. "Hoy es el gran día en el que cruzaremos la valla y les diremos a Israel y al mundo que no aceptaremos ser ocupados para siempre", contaba Ali, uno de los manifestantes, a Reuters.

Las imágenes de las protestas contra la embajada de EE.UU. en Jerusalén

Centenares de palestinos se concentraron en la zona fronteriza de la Franja de Gaza, provocando la reacción violenta de las fuerzas israelíes.

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  • Protestas contra la inauguración de la embajada de EE.UU. en Jerusalén

    Protestas contra la inauguración de la embajada de EE.UU. en Jerusalén

    Un manifestante palestino en el este de Gaza se pinta la bandera palestina en el rostro para participar en el 'Día de la Ira' contra Estados Unidos.
  • Protestas contra la inauguración de la embajada estadounidense en Jerusalén

    Protestas contra la embajada estadounidense en Jerusalén

    Centenares de palestinos se concentran en la zona fronteriza de laFranja de Gaza este lunes.

Neumáticos, piedras, gases lacrimógenos y disparos

Gaza ha amanecido con escuelas, universidades, bancos, tiendas e instituciones públicas cerradas a cal y canto, y sin apenas tráfico en la capital; la actividad se encontraba en los campamentos instalados para la 'Marcha del Retorno', donde, como en protestas anteriores, se han quemado neumáticos para generar una inmensa humareda que dificultara la visión de los soldados israelíes. Los primeros altercados se han producido cuando las tropas israelíes, que habían advertido a la población del peligro de acercarse a la línea divisoria, han dispersado a los manifestantes con gases lacrimógenos.

El Ejército israelí, que había reforzado su presencia ante la previsión de protestas multitudinarias tanto en Gaza como en Cisjordania y Jerusalén, no ha dudado luego en emplear fuego real para impedir que los manifestantes se acercaran a la valla fronteriza. En este sentido, ha justificado su respuesta señalando que los manifestantes "lanzaron bombas incendiarias y artefactos explosivos a la verja de seguridad y a las tropas israelíes, así como neumáticos ardiendo, piedras y objetos inflamables con la intención de ocasionar incendios en territorio israelí y causar daño a los soldados".

Las fuerzas israelíes, en cuyas filas solo ha resultado herido leve por metralla un soldado, explicaban en su comunicado que han repondido "respondiendo con material antidisturbios y fuego real" y garantizaban que su actuación estaba "de acuerdo con los procedimientos estándar operativos". Los palestinos, sin embargo, hablan de "una masacre", mientras Hamás culpa a Israel y a Estados Unidos de los fallecidos, a los que llama "mártires", y promete seguir con las marchas.

El teniente coronel Jonathan Conricus, portavoz del Ejército israelí, ha explicado posteriormente en conversación con un pequeño grupo de periodistas que "esta es la octava semana de la violencia orquestada por Hamás, y que ha habido un nivel de violencia sin precedentes, en el que han tratado de plantar explosivos en la valla en tres diferentes puntos e intentado penetrar en Israel". Los islamistas, ha argumentado, "envían a civiles a la frontera para que sus operativos entren después a matar a civiles israelíes", recalcando que "no vamos a permitir ninguna infiltración en Israel ni riesgos para los civiles israelíes por parte de miembros de Hamás o de hordas de gente que trata de romper la valla".

Las protestas se suspenden para el martes

Al margen de la actuación en la valla fronteriza, el Ejército de Israel ha informado del bombardeo de cinco puntos de la Franja de Gaza, que ha calificado de "objetivos terroristas" en una zona de entrenamiento militar de Hamás: "El ataque fue llevado a cabo en respuesta a los actos violentos de las últimas horas llevados a cabo por Hamás a lo largo de la valla de seguridad", indica un comunicado. Fuentes de Hamás han indicado a Efe que en esos ataques no se han registrado víctimas.

Las protestas, en cualquier caso, no se han circunscrito a Gaza, sino que también se han producido manifestaciones en Cisjordania: en Ramala se han congregado más de 3.000 personas, que han marchado hacia el puesto de control militar israelí de Qalandia, donde se han registrado disturbios con 35 heridos y atendidos por asfixia. También hubo manifestaciones menores en Hebrón, Nablus y Belén.

Estaba previsto que los actos de la 'Marcha del Retorno' culminaran este martes, con la conmemoración de la Nakba en recuerdo a los 700.000 palestinos que fueron expulsados o huyeron con la creación de Israel y la posterior guerra árabe-israelí, pero el comité organizador ha señalado que "será un día de duelo y de dolor, para recompensar a los espíritus de los mártires", y ha suspendido las protestas previstas.

Seguirán las protestas hasta que volvamos a nuestros hogares y ciudades en Palestina

Con todo, los palestinos no parecen dispuestos a cejar en su empeño, como recalcaba Suha Seder, una mujer de 42 años que ha participado en las protestas en el este de Gaza capital, al explicar que cada viernes se han concentrado "para exigir el legítimo derecho al retorno", antes de apostillar: "Seguirán las protestas hasta que volvamos a nuestros hogares y ciudades en Palestina".

Trump anuncia que EE.UU. reconoce a Jerusalén como capital de Israel

Trump, ausente en la inauguración: "Un gran día para Israel"

Ni las protestas palestinas ni la condena de la mayoría de la comunidad internacional han impedido que Donald Trump cumpla con su promesa y traslade la embajada de Estados Unidos a Jerusalén: "En nombre del 45º presidente de Estados Unidos de América, os damos la bienvenida oficialmente, por primera vez, en la embajada de Estados Unidos aquí en Jerusalén, la capital de Israel", ha declarado este lunes su hija y asesora, Ivanka Trump, al destapar la placa junto al secretario del Tesoro, Steve Mnuchin.

La inauguración de la nueva sede diplomática, ubicada en el barrio de Arnona, en la zona occidental de la ciudad, ha tenido lugar a primera hora de la tarde, bajo estrictas medidas de seguridad. En el exterior, cientos de personas se han concentrado en dos manifestaciones separadas, una a favor y otra en contra de una decisión histórica y muy controvertida, ya que cuenta con el pleno rechazo de más de 40 países y la condena de la ONU.

Trump, que en un principio dejó caer que asistiría a la cita, finalmente no ha acudido, aunque ha escrito en Twitter que era "un gran día para Israel" y ha enviado un mensaje en vídeo: "Israel es una nación soberana con el derecho a determinar su propia capital", señala el presidente de Estados Unidos en la grabación. "Nuestra mayor esperanza es la paz, y Estados Unidos está comprometido con la paz en Oriente Medio, y con respetar el statu quo en Jerusalén", añade, antes de insistir en su apoyo a un acuerdo de paz duradero con los palestinos.

"Gracias Trump por tener el coraje de cumplir tus promesas", ha declarado, por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, uno de los últimos en subir al escenario. "Trasladar la embajada a Jerusalén es, ante todo, un reconocimiento de la realidad", pero también, "un paso para impulsar la paz en la ciudad, en la región y en todo el mundo", ha apostillado el vicesecretario de Estado de EE.UU., John Sullivan, convencido de que la embajada estadounidense es un "un tributo a la paz".