Llarena apoya proteger a una testigo de la causa del "procés" por temor al acoso: "Yo también lo sufro"
- Suspende la declaración de la funcionaria asediada en el registro de Economía
- Dejó la Consellería el 20 de septiembre por la azotea y camuflándose de la gente
- Las defensas no han aceptado que declarase oculta por un biombo
El Tribunal Supremo ha suspendido la comparecencia como testigo de la funcionaria judicial acosada por la multitud el pasado 20 de septiembre cuando participaba en el registro de la Consellería de Economía, al negarse las defensas a que declarase tras un biombo.
El juez Pablo Llarena respaldaba la petición de la Fiscalía de que la letrada de la administración de justicia del Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona declarase con medidas de protección, y ha recordado que él mismo también se ha visto afectado por situaciones de acoso. "Yo también lo sufro", ha manifestado el propio magistrado, que ha dicho que los escoltas que tiene que llevar "miran siete veces en cada esquina", según han citado textualmente las fuentes presentes en la declaración.
La funcionaria, Montserrat del Toro, tuvo que abandonar el edificio de la Consellería de Economía por la azotea y alejarse del lugar camuflada ante el acoso de la multitud, que protestaba por el registro en este organismo.
Según fuentes presentes en la declaración, la razón última de la suspensión de la comparecencia ha sido que las defensas no han aceptado que prestase testimonio oculta tras un biombo, una circunstancia que ella había acordado con la Fiscalía. El Ministerio Público, al igual que las otras acusaciones, ha protestado por la decisión de las defensas.
La testigo comparecía a petición de los acusados Oriol Juqueras, exvicepresident de la Generalitat, y Raül Romeva, exconseller, y han sido precisamente estos abogados los que han renunciado a que se practicase la prueba.
El fiscal pidió que declarase tras un biombo
Así, el abogado defensor de Junqueras, Andreu Van den Eynde, ha declarado a la prensa, a la salida del tribunal, que "el magistrado nos ha pedido que no revelemos la razón de fondo de la suspensión, pero sí puedo explicar que las defensas hemos hecho un receso antes de la comparecencia y hemos concluido que, a pesar de que nosotros habíamos solicitado esa declaración, las condiciones en las que se iba a producir no eran acordes con los derechos fundamentales de nuestros clientes".
Según fuentes presentes en la comparecencia, tanto la funcionaria como el fiscal han solicitado que declarase como testigo protegida y detrás de un biombo ante el temor manifestado por ella.
El juez: "Me miran siete veces en cada esquina"
La funcionaria ha asegurado que se siente vigilada y que teme sufrir acoso, una queja que ha comprendido el magistrado Llarena. "Yo también lo sufro. Tengo que ir con cuatro escoltas", ha dicho el magistrado, que ha añadido que se siente observado por la calle. "Me miran siete veces en cada esquina", ha apuntado el juez, según han informado las fuentes consultadas por Efe y Europa Press.
No es la primera vez que el juez del Supremo denuncia esta circunstancia, pues en el auto de procesamiento del 23 de marzo y en una resolución posterior, utilizó el término "sufrimos" al hablar de las consecuencias del 'procés'.
Y es que el magistrado y su esposa fueron víctimas de un mensaje publicado en Twitter a finales de marzo en el que se decía que ambos debían saber "que no podrán ir por la calle a partir de ahora" y se informaba de la localidad en la que vive ella.
En las mismas fechas, la calle donde el juez tiene una vivienda en Girona también fue objeto de pintadas que tachaban a Llarena de "fascista". Otras similares se realizaron en la carretera de acceso a la Escuela Judicial, que dirige la esposa del magistrado.
Vox pide sancionar a las defensas
"La declaración de la letrada de la Administración de Justicia adscrita al juzgado 13 de Barcelona a petición de las defensas se ha suspendido por motivos que el magistrado instructor nos ha pedido que no revelemos", ha declarado el portavoz de Vox, Javier Ortega.
"Hemos pedido al magistrado que imponga multas a las defensas por fraude procesal y falta de respeto al magistrado, a las acusaciones y a la propia letrada", ha añadido, al considerar que cometen un fraude procesal por pedir una testifical y luego renunciar a ella por no producirse en las circunstancias que esperaban.