Sánchez tumba a Rajoy y se convierte en presidente del Gobierno en una moción de censura histórica
- Por primera vez, sale adelante una moción de censura en España
- Rajoy: "Ha sido un honor dejar una España mejor de cómo la encontré"
- Sánchez llega a la Presidencia de la mano de Podemos y nacionalistas
- "Firmamos una página nueva de la historia de la democracia", señala
- Sigue en vivo y en directo la sesión de la moción de censura
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El líder del PSOE, Pedro Sánchez, es el nuevo presidente del Gobierno después de tumbar a Mariano Rajoy en la primera moción de censura que sale adelante en la historia de España y con la que queda investido automáticamente como jefe del Ejecutivo. Llega a La Moncloa de la mano de Podemos y los nacionalistas vascos y catalanes, que han posibilitado no solo alcanzar, sino superar, la mayoría absoluta necesaria.
"Firmamos hoy una página nueva de la historia de la democracia de este país", ha dicho el nuevo presidente, acostumbrado ya a gestas en su vida política, y que este mismo sábado podría tomar posesión de su cargo ante el rey. Por primera vez, España tendrá un inquilino en La Moncloa que no ha ganado unas elecciones generales, aunque el socialista ha defendido este viernes que su moción ha quedado "respaldada por 12 millones de ciudadanos" que representan los grupos que le han brindado su apoyo y que con su relevo "gana la democracia". Afrontará los "desafíos del país" con "humildad" y "entrega" y desde el "consenso".
En una jornada trascendental para el país se abre un nuevo e inédito escenario político e institucional con un presidente sin escaño en el Congreso de los Diputados- no podrá votar en los plenos lo que queda de legislatura-, y con un PP que se adentra en una etapa incierta con el futuro de Rajoy en el aire.
Han votado a favor de censurar al presidente del PP y, por tanto, hacer presidente a Sánchez, 84 diputados del PSOE, 67 de Unidos Podemos, nueve de ERC, ocho del PDeCAT, 5 del PNV, cuatro de Compromís, dos de EH Bildu y uno de Nueva Canarias, sumando un total de 180 diputados. En contra han votado PP, Ciudadanos, UPN y Foro, es decir, 169 diputados. Coalición Canaria se ha abstenido.
Tras la lectura del resultado de la votación, Rajoy ha felicitado con un apretón de manos a quien le sucede en el cargo, mientras en el hemiciclo ha sonado con fuerza el grito de Podemos 'sí, se puede'.
Uno a uno, todos los diputados socialistas han felicitado al nuevo presidente. También los líderes de Podemos, Pablo Iglesias, y Ciudadanos, Albert Rivera, el primero con un abrazo y este último con mayor frialdad.
La cuarta moción de censura en más de 40 años de democracia ha acabado con éxito para el candidato proponiente. Rajoy se enfrentó a otra hace menos de un año y los expresidentes Adolfo Suárez y Felipe González pasaron por el mismo trance, para seguir en su cargo.
Rajoy: "Ha sido un honor dejar una España mejor de la que encontré"
Rajoy ha reaparecido en el hemiciclo momentos antes de la votación y ha tomado la palabra para despedirse: "Ha sido un honor haber sido presidente de España. Ha sido un honor dejar una España mejor de la que encontré. Ojalá mi sustituto pueda decir lo mismo en su día. Así se lo deseo por el bien de España".
En su último discurso como presidente del Gobierno ha querido "ser el primero" en felicitar a Sánchez y ha subrayado que acepta "como demócrata" el resultado de la moción de censura, aunque no comparta "lo que se ha hecho". "Suerte a todos ustedes por el bien de España", ha concluido.
Los socialistas han agradecido esta "elegante" salida", después de que Rajoy se ausentara a mediodía de este jueves del debate, al que no acudió en toda la tarde, y pasara ocho horas en un restaurante cercano al Congreso con sus colaboradores más cercanos. El 'popular' ha sido despedido del Congreso por diputados del PP, asesores y trabajadores de su grupo parlamentario entre aplausos y gritos de "presidente, presidente".
Con todo el grueso de intervenciones en la jornada de este jueves, de más de 10 horas, en la que se dieron los principales discursos y los rifirrafes más intensos- seguramente el último entre Sánchez y Rajoy-, en esta decisiva y corta jornada final han intervenido los portavoces de PSOE y PP, Margarita Robles y Rafael Hernando. Éste último con ataques virulentos al nuevo presidente, al que ha acusado de admitir los votos de "amigos de ETA", "golpistas" y "populistas".
La presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha comunicado este mismo viernes el resultado a Felipe VI y Rajoy deberá presentar su dimisión al monarca, según establece el artículo 114.2 de la Constitución. Aunque durante la jornada de este jueves sobrevoló su renuncia, finalmente el 'popular' ha optado por que le tumbe el hemiciclo y no irse él, lo que hubiera supuesto que se quedara en funciones para abrir el rey una ronda de contactos a fin de encontrar un nuevo candidato a la investidura.
El secretario general del PSOE se enfrentaba con esta moción a su segunda oportunidad para ser presidente. Lo intentó en 2016 cuando intentó una investidura, que resultó fallida, después de que Rajoy renunciase por no tener apoyos. Y lo ha vuelto a intentar ahora, después de que estallase la 'bomba' Gürtel, en forma de sentencia, que condenó al PP a título lucrativo, puso en duda la credibilidad del presidente y acreditó la 'caja B' en el partido. Una condena al PP, negada hasta la saciedad por los miembros del partido, que ha supuesto la caída del presidente, acorralado por la corrupción.
Sánchez llega a la Moncloa con las elecciones en el horizonte
El nuevo jefe del Ejecutivo toma las riendas del país con varias declaraciones de intenciones: alcanzar la normalidad democrática, atender la urgencia social y, por último, adelantar las elecciones generales. Sánchez no ha dado pistas durante las dos jornadas de debate sobre cuándo convocará esa cita con las urnas, pero todo apunta al corto o medio plazo ya que le será más que difícil gobernar.
Tendrá que lidiar con un Congreso fragmentado y en un ambiente ya de precampaña con intereses más que contrapuestos de los partidos.
Tampoco Sánchez este viernes ha avanzado cuáles son sus planes concretos, pero sí ha querido dejar claro que el PSOE antepondrá los intereses de los españoles a los de su partido, para insistir en la necesidad de "estabilizar socialmente al país".
Se ha comprometido así a "atender las urgencias sociales postergadas por una ideología que ha hecho de la precariedad y de la desigualdad", así como de la "insensibilidad de género" y medioambiental "su denominador común".
Además, el socialista gobernará este tiempo indeterminado amarrado a los Presupuestos Generales del Estado del PP. El mantenimiento de esas cuentas, y de las partidas comprometidas con el Pais Vasco, ha sido uno de los factores clave- si no el principal- para que el PNV se decantara por dar el 'sí' a la moción. Sánchez se lo agradecerá otorgándoles el papel de "socios preferentes", tal y como anunció este jueves.
También quiere iniciar una nueva etapa en las relaciones complejas y delicadas entre PSOE y Podemos. Sánchez ha pedido al líder 'morado', Pablo Iglesias, empezar a "trabajar juntos" con "humildad". Iglesias ha vuelto a abogar este viernes por formar un Ejecutivo "integrador" y se postula para formar parte de ese nuevo Gobierno del PSOE, aunque reconoce que no lo han hablado.
A PDeCAT y ERC, Sánchez les ha instado a iniciar un nuevo proceso de diálogo. Con este fin, se reunirá con el president Quim Torra y finalmente será el socialista, quien ha respaldado al Gobierno en la aplicación del artículo 155, el encargado de levantar este precepto constitucional nunca antes empleado en democracia.
Sánchez pide "lealtad" al PP, al que insta a "renovarse"
"¿Se han preguntado por qué nadie quiere acompañarles, ni tan siquiera su socio de Gobierno?", ha preguntado este viernes Sánchez al PP, partido que pasa ahora a ser la principal formación de la oposición, al que ha exigido la misma "lealtad" que la ofrecida por el PSOE en lo referente a la crisis con Cataluña.
En un tono más conciliador con los 'populares', ha reconocido la "enorme importancia" del PP en la política española, por lo que le ha instado a "renovar su liderazgo" ofreciendo a los ciudadanos "dirigentes limpios". Ha ido más allá para decir que no cree que el PP sea un partido corrupto y se ha mostrado convencido de que existen en su seno "militantes, diputados y concejales que desempeñan su tarea y defienden su ideología de manera honesta y limpia", aunque sí le ha echado en cara haber "consentido y convivido con la corrupción".
Sánchez ha vuelto a desear "en lo personal" lo mejor a Rajoy, al que ha mostrado su respeto como "expresidente del Gobierno".
También ha aprovechado para volver a cargar contra Ciudadanos, partido al que ha acusado de "aprovecharse de la confrontación territorial para sacar réditos políticos" y de "encubrir los casos de corrupción del PP". Rivera, al finalizar la votación, ha hablado de "Gobierno débil y Frankenstein" sostenido en "populistas y separatistas".
Con la votación final, que quedará en los libros de historia, se ha puesto fin a un debate parlamentario que Sánchez arrancó sin saber el resultado final, y que finalmente ha puesto en sus manos el Gobierno de España.