El número dos de Hacienda en funciones dice que no hay "ni una sola factura" firmada por él de cuando era alcalde de Jaén
- Ha declarado como investigado por prevaricación y malversación de caudales públicos
- Los hechos investigados ocurrieron entre 2012 y 2013 en la capital jienense
El secretario de Estado de Hacienda en funciones, José Enrique Fernández de Moya, ha asegurado este martes que no hay "una sola factura" firmada por él tras declarar como investigado por prevaricación y malversación de caudales públicos cuando era alcalde de la capital jiennense.
Fernández de Moya ha declarado en el Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén, a donde ha llegado las 11.00 horas con semblante serio, entre las miradas de curiosos y medios de comunicación y acompañado por el secretario general del PP de Jaén, Francisco Palacios, y el vicesecretario del PP de Jaén y concejal en el Ayuntamiento, Miguel Contreras.
También lo esperaban, desde las 9.00 horas, una veintena de miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), entre los que se encontraba el que fue su representante en Jaén, Andrés Bódalo, en situación de tercer grado penitenciario tras ser condenado a tres años y medio de cárcel por agredir a un concejal socialista.
Durante unas dos horas, los miembros del SAT han estado concentrados coreando consignas como "Partido Popular, banda criminal", "tenemos las solución: corruptos a prisión" o "Fernández de Moya a Soto del Real", entre otras frases.
El todavía secretario de Estado de Hacienda ha dicho antes de entrar que se encontraba tranquilo y, a su salida, casi dos horas después, ha manifestado a los periodistas que no quería hacer declaraciones "por respeto a la instrucción y al juez instructor" y solo ha dicho: "no hay una sola factura firmada por mí".
Otros investigados en la causa
Junto a Fernández de Moya han declarado este martes, también como investigados, la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Jaén, Rosa Cárdenas, un técnico municipal, y el representante de la empresa Matinsreg, Gregorio González.
Los hechos investigados, a raíz de una querella presentada el grupo socialista, ocurrieron entre 2012 y 2013, cuando presuntamente Fernández de Moya ordenó, en contra de los informes del interventor, varios pagos a la empresa Matinsreg, encargada del mantenimiento de las fuentes ornamentales de la ciudad.
Las diligencias previas indican que supuestamente se facturaban de forma falsa gran cantidad de horas de trabajo no realizadas, de imposible ejecución con el personal de la empresa, lo que supuso un coste para el Ayuntamiento superior a los 3,6 millones de euros.
La semana pasada prestaron declaración como testigos el secretario y el interventor del Ayuntamiento de Jaén que advirtieron sobre las facturas y los trabajos que la empresa Matinsreg.
También declararon como testigos un técnico de mantenimiento del Ayuntamiento y el director de Imesapi, empresa que se encargó del mantenimiento de las fuentes ornamentales en la ciudad antes de la llegada de Matinsreg.