La Corte Penal Internacional absuelve al exvicepresidente del Congo condenado por crímenes de guerra

• Jean-Pierre Bemba fue condenado a 18 años por asesinatos y violaciones
• Una sala de Apelaciones concluye que no está demostrada su responsabilidad

El exvicepresidente congoleño, Jean-Pierre Bemba, en La Haya en 2009-

La Corte Penal Internacional (CPI) ha revertido este viernes la condena a 18 años de cárcel del exvicepresidente de la República Democrática del Congo (RDC), República Democrática del CongoJean-Pierre Bemba, y lo ha absuelto por los crímenes de guerra cometidos por sus tropas en la vecina República Centroafricana entre 2002 y 2003.

Los hechos juzgados sucedieron cuando las tropas del Movimiento de Liberación del Congo lideradas por Bemba cruzaron la frontera para apoyar al entonces presidente centroafricano, Ange-Félix Patassé, tras un intento de golpe de Estado.

Una Sala de Apelaciones de la CPI ha concluido que la condena firmada en 2016 no demostró totalmente que Bemba no tomara suficientes medidas para evitar los delitos de violación y asesinato cometidos por sus hombres.

Sin responsabilidad penal

La jueza a cargo del recurso y presidenta del tribunal, Christine Van den Wijngaert, ha explicado que los jueces no han considerado las medidas disciplinarias tomadas por Bemba para contener a sus tropas y detener los crímenes y que "los graves errores cometidos por la Sala de Primera Instancia eliminan por completo su responsabilidad penal".

Van den Wijngaert ha añadido que la sentencia tampoco reflejaba las posibilidades reales del político congoleño para investigar los delitos cometidos en el país vecino.

La decisión de la corte ha sido por mayoría de 3 a 2 y era hasta ahora la pena más dura de la historia de la CPI, además del primer caso que centró sus pesquisas en la violación sexual como crimen de guerra y lesa humanidad. Bemba, que lleva diez años detenido en La Haya, no será liberado inmediatamente, a la espera de otro juicio pendiente ante la corte.

Decenas de seguidores de Bemba, congregados en la galería pública de la CPI, han estallado en gritos de júbilo al escuchar el fallo. Sin embargo, los representantes de las víctimas han protestado ante los guardias de seguridad del tribunal.