Pedro Sánchez da orden de acoger al barco Aquarius en Valencia ante la "crisis humanitaria"
- Italia impidió que atracase el domingo y Malta tampoco resolvió su situación
- Malta envía galletas y agua mientras crece la ansiedad entre los migrantes
- Valencia, País Vasco, Cataluña o Aragón ofrecen acoger a los migrantes
- Borrel responde a Salvini: "Es una victoria para la gente que está en el barco"
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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dado instrucciones para que España "cumpla con los compromisos internacionales en materia de crisis humanitarias" y acoja al barco Aquarius, en el que se encuentran 629 migrantes abandonados a su suerte en el Mediterráneo después de que Italia, que "dice 'no' al tráfico de seres humanos", y Malta les negaran el permiso para desembarcar el domingo
El Gobierno ha informado en un comunicado de la decisión del jefe del Ejecutivo y ha adelantado que el destino del buque será el puerto de Valencia "un puerto seguro", previa coordinación con la Generalitat valenciana. Precisamente el Ayuntamiento de Valencia, junto con el de Barcelona, habían ofrecido su puerto para poder desembarcar a los migrantes. "Valencia no deja a nadie a la deriva", ha celebrado la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, tras conocer la decisión de Sánchez.
Por su parte, la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), ha declarado que la decisión del Gobierno de España "demuestra liderazgo moral y legal" del país, "algo que escasea estos en el día en el mundo", según ha declarado su portavoz, Leonard Doyle, a Efe. También las ONG han agradecido al Gobierno su decisión, entre ellas UNICEF y ACNUR. Desde el PP, la única reacción por el momento ha venido de parte de su líder catalán, Xavier García Albiol, que ha advertido de que "España no se puede convertir en una gran ONG en la que todo el mundo pueda venir a nuestro país".
Entre los migrantes a bordo del barco hay niños y mujeres embarazadas, que han pasado la noche varados entre Italia y Malta, según informa la periodista de RNE Sara Alonso, que se encuentra a bordo del buque. El barco continúa parado a la espera de instrucciones de las autoridades o confirmación oficial de la decisión, según ha confirmado la ONG SOS Méditerranée. Una realidad que contrasta con la "victoria" cantada por el ministro de interior italiano, Matteo Salvini, que ha celebrado que el barco vaya "rumbo a España". Con todo, fuentes que coordinan el dispositivo consultadas por Efe aseguran que el barco llegará a España entre el jueves y viernes.
Malta envía alimentos al barco mientras crece la ansiedad
Aunque los migrantes han celebrado haber sido salvados de las aguas, la "desesperación" y la "ansiedad" van en aumento según pasan las horas en el barco inmóvil, donde el calor apremia y se requiere atención médica para los mareos y la deshidratación. La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), que coopera en el Aquarius, ha informado de que un hombre "ha llegado a amenazar con saltar por la borda diciendo que tenía miedo de que le devolvieran a Libia".
Sin embargo, el mayor temor ahora son los abastecimientos: MSF ha advertido que no habrá comida suficiente a partir de este martes, y la ONG española Proactiva Open Arms, informa Alonso.
También el primer ministro maltés, Joseph Mucat, ha anunciado en Twitter que enviará abastecimientos al Aquarius. "Agradezco al presidente de España, Pedro Sánchez, por acoger el Aquarius después de que Italia vulnerase las normas internacionales y provocase un enfrentamiento. Malta enviará suministros frescos al barco. Tendremos que sentarnos y discutir cómo evitar que esto vuelva a ocurrir. Es un asunto europeo", ha escrito, después de "no asegurar ningún tipo de intervención humanitaria" el domingo.
Así, según informa Sara Alonso desde el Aquarius, el barco ya ha recibido "galletas y agua" desde una lancha maltesa y la tripulación prepara el reparto de la cena del lunes. En concreto, han llegado "950 botellas de agua, 800 paquetes de fideos instantáneos y refrigerios", ha especificado MSF.
Varias comunidades se ofrecen a acoger a los migrantes
Por el momento, el nuevo destino no se ha confirmado en el barco, según informa Alonso a través de Twitter. "Todo sigue igual a bordo", explica, mientras especifica que "tardarían varios días" en llegar a España, porque se encuentran a 700 millas naúticas (1.300 kilómetros) del puerto valenciano.
El ministro de Exteriores español, Josep Borrel, no ha sabido estimar cúando llegarán a Valencia, si bien sí ha asegurado que "está todo preparado para acogerles".
También el lehendakari, Íñigo Urkullu, ha ofrecido al Gobierno "acoger el 10% de los migrantes" en el País Vasco, oferta a la que se han unido Castilla-La Mancha, Aragón, Cataluña o la Junta de Extremadura.
Ante la petición, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha pedido al presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Abel Caballero, que coordine a los Ayuntamientos que solicitan acoger a los refugiados a bordo del barco para repartir la ayuda.
Borrell: "Es una victoria para la gente que está en el barco"
En declaraciones a la prensa, Borrell ha respondido a la "victoria" cantada por Matteo Salvini: "Sin duda es una victoria para la gente que está en el barco", ha señalado. Además, ha explicado que la decisión del Ejecutivo de Sánchez ha servido para "romper una actitud de mirar para otro lado". "Tómese esto como un acto simbólico. Que todos afrontemos un problema que es de todos, no un año de Italia, el año siguiente de Grecia...Es un problema de todos y debemos hacer frente entre todos", ha dicho.
En la misma línea que Borrel, la minista de Defensa, Margarita, Robles se refería horas antes a la migración en Europa: "Más allá de actuaciones puntuales de los países, que tienen que moverse siempre por solidaridad (...) es imprescindible que la UE no mire para otro lado y en materia de inmigración se está poniendo de perfil en muchas ocasiones", ha dicho, en declaraciones a la Cadena Ser.
Tras la polémica desatada por la negativa italiana, el Parlamento Europeo ha aprobado por 212 votos a favor y 62 en contra debatir el miércoles la gestión de las emergencias humanitarias en el Mediterráneo. Por otro lado, la sesión de julio de la Eurocámara debatirá una resolución con propuestas de nuevas directrices sobre la criminalización de actos humanitarios a raíz del caso de los bomberos sevillanos de la ONG Proem-Aid juzgados en Grecia por presunta tentativa de tráfico de personas.