La fiscalía de Nueva York acusa a Trump de utilizar su fundación para financiar ilegalmente su campaña electoral
- La fiscal general ha presentado una demanda contra el presidente de EE.UU. y varios de sus hijos
- Trump carga contra "los sórdidos demócratas" y asegura que el caso no prosperará en los tribunales
La Fiscalía General de Nueva York ha presentado este jueves una demanda contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, así como contra varios de sus hijos y contra la fundación que lleva su nombre, al considerar que esta incurrió en numerosas irregularidades, entre ellas, costear ilegalmente gastos de la campaña electoral que le llevó a la Casa Blanca en 2016.
"Según revela nuestra investigación, la Fundación Trump era poco más que una chequera para pagos del señor Trump y sus negocios a organizaciones benéficas, sin importar su fin o su legalidad", explica en un comunicado la fiscal general del estado, Barbara D. Underwood.
La Fiscalía ve en la Fundación un "patrón de conducta ilegal persistente", que se habría prolongado durante más de una década y que incluye una "amplia coordinación política ilegal" con la campaña presidencial de Trump, vulnerando las "obligaciones legales básicas" para entidades sin ánimo de lucro.
Una investigación de dos años
La demanda, presentada ante el Tribunal Supremo del Estado de Nueva York, es fruto de una investigación de dos años, que se inició bajo el anterior fiscal general, Eric Schneiderman, que renunció a su cargo en mayo tras conocerse que había abusado físicamente de cuatro mujeres. "El señor Trump dirigió la fundación de acuerdo con su capricho, en lugar de la ley", asegura la denuncia.
Según la acusación, la Fundación Trump recaudó más de 2,8 millones de dólares con el fin de influir en las elecciones de 2016 y bajo control de la dirección de la campaña del ahora presidente. Además, Underwood acusa a Trump de haber utilizado su Fundación para pagar gastos legales, promocionar sus hoteles y otros negocios y para adquirir artículos personales.
Por ello, pide la disolución de la fundación, la restitución de los daños causados por las irregularidades y apartar a Trump de la dirección de organizaciones sin ánimo de lucro durante un periodo de diez años. Además, están acusados como directores de la Fundación sus hijos Donald Jr., Ivanka y Eric, para quienes la Fiscalía pide una inhabilitación de un año en ese tipo de cargos.
Trump se revuelve contra la acusación
Poco después de conocerse las acusaciones, Trump se ha defendido a través de Twitter: "Los sórdidos demócratas de Nueva York […] están haciendo todo lo posible para demandarme por una fundación que recaudó 18.800.000 dólares y donó a la caridad más dinero del que tomó, 19.200.000 dólares", ha escrito, apostillando: "¡Este caso no saldrá adelante!".
En otro mensaje, el mandatario también carga contra Eric Schneiderman , al que califica de "deshonesto", y asegura que "nunca tuvo las agallas para presentar este caso ridículo, que revoloteó por su oficina durante casi dos años".
En cualquier caso, la demanda abre un nuevo frente judicial para Trump, con su campaña ya cuestionada por las supuestas injerencias de Rusia, que han llevado al fiscal especial de la trama rusa, Robert Mueller, a plantearse que declare el propio presidente.