Una prueba de ADN revela que un matrimonio mató a su hija hace 30 años en Francia
- La niña, de cuatro años y sin identificar, fue encontrada en una autopista en 1987
- La desaparición del censo y el ADN llevaron a la Policía hasta los padres
Unos padres fueron detenidos el martes en Francia después de que una investigación de más de tres décadas los situase como principales sospechosos de la muerte de una niña de cuatro años, cuyo cadáver apareció junto a una autopista en la localidad de Suèvres, en 1987.
La pequeña, conocida como 'la mártir de la A10', fue encontrada envuelta en una manta, mutilada, con rastros de quemaduras de plancha, cicatrices de mordidas humanas y llena de hematomas. No se consiguió identificarla y nadie reclamó su cadáver. Según el juzgado de instrucción de Blois, se trata de un caso "prácticamente de antropofagia con eliminación de carne".
El caso fue cerrado en 1997, aunque se hicieron pruebas de cotejo del ADN encontrado en la manta en dos ocasiones: la primera, en 2008, sin resultados, y la segunda, en 2017, que coincidió con un joven que había sido detenido en 2016 por violencia. El joven resultó ser el hermano de la niña, lo que permitió a los investigadores seguir la pista hasta la pareja, localizados en los departamentos de Aisne y Seine-Saint-Denis.
El censo, la pista incriminatoria
Tras verificar los registros, la Policía comprobó que Ynas, una de los siete hijos de la pareja, que aparecía en las solicitudes de ayudas sociales, no había vuelto a ser censada. Los padres, sexagenarios, de origen marroquí y separados desde 2010, están acusados de asesinato y violencia contra menores de 15 de años y serán llevados ante el Tribunal de Gran Instancia de Blois.
La madre niega la muerte de la niña y dice que Ynass estaba en Marruecos bajo el cuidado de su abuela, según una fuente próxima a la investigación consultada por AFP.
El padre confesó en el acto al ser detenido y acusa a la madre de ser violenta con la niña, con sus dos hermanas y con él, mientras que la madre asegura que fue el padre el responsable. Según su versión, encontró a la niña muerta después de caerse por las escaleras. Después, mientras se dirigían a Marruecos con sus hijos a bordo del coche, abandonaron su cuerpo a lo largo de la autopista.
Tres décadas de investigación en 30 países
En el momento del suceso, la Policía lanzó la mayor investigación judicial jamás realizada en Francia, en la que registraron 65.000 escuelas y consultaron con más de 6.000 doctores o cuidadores la identidad de la niña.
Además, el informe de la niña fue transmitido a más de 30 países y su fotografía fue publicada en todos los lugares públicos.
El desenlace del caso ha causado un gran revuelo entre los vecinos de Suèvres, que durante años han depositado flores en la tumba anónima de la pequeña, sin esperar a que el crimen llegara a resolverse. El alcalde de la localidad, Raphaël Pilleboue, ha destacado al diario La République du Centre, los esfuerzos de los gendarmes, "que nunca han abandonado" la búsqueda.