Las muertes de inmigrantes por calor en la frontera sur estadounidense se disparan un 55% desde septiembre

• En los últimos ocho meses, 48 personas han fallecido en la frontera entre EE.UU. y México por las temperaturas extremas
• La Patrulla Fronteriza denuncia que se duplica el número de niños solos y se quintuplica el de familias que intentan cruzar

Una familia de refugiados hondureños espera en México después de que les nieguen la entrada en Texas.

El número de inmigrantes que mueren en la frontera de Estados Unidos y México por el calor extremo aumentó un 55% desde el mes de septiembre después del incremento de familias y niños no acompañados que intentan entrar ilegalmente en territorio estadounidense, según ha informado el gobierno federal.

El número de fallecidos relacionados con el calor (la principal causa mortal de los inmigrantes en la frontera suroeste de Estados Unidos) se elevó a 48, frente a 31 en el mismo período del año pasado, según Salvador Zamora, portavoz de la Patrulla Fronteriza de EE.UU.

Zamora espera que la cifra de muertos aumente cuando el calor se dispare en los meses de verano con más inmigrantes vulnerables y no aclimatados intentando cruzar parajes hostiles. La Patrulla Fronteriza ha registrado un aumento interanual del 12% en las detenciones de inmigrantes en los ocho meses que van desde finales de septiembre hasta el 31 de mayo.

En una entrevista telefónica, Zamora afirma que están "preparados para superar las muertes relacionadas con el calor del año pasado y el verano acaba de emprezar". Especifica que la demografía de los extranjeros ilegales ha cambiado y que "las unidades familiares, los niños no acompañados, son mucho más vulnerables, que los adultos solos".

"Menos gente cruzando, más gente muriendo"

Grupos humanitarios como Border Angels, con sede en San Diego, dicen que la causa principal del aumento de las muertes es una mayor seguridad fronteriza y la aplicación más estricta de la ley, con una política de "tolerancia cero" para las personas que cruzan la frontera ilegalmente. Eso ha provocado que los inmigrantes realicen largas caminatas a través de terreno hostil para cruzar por puntos remotos menos controlados.

El fundador de una oenegé que deja agua para los inmigrantes, Enrique Morones, señala que han visto "personas que cruzan en áreas más peligrosas, por lo que incluso aunque hay menos gente cruzando, hay más personas muriendo".

Hasta hace cuatro años, la gran mayoría de los inmigrantes detenidos en la frontera eran mexicanos, pero la mejora de la economía azteca ha hecho descender su número. La cifra de detenciones en la frontera también ha caído un 26% desde 2016 hasta 303.916 personas, según datos de la Patrulla Fronteriza.

Los inmigrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador ahora encabezan la lista de arrestados, empujados por la violencia relacionada con las maras y la delincuencia organizada se produce un éxodo hacia el norte, de acuerdo con los datos del gobierno de los EE.UU.

415 inmigrantes muertos en 2017

La Organización Internacional de las Naciones Unidas para las Migraciones ha registrado un aumento en las muertes de inmigrantes en los últimos cuatro años, con un total de 415 fallecidos en 2017.

Zamora explica que los inmigrantes, incluidos niños, de zonas subtropicales y áreas montañosas llegan a la frontera mal alimentados, no aclimatados a las temperaturas extremas del desierto

y susceptibles a sufrir por el calor y el agotamiento. La Patrulla Fronteriza indica que las familias detenidas se han quintuplicado en cinco años, mientras que el número de niños no acompañados detenidos en 2017 fue casi el doble que en 2010.

El integrante de Border Angels, James Cordero, ha visto un aumento en pocos meses de las familias migrantes que caminan por las montañas de California en base a los pañales, zapatos y mochilas infantiles que dejan atrás. "Realmente sabes que alguien está saliendo de una mala situación si están dispuestos a arriesgar sus vidas y las de sus hijos para tener la oportunidad de vivir mejor", asegura Cordero.

Morones sospecha que los agentes de la Patrulla Fronteriza han destruido suministros de agua dejados por su grupo. Uno de esos actos vandálico fue grabado en video en Arizona por otro grupo humanitario llamado No Más Muertes.

El portavoz policial dijo que la destrucción de suministros de agua es "inaceptable" y de ninguna manera representa los valores de la agencia. La Patrulla Fronteriza lleva a cabo sus propios rescates humanitarios, que aumentaron ligeramente hasta 748 personas de finales de septiembre a mayo.