Suspenden el juicio por el robo de bebés al ingresar en urgencias el doctor Vela por mareos
- Este martes arrancó el juicio contra Vela acusado del robo de un bebé en 1969, un hecho que el ginecólogo negó
- Es el primer juicio sobre niños robados en España y las víctimas esperan que se reabran más casos
La Audiencia Provincial de Madrid ha suspendido este miércoles la segunda y última sesión del juicio contra el doctor Eduardo Vela por el robo de un bebé, tras no comparecer porque ha sido ingresado en el hospital tras sufrir un episodio de "mareos" y "dolores", que requirió que fuera asistido por urgencias.
Este miércoles estaba previsto continuar el juicio, el primero de estas características que se celebra en España, que comenzó este martes contra Vela, para quien la Fiscalía pide 11 años de prisión por participar en el robo de Inés Madrigal, que nació en 1969 en la Clínica San Ramón y fue sustraída de su madre biológica y entregada a una mujer estéril, a quien Vela le había recomendado fingir un embarazo con cojines.
Tras escuchar a las partes, la presidenta del tribunal, María Luisa Aparicio, ha acordado que no se puede continuar en este momento la celebración del juicio al no conocer su situación de salud. Además, ha dado un plazo hasta las 12.30 horas de este miércoles para fijar un nuevo señalamiento si Vela sigue ingresado.
Previsiblemente, se señalará la vista para la próxima semana. Según la ley, hay un plazo de 30 días para que la práctica testifical de un juicio que se haya tenido que suspender deje de ser válida. Si transcurre ese plazo, se tendría que repetir su declaración.
Vela no reconoció su firma en la partida de nacimiento
Vela se sienta desde este martes en el banquillo de los acusados por delitos de detención ilegal, suposición al parto, falsedad documental y sustracción de menores. La fiscal pide 11 años de prisión, mientras que la acusación particular que representa a la denunciante Inés Madrigal eleva éste petición a 13 años de prisión.
Ya en la primera sesión, el médico jubilado intentó evitar su declaración alegando motivos de salud. Sin embargo, los forenses de la Audiencia madrileña determinaron que sí estaba en condición de comparecer en el juicio.
En su declaración, el acusado tuvo dificultades para contestar por su visible debilidad ante su avanzada edad de 86 años. Vela siguió el juicio sentado en una silla de ruedas.
A preguntas de la fiscal, afirmó que no entregó ninguna niña "a nadie" y aseguró que no reconocía su firma en la partida de nacimiento de Inés Madrigal, la denunciante del caso.
Estaba previsto que comparecieran cinco testigos, entre ellos unas periodistas francesas que hicieron una cámara oculta a la mujer del ginecólogo, quien habría reconocido que entregó el bebé a la madre.
Las familias piden justicia
Algunas de las familias afectadas y asociaciones se concentraron este martes ante la Audiencia pidiendo justicia, la reapertura de más casos y el fin de un largo calvario en los tribunales. Además, demostraron su apoyo a la denunciante, Inés Madrigal que aseguró que su caso "ya no es solo suyo".
Han transcurrido casi siete años desde que la denuncia contra la monja conocida como sor María arrancara las primeras investigaciones judiciales por los casos de niños robados en nuestro país.
Muchas fueron archivadas y cayeron en el olvido ante la desesperación de las familias afectadas, hasta 2016, cuando una juez propuso llevar a juicio al doctor Eduardo Vela. Un ginecólogo que, junto con la religiosa fallecida, supuestamente manejaron el destino de decenas de recién nacidos en la Clínica San Ramón de Madrid, epicentro del drama, entre las décadas de los 50 y los 70.
Los recién nacidos eran sustraídos en diversas clínicas y a los padres se les decía que habían muerto al nacer o a las pocas horas, víctimas de alguna infección y aceleraban los trámites de enterramiento, sin la participación de la familia.