Oteyza viste el movimiento del Ballet Nacional de España

• Los trajes se transforman y cobran vida sobre los cuerpos de los bailarines
• Antonio Najarro, director del BNE, 'baila' la capa española
• Los pantalones y chaquetas que se abren y permiten libertad de movimiento
• El desfile ofrece una mezcla de tradición, historia y arte... cultura
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La tradición, historia, moda y cultura se mezclan en el desfile de Oteyza.

En la conversación aparecen palabras como baile, capa, cultura, galerna, tradición, pliegue, vanguardia, castañuela, alpargata, folclor y, sobre todo, arte. Arte es el que tienen Antonio Najarro, director de Ballet Nacional de España (BNE), y Caterina Pañeda y Paul García de Oteyza, directores creativos de Oteyza. Los tres hilvanan discursos similares sobre moda y danza, sobre tejidos y movimiento, sobre patrones y figuras. Oteyza, una de las firmas más importantes de la sastrería española, se alía ahora con Najarro para presentar su nueva colección que han titulado Raíces.

“La presentación de las prendas es un juego de lenguajes entre los dos”, dice Paul. “Hemos querido que haya una conexión entre el bailarín, el alma de la firma y el relato”. Para ello han montado un cubo de tela sobre el que aparecen formas oníricas que aparecen y desaparecen hasta convertirse en el modelo real, en este caso el bailarín. Convertir el sueño en realidad. “El movimiento es vital en nosotros”, dice Caterina, “y por eso contar con Antonio Najarro es algo coherente en nuestro recorrido, es una forma fantástica de expresar nuestra moda masculina”.

Antonio Najarro 'baila' la capa de Oteyza. Efe noticias

El director del BNE, y sus bailarinas, ya colaboraron con Duyos pero ahora es una acción distinta. Ropa de hombre muy conectada con la tradición, la historia y la sastrería tradicional traída a la actualidad. “Me resulta fascinante ver como sus bases de inspiración son muy semejantes a las de la danza española”, dice Najarro. “Bebemos de las mismas raíces y tradiciones pero evolucionamos hacia una estética vanguardista. La capa española, el sombrero y las alpargatas de Oteyza están muy presentes en nuestros espectáculos de folclor aragonés, por ejemplo”.

Diez bailarines, los solistas y otros del cuerpo de baile, han llevado trajes muy especiales que están conectados con la colección anterior, presentada también en Matadero. Los trajes tienen líneas muy marcadas y los tejidos son más ligeros. Las chaquetas son más amplias, gracias a un perfecto trabajo de botonaduras y pliegues -muy generosos- que aportan vuelo y ofrecen libertad de movimiento. “Hay mucha lana merino, linos y en colores hay una gama de arena, beis, amarillo y blanco, para el día, y otra gama de azules verdosos y tonos violáceos para la noche”, dice Paul.

El blanco irrumpe en una paleta de tonos serios. Efe noticias

A pesar de ser una colección de verano vemos capas, “porque no podían faltar teniendo a los bailarines y a Antonio”, dicen los sastres. Vemos una sobre una galerna negra combinada con un pantalón Loira que proyecta una imagen brutal que conecta con la tradición y el folclor. Hay chaquetas más vanguardistas con formas geométricas y otras con solapas dobles y hermosos trajes luminosos en amarillo mostaza. Piezas novedosas que fusionan patrones de una chaqueta y un chaleco, pantalones abiertos inspirados en los de los pescadores, camisas impecables en un piqué inmaculado con el cuello alzado que “aporta un aire distinguido, altivo y muy masculino”, añade Paul.

Dos bailarines del BNE lucen la moda de Oteyza. Efe noticias

Las alpargatas huertanas son otro punto de conexión con la historia pero también con el folclor. Una conexión que se potencia con la música de Orbital que se mezcla con un cante de trilla que se entona en época de siega. El resultado es un potente espectáculo visual, de fuerte carga estética y mucha belleza. “Son elementos que definen la tradición y cultura de este país. La creación cobra vida”, dice Caterina. “Es acción, drama y sobre todo arte”, apunta Najarro. Un espectáculo que va más allá de la moda y que los tres quieren llevarlo fuera para que se vea en otros escenarios de España pero también en París o en Boston.

Hay prendas versátiles que encajan en el armario de la mujer pero es una colección masculina, concebida y hecha para hombres. “Nos gustaría que el hombre esté, estéticamente, donde estuvo hace tiempo”, dice Caterna haciendo referencia a la ‘gran renuncia masculina, cuando la moda de hombre perdió fuerza mientras la moda femenina vivía un apoteosis, como señala Lipovestky.

Najarro y los bailarines del BNE en el desfile de Oteyza. Efe noticias

El hombre hoy busca recuperar su espacio, cambiando los armarios y abriéndose a nuevas sensaciones. La sastrería es crucial para esta aventura y firmas como Oteyza y García Madrid son buenos compañeros de viaje. Por eso es tan importante que se haya creado la primera Cátedra de Moda Masculina de España. Un nuevo instrumento académico en el que están integrados el Instituto Europeo Di Design de Madrid (IED), Oteyza y la agencia Efe a través de su portal Efe Estilo que, como explicaron, “contempla la generación y transferencia de conocimiento en campos como la investigación la conceptualización, el diseño y la comunicación de moda masculina.

El movimiento del cuerpo de los bailarines se viste con la moda de Oteyza. Efe noticias

La Cátedra Oteyza, impartida por Paul, tiene el loable objetivo de desarrollar un proyecto de investigación sobre moda masculina para que los alumnos tengan referencias y referentes, ahora prácticamente inexistentes. La base del estudio será el Cambio de Paradigma de la Moda Masculina y tendraá dos ejes: revisitar la moda de hombre a través de la lana merina española desde el siglo XVI a la actualidad y la contextualización del proyecto y la prenda. El proyecto mejor valorado se premiará con unas prácticas en el taller de la sastrería y en la redacción de Efe Estilo, cuyo equipo recibió en 2017 el Premio Nacional de Moda, en el apartado de comunicación, que entrega el Ministerio de Industria.