Enlaces accesibilidad
Nicaragua

La brecha en la sociedad nicaragüense se plasma en la manifestación del Día Nacional del Estudiante

  • El FSLN se niega a dejar el poder en Nicaragua y los opositores exigen su renuncia
  • El Día Nacional del Estudiante recuerda la "masacre estudiantil" de 1959

Por
Decenas de personas participan en una marcha en apoyo a los estudiantes nicaragüenses y en rechazo al presidente Daniel Ortega
Decenas de personas participan en una marcha en apoyo a los estudiantes nicaragüenses y en rechazo al presidente Daniel Ortega

La sociedad nicaraguense sigue dividida en dos bandos enfrentados. Esta realidad se ha remarcado en las dos manifestaciones celebradas este pasado lunes por el Día Nacional del Estudiante que recuerda la "masacre estudiantil" de 1959 en Nicaragua.

La protesta se materializó en diferentes ciudades de Nicaragua, que atraviesa una crisis sociopolítica desde el 18 de abril que, según datos de distintas organizaciones de derechos humanos, ha dejado entre 277 y 351 muertos en tres meses.

La concentración ‘opositora’ la formaron unos cinco millares de personas en su mayoría jóvenes universitarios que abanderaban el lema “Unidos por la libertad y la justicia” en la que nuevamente exigieron la salida del mandatario del poder y reclamaron paz, justicia y el cese de la represión.

Mientras ondeaban la bandera azul y blanca de Nicaragua, guardaron un minuto de silencio por las víctimas y algunos exhibieron la Ley de Autonomía Universitaria exaltando el hecho de que en más de medio siglo de existencia jamás había sido violada por ningún presidente, hasta que lo hizo el actual. También portaban múltiples fotografías de universitarios asesinados por las “fuerzas combinadas” gubernamentales, integradas por policías, paramilitares y antimotines.

Respaldo al gobierno de Ortega

Por otra parte, los miembros de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN) de la juventud sandinista, también se manifestaron respaldando al presidente y defendiendo su continuidad en el poder: “Estamos exigiendo que se aplique la ley para todos aquellos asesinos golpistas” declaró el presidente de la UNEN, Luis Andino, además de exigir “justicia para las víctimas del terrorismo”.

En este caso, los manifestados portaron además de la bandera nicaragüense, banderas rojas y negras del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), e hicieron muestra de fotografías de los policías y civiles muertos durante las protestas.

Ambas manifestaciones transcurrieron sin incidentes pero con la diferencia de que los simpatizantes del FSLN estuvieron custodiados por agentes de tráfico y antidisturbios mientras que la concentración de los ‘opositores’ no contó con protección alguna.

El presidente Daniel Ortega, haciendo caso omiso al clamor popular por su renuncia e ignorando las exigencias de la Organización de los Estados de América (OEA) además de las de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, aseguró este lunes en una entrevista a Fox News que el adelanto de las elecciones nicaragüenses para marzo de 2019 crearía “inestabilidad e inseguridad” y “empeoraría las cosas”. Achacó los enfrentamientos violentos a grupos paramilitares financiados por algunos diputados opositores y el narcotráfico.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) han responsabilizado al Estado y al Gobierno de la violencia y las graves violaciones a los derechos humanos en el marco de la actual crisis de Nicaragua. Las violaciones incluyen “asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias contra la población mayoritariamente joven del país” según la CIDH.