España acogerá desde el sábado a los solicitantes de asilo devueltos por Alemania

• Los migrantes que lleguen a Alemania y hayan solicitado asilo previamente en España serán devueltos en 48 horas
• El Gobierno de Merkel negocia con Italia y Grecia un pacto similar al acordado con Sánchez en junio

Llegada de un grupo de migrantes al puerto de Motril el pasado 1 de agosto.

Los migrantes en la frontera alemana con Austria que previamente hayan solicitado asilo en España al llegar a Europa, excepto los menores no acompañados, serán devueltos a España a partir del sábado, al entrar en vigor el acuerdo alcanzado por el presidente, Pedro Sánchez, con la canciller alemana, Angela Merkel.

El pacto firmado en junio antes de la cumbre europea sobre migración supone que los solicitantes de asilo en España que lleguen a Alemania desde Austria -donde desde julio se realizan controles- sean acogidos en nuestro país en un plazo de 48 horas.

Además de los menores, las personas que demuestren tener familiares en Alemania podrán regresar al país, según fuentes de Moncloa consultadas por Efe. Precisamente, la medida coincidirá con la reunión de Angela Merkel con Sánchez en Doñana, en la que tratarán "con especial atención" la cuestión migratoria.

Hasta ahora, Alemania solo podía rechazar a migrantes indocumentados que no querían solicitar asilo en Alemania. En cambio, los que quisieran solicitar asilo en Alemania podían entrar, independientemente de que lo hubieran pedido antes en otro país de la Unión Europea.

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Alemania negocia un acuerdo similar con Grecia e Italia

La portavoz del Ministerio del Interior alemán, Eleonore Petermann, ha informado de que la medida se firmó el lunes y ha alabado la "disposición a cooperar de España, que ha actuado aquí de forma ejemplar".

Petermann ha destacado además que Madrid no ha exigido ningún tipo de contraprestación en el pacto, el primero de estas características entre el país germano y un socio europeo. También ha insistido en la importancia de alcanzar este tipo de acuerdos con Grecia e Italia, con quienes continúan las negociaciones porque sí exigen contraprestaciones y donde "la presión en materia de política migratoria es mayor".

El acuerdo alcanzado con España coincide con la reciente crisis de Gobierno en Alemania por las políticas migratorias por las presiones de la CSU, el aliado conservador del Gobierno de Merkel.