Un nuevo estudio presenta dos rutas viables de entrada de los primeros humanos en América
- La que sostiene que llegaron al continente a través de la denominada ruta libre de hielo
- También, la que afirma que lo hicieron por la costa del Pacífico Norte
- Incluso expresa la hipótesis de que pudo darse una combinación de ambas rutas
Recientes evidencias muestran que son viables las dos teorías sobre los primeros pobladores de América, tanto la que sostiene que llegaron al continente a través de la denominada ruta libre de hielo como la que afirma que lo hicieron por la costa del Pacífico Norte, según un nuevo estudio divulgado.
Publicada en la revista Science Advances, la investigación revela que en la actualidad ninguna de las dos teorías puede ser rechazada ni aceptada de manera concluyente. Incluso señala que la entrada y expansión de los primeros nativos americanos pudo darse mediante una combinación de ambas rutas, la interior libre de hielo, conocida como IFC por sus siglas en inglés, y la costera (NPC en inglés).
Durante gran parte del siglo XX, los arqueólogos se inclinaban a dar por segura la ruta IFC, que nacía del interior de Alaska y serpenteaba por llanuras altas de América del Norte entre dos enormes capas de hielo.
En los últimos 20 años, sin embargo, el consenso sobre la IFC se ha ido debilitando por la aparición de evidencias que respaldan la teoría de la NPC, una ruta que se movió por la costa oeste de América del Norte.
Quizá una combinación de la ruta costera y la interior
"Creo que estamos en un momento muy emocionante en el que no podemos excluir la ruta costera ni la interior. En realidad, ambas pudieron ser utilizadas. Y sospecho que probablemente las dos fueron usadas", explicó en una conferencia telefónica Ben Potter, profesor de Antropología en la Universidad de Alaska Fairbanks y uno de los directores de la investigación.
A su juicio, ambas hipótesis "deberían estar sobre la mesa" y es necesario realizar más investigaciones sobre las dos rutas.
Potter recordó, además, que los primeros asentamientos poblacionales inequívocamente americanos datan de hace 14.000 años, pero las evidencias de expansión se remontan a 16.000 años atrás.
Datos genéticos, arqueológicos y paleoecológicos
En su investigación, Potter, David Reich y el resto de expertos analizaron datos genéticos, arqueológicos y paleoecológicos con objeto de identificar las fortalezas y debilidades de las rutas IFC y NPC.
De cara a investigaciones futuras, analizar los ancestros de las actuales poblaciones americanas "utilizando técnicas genómicas va a ser realmente importante", subrayó, por su parte, el profesor Ripan Malhi, del Departamento de Antropología de la Universidad de Illinois. Para ello, es necesario involucrar y contar para las nuevas investigaciones con las comunidades indígenas.