Mueren al menos 48 personas en un ataque suicida contra un centro educativo en Kabul

• El atacante ha hecho estallar los explosivos de su chaleco en la última planta de un colegio privado y mixto
• Las autoridades temen que aumente la cifra de víctimas del atentado, que no ha sido aún reivindicado

Un suicida se ha hecho estallar en un colegio privado de Afganistán

Al menos 48 personas han muerto y otras 67 han resultado heridas en un ataque suicida perpetrado este miércoles contra un centro educativo en Kabul, según el último balance de las autoridades de Afganistán, que temen que la cifra de víctimas aumente.

El portavoz del Ministerio de Salud Pública, Wahidullah Majroh, han confirmado que hay 48 cadáveres en diversos hospitales, si bien se trata de cifras preliminares y todavía están "coordinando" los balances procedentes de varios centros.

El ataque se produjo a primera hora de la tarde, cuando un suicida hizo detonar los explosivos que llevaba en su chaleco en el interior de una escuela del distrito policial número 18, ha explicado el portavoz de la Policía de Kabul, Hashmat Stanekzai.

El objetivo, un colegio privado mixto

"El atacante suicida hizo detonar los explosivos, pegados a su cuerpo, dentro de una clase del Centro Educativo Mawoud", ha detallado. El edificio atacado es un centro privado en el que estudian principalmente menores, tanto niños como niñas, ha explicado el jefe del Departamento de Investigación Criminal de la Policía de Kabul, Salem Almas, en su grupo oficial de Whatsapp.

Mawoud también prepara a estudiantes de instituto para sus exámenes de acceso a la universidad en el último piso del inmueble, en el que habría tenido lugar el atentado y donde se encontraban en ese momento centenares de alumnos y alumnas.

El presidente afgano, Ashraf Gani, ha afirmado que atacar este tipo de instituciones va en contra de las "enseñanzas islámicas" y ha ordenado a las autoridades que investiguen a fondo lo sucedido y proporcionen ayuda "inmediata" a las víctimas, según se indica en un comunicado del Palacio Presidencial.

Nadie ha reivindicado el ataque

Ningún grupo ha reclamado todavía la autoría de la acción, que ha tenido lugar en el barrio de Dasht-e-Barchi, mayoritariamente chií, habitual objetivo del grupo yihadista Estado Islámico.

Los menores son víctimas habituales de la guerra en Afganistán, donde sólo el año pasado 861 niños fallecieron y 2.318 resultaron heridos como consecuencia del conflicto, según datos de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en el país asiático (Unama). La misión ha condenado enérgicamente el atentado de este miércoles, al aseverar que ataca a la comunidad chií y que entre las víctimas hay muchas jóvenes:

"No hay ningún tipo de justificación para atacar civiles en ningún momento, bajo ninguna circunstancia", señala en su cuenta de Twitter.

Kabul, además, ha sido objeto este año de un gran número de importantes ataques. El último de envergadura tuvo lugar a finales de julio, cerca del aeropuerto internacional de Kabul, minutos después de que abandonara la zona el convoy del vicepresidente afgano y antiguo señor de la guerra, Abdul Rashid Dostum; la acción, reivindicada por el Estado Islámico, causó 23 muertos y 107 heridos.